Si quedó usted exhausto tras observar y padecer las precampañas a la presidencia de la república y al gobierno del estado que protagonizaron los aspirantes de Morena y la autollamada 4T hasta hace unos días, mejor relájese y prepárese para sufrir cuatro meses más de contiendas internas en ese partido político.
Morena ha dispuesto de un largo camino para la definición de candidatos a presidentes municipales y diputados locales en el país, incluido el estado de Puebla, lo que anticipa un nuevo y tortuoso proceso de competencia en la disputa interna por el poder.
Basta con revisar los plazos de la contienda, que serán del doble de tiempo de los establecidos para la elección del candidato a gobernador, para comprender lo que se avecina.
Entre la publicación de la convocatoria para la definición de coordinadores estatales de los comités de defensa de la 4T en nueve entidades federales del país y el anuncio de los ganadores, ocurrido el fin de semana pasado, transcurrieron casi dos meses, algo así como 50 días, del 19 de septiembre al 10 de noviembre.
Para la elección de candidatos a alcaldes y diputados se destinarán prácticamente cuatro meses, si se toman en cuenta las fechas de publicación de convocatoria, que fue el 7 de noviembre, y de declaración o ratificación de candidaturas, como establece el documento, prevista para el próximo 10 de marzo.
Serán poco más de 120 días.
En efecto.
Así ha quedado el calendario electoral en ese partido político, para el caso específico de Puebla:
Del lunes 20 al miércoles 22 de noviembre será el registro de aspirantes a esos dos cargos de elección popular.
Seis semanas después, el miércoles 3 de enero de 2024, se publicarán los registros aprobados.
Dos meses más tarde, el domingo 10 de marzo del mismo año, se emitirá la declaración de candidaturas.
Entre el registro de aspirantes y la declaración de ganadores pasarán casi cuatro meses, tiempo que los personajes interesados en las postulaciones, tanto hombres como mujeres, emplearán, ya sabe usted, para tratar de ganarse la presea anhelada, antes de ir a la elección constitucional.
Volverán entonces algunos de los instrumentos de propaganda y promoción personal que usaron los aspirantes a la presidencia y al gobierno del estado, aunque en menor medida y con variantes, dadas las prohibiciones expresadas en el nuevo documento.
La contienda por la postulación a la presidencia municipal de Puebla será la más mediática de todas.
No se extrañe si llegan al registro más de 10 interesados, entre morenistas, petistas, verde ecologistas y algunos externos.
También habrá ex priistas, ex perredistas y en una de esas hasta ex panistas.
La conveniencia histórica y coyuntural pone a Morena en el objetivo de políticos de todos los colores, por lo que habrá de todo en la rebatinga que se dará incluso en medio de los festejos navideños y las celebraciones por el recibimiento del nuevo año.
Los partidos opositores, que por sus circunstancias fueron silenciosos para definir candidato a gobernador en la persona de Eduardo Rivera Pérez, abonarán a la guerra, y al espectáculo, en el resto de las postulaciones.
Mejor alístese y disfrute.
X: @jorgerdzc