La historia no es nueva, ya tuvo un antecedente a inicios de febrero de 2014 en la administración panista de Eduardo Rivera Pérez. En esa ocasión, la oposición fueron los mismos regidores del PAN quienes se negaron a aprobar el dictamen de la cuenta pública del ejercicio fiscal 2013 al interior de la Comisión de Hacienda y Patrimonio Municipal.
Aunque fue aprobado por mayoría de votos días después en sesión de cabildo, el daño estaba hecho al quedar en evidencia el “rompimiento” entre integrantes de una misma fuerza política.
Cinco años después la historia parece repetirse, pero ahora al interior de Morena.
Los protagonistas: Claudia Rivera Vivanco, presidenta municipal de Puebla y cinco regidores morenistas como son Rosa Márquez, Marta Ornelas, Eduardo Covián, Edson Contreras y Roberto Esponda.
Cuentan los enterados que la división interna entre ambas partes sucedió previo a la entrada en funciones de la nueva administración -14 de octubre-, durante la repartición de las presidencias de las comisiones de trabajo a los regidores.
De antemano se sabía que los panistas y la única integrante del PRI, Silvia Tanús, tenías su suerte marcada al quedar al frente de responsabilidades “menos importantes” como la Agenda 2030, Asuntos Internacionales, Deporte y Juventud, además de Gobierno Abierto y Comunicación.
Sin embargo, también estaban pensadas esas posiciones para estos cinco regidores.
Cuentan que el motivo es la cercanía que tienen con el ex candidato a gobernador, Luis Miguel Barbosa Huerta, a quien llaman “el jefe”, enemistado con la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco, aunque ella no lo quiera reconocer públicamente.
De ahí empezaron las fricciones que se han ido agudizando al grado que estos cinco regidores no son tomados en cuenta en las reuniones de pre cabildo que encabeza la titular de la Secretaría del ayuntamiento, Liza Aceves.
En consecuencia, también aunque lo nieguen, viene entonces la revancha de estos cinco que se ha traducido en votar en contra de los dictámenes o temas importantes tratados en sesiones se cabildo.
Ejemplos: Los proyectos de la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos, además de temas relacionados con las renovaciones de las presidencias de las 17 juntas auxiliares.
Poco a poco este grupo empieza a ganar fuerza. En las votaciones de cabildo se han aliado e indirectamente - ¿o directamente? - con los cinco regidores del PAN más el PRI vía Silvia Tanús.
En total suman 11 votos de los 23 registrados -22 regidores más la presidenta municipal-, sin la garantía que Claudia Rivera tenga la simpatía o fidelidad de lo que están actualmente de su lado.
Libertad Aguirre ha llegado a votar en abstención y en su momento, el también morenista José Luis González Acosta, se le consideró más afín al grupo de los “cinco”.
¿Se imagina un “cabildazo”?
¿Qué pasará si Luis Miguel Barbosa repite como candidato a gobernador y gana la elección constitucional?
A los señalamientos de falta de resultados en materia de seguridad pública y control del comercio ambulante en el Centro Histórico, Claudia Rivera debe enfrentar otro frente como el caso de las diferencias que tiene con cinco regidores de su mismo partido político.
Los que saben, apuestan que la presidenta municipal no tendrá credenciales suficientes para reelegirse en el cargo.
El tiempo lo dirá.
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El empresario Alejandro Cruz Olvera está de regreso a la escena política.
Dicen que en sus ratos libres y fines de semana promueve alianzas a favor de Luis Miguel Barbosa Huerta.
En esta semana, se ha reunido con empresarios, líderes de colonias y juntas auxiliares del norponiente de la ciudad, a quienes les ha pedido sumarse al proyecto de este personaje para que sea candidato a gobernador de Morena.
Aunque Alejandro Cruz está impulsando las aspiraciones del ex senador, tampoco deja de lado sus visitas a la Ciudad de México para visitar a su amigo, Ricardo Monreal, quien respalda a su compañero Alejandro Armenta que también busca la nominación a Casa Puebla.
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@Marcomironc
