/ viernes 10 de febrero de 2023

A Puerta Cerrada | Confirmado, será Eduardo Rivera

Si Morena llevara candidata mujer al gobierno del estado en la contienda electoral del 2024, no necesariamente la alianza opositora, eventualmente conformada por PAN, PRI y PRD, tendrá que hacer lo mismo, pero la oleada de especulaciones generada por el caso de Rocío Nahle en Veracruz ha contagiado también al blanquiazul, que llevará mano en la postulación del personaje que representará a estos tres partidos políticos en esos comicios.

Ante la hipotética postulación de una mujer en el partido del presidente López Obrador, en lugar de Alejandro Armenta o de Ignacio Mier, o del primo del exgobernador Miguel Barbosa, ¿deberá el bloque opositor llevar una candidata del sexo femenino para igualar las condiciones de género?

La realidad es que no, aunque la sola mención de esa posibilidad alimente las emociones y genere descargas de adrenalina en mujeres como Ana Teresa Aranda Orozco y Genoveva Huerta Villegas, quienes han ocupado y ocupan posiciones de influencia bien ganadas dentro de ese partido.

En 2021, Eduardo Rivera Pérez compitió contra Claudia Rivera Vivanco, lo mismo que tres años atrás, en 2018, cuando la ‘ola’ lopezobradorista hizo que Morena arrasara en la capital y en muchos otros sitios del estado. Así que no tiene que copiarse el modelo del partido en el poder, en el remoto caso de que se concretara.

Si el presidente López Obrador decide postular una mujer en lugar de un hombre en Puebla, para los comicios del próximo año, el PAN y sus partidos aliados no tendrán que replicar la decisión.

De hecho, no lo hará, porque el blanquiazul ha confirmado ya, internamente, que postulará un hombre, y que ese será, como se ha especulado desde hace poco más de un año, Eduardo Rivera.

Una fuente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN le confió a este columnista que el de ayer fue un día relevante para Puebla en el asunto electoral, porque Marko Cortés Mendoza, su dirigente, recibió al presidente municipal de la angelópolis para confirmarle que él será el candidato en la elección de gobernador y que hay buenas condiciones para repetir la coalición de partidos opositores a Morena, con el PRI y el PRD, además de los institutos que el propio edil pueda sumar por su cuenta, como hizo en el 2021.

Un par de semanas atrás, Eduardo Rivera hizo una declaración pública desde Puebla para pedirle a Marko Cortés que definiera ya si habrá o no alianza opositora para contender en el 2024 en contra de los representantes de la 4T.

El edil obtuvo una pronta respuesta y la confirmación de que será él quien cargue con la mayor de las responsabilidades en ese proceso electoral, sin importar quién resulte postulado, por la misma alianza, a la presidencia de la república.

Así que ya no hay que jugar con los escenarios, ni con la condición de género, será Eduardo Rivera. A menos, claro, que él mismo diga que no en los meses por venir.

Pero parece que eso no ocurrirá.

El compromiso de uno fue otorgarle la candidatura, y del otro, encabezar los esfuerzos del partido en el estado.

Un dato adicional, que resulta interesante en el contexto electoral.

Después de platicar con Eduardo Rivera en la sede del Comité Ejecutivo Nacional, Marko Cortés recibió también, por separado, a Mario Riestra Piña, quien, además de diputado federal, es aspirante a la presidencia municipal de Puebla.

Ambos encuentros quedaron registrados ayer mismo en las redes sociales.

Twitter: @jorgerdzc

Si Morena llevara candidata mujer al gobierno del estado en la contienda electoral del 2024, no necesariamente la alianza opositora, eventualmente conformada por PAN, PRI y PRD, tendrá que hacer lo mismo, pero la oleada de especulaciones generada por el caso de Rocío Nahle en Veracruz ha contagiado también al blanquiazul, que llevará mano en la postulación del personaje que representará a estos tres partidos políticos en esos comicios.

Ante la hipotética postulación de una mujer en el partido del presidente López Obrador, en lugar de Alejandro Armenta o de Ignacio Mier, o del primo del exgobernador Miguel Barbosa, ¿deberá el bloque opositor llevar una candidata del sexo femenino para igualar las condiciones de género?

La realidad es que no, aunque la sola mención de esa posibilidad alimente las emociones y genere descargas de adrenalina en mujeres como Ana Teresa Aranda Orozco y Genoveva Huerta Villegas, quienes han ocupado y ocupan posiciones de influencia bien ganadas dentro de ese partido.

En 2021, Eduardo Rivera Pérez compitió contra Claudia Rivera Vivanco, lo mismo que tres años atrás, en 2018, cuando la ‘ola’ lopezobradorista hizo que Morena arrasara en la capital y en muchos otros sitios del estado. Así que no tiene que copiarse el modelo del partido en el poder, en el remoto caso de que se concretara.

Si el presidente López Obrador decide postular una mujer en lugar de un hombre en Puebla, para los comicios del próximo año, el PAN y sus partidos aliados no tendrán que replicar la decisión.

De hecho, no lo hará, porque el blanquiazul ha confirmado ya, internamente, que postulará un hombre, y que ese será, como se ha especulado desde hace poco más de un año, Eduardo Rivera.

Una fuente del Comité Ejecutivo Nacional del PAN le confió a este columnista que el de ayer fue un día relevante para Puebla en el asunto electoral, porque Marko Cortés Mendoza, su dirigente, recibió al presidente municipal de la angelópolis para confirmarle que él será el candidato en la elección de gobernador y que hay buenas condiciones para repetir la coalición de partidos opositores a Morena, con el PRI y el PRD, además de los institutos que el propio edil pueda sumar por su cuenta, como hizo en el 2021.

Un par de semanas atrás, Eduardo Rivera hizo una declaración pública desde Puebla para pedirle a Marko Cortés que definiera ya si habrá o no alianza opositora para contender en el 2024 en contra de los representantes de la 4T.

El edil obtuvo una pronta respuesta y la confirmación de que será él quien cargue con la mayor de las responsabilidades en ese proceso electoral, sin importar quién resulte postulado, por la misma alianza, a la presidencia de la república.

Así que ya no hay que jugar con los escenarios, ni con la condición de género, será Eduardo Rivera. A menos, claro, que él mismo diga que no en los meses por venir.

Pero parece que eso no ocurrirá.

El compromiso de uno fue otorgarle la candidatura, y del otro, encabezar los esfuerzos del partido en el estado.

Un dato adicional, que resulta interesante en el contexto electoral.

Después de platicar con Eduardo Rivera en la sede del Comité Ejecutivo Nacional, Marko Cortés recibió también, por separado, a Mario Riestra Piña, quien, además de diputado federal, es aspirante a la presidencia municipal de Puebla.

Ambos encuentros quedaron registrados ayer mismo en las redes sociales.

Twitter: @jorgerdzc