En mi pasada contribución, señale la importancia de la pobreza y, considere algunos criterios para enfrentarla, la cual debe ser el tema central de la agenda política, de los aspirantes a los distintos cargos de elección y; de cara a la ciudadanía, señalar como la abordarán para no que no continúe incrementándose, pues su efecto inmediato repercutirá en el desarrollo social.
Lamentablemente el incremento en la pobreza, aunado a la cada vez creciente inseguridad, las frecuentes masacres que se suscitan de manera recurrente en una gran cantidad de regiones del país, y el incremento en el desempleo, generan desesperanza y frustración en un alto porcentaje de la población
Estos temas, sin duda deben ser motivo de duros cuestionamientos y que deben estar presentes en la agenda política de los aspirantes en todo el territorio nacional, de no atenderse mediante acciones estratégicas inmediatas, podrían generar problemas mayores en diversas localidades del territorio nacional.
Situación que plantea tomar como prioridad el desarrollo humano, el cual debe incluir la inversión privada y el impulso eficiente del gasto público y, de retomar, profundizar o flexibilizar la reforma laboral.
Debido a que el desarrollo humano, plantea una nueva exigencia, pues cuenta no solo con una ciudadanía dinámica la cual se encuentra inmersa en el cambio tecnológico y el desarrollo de la productividad, sino porque requiere mejorar la educación, su calidad e inclusión, en la transformación del país.
Es decir, que de manera colegiada o en forma colectiva se cuestione los temas y sus posibles soluciones, para atender o responder de manera puntal a cada una de las necesidades o a su dificultad, la cual permitan no solo responder, sino que den certeza a las demandas de cada grupo o núcleo social.
De esta manera, la agenda político-social, debe representar la legitima expresión, que incluya los aportes y los consensos alcanzados por amplios y distintos sectores de la sociedad.
Inmersos prácticamente en el proceso electoral 2021, aunado a lo difícil y complejo que ha resultado la pandemia del Covod-19, México al igual que la mayoría de las economías en el mundo, enfrenta graves problemas muchos de los cuales son de carácter estructural.
Representará para quienes buscaran la representación popular, un reto mayúsculo, para retomar e impulsar el desarrollo económico y social, que nos permita aminorar la pobreza.
Sin embargo, es casi un hecho, que la “agenda política” no ocupa un lugar relevante en la vida cotidiana de la opinión pública. pues hoy por hoy, un alto porcentaje de los ciudadanos están esperanzados en obtener la vacuna contra el Covid-19, la cual permita volver a la vida normal y salir del confinamiento, al tiempo de poder buscar nuevas oportunidades para mejorar su condición económica la cual en un gran número de casos ha sido precaria.
Sin embargo, el presidente López Obrador continua con un plan, asistencialista que nos hará más dependientes de su gobierno; si no se lleva de manera estratégica, podría seguir incrementando la pobreza, la cual presentará en el mediano plazo un alto costo del cual difícilmente, podríamos salir.
Por lo cual es importante señalar que, los costos políticos de los gobiernos federal, estatales y municipales, no deben ser tolerados o incluso ignorados. Por el contrario, los habitantes en México debemos exigir a los candidatos, la construcción de una agenda viable, que permita la construcción de las políticas públicas que resuelvan los problemas de la desigualdad y la pobreza.
Es decir, que debemos hacer a un lado las promesas políticas y pasar a una acción tangible. Además de considerar las causas sanitarias de la pandemia en cada región, e incluirlas dentro de las prioridades en la agenda social y política.
Este instrumento (agenda política), nos ayudaría a prepararnos positivamente para responder al gran desafío que enfrentamos como humanidad, para con certeza poder enfrentar la problemática en cada región del país. Al tiempo que permitirá focalizar y destinar de manera certera los recursos para educación, salud, seguridad, vivienda, integración física urbana e impulsar nuevas opciones para la generación de empleos, entre otras importantes acciones.
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