/ lunes 20 de abril de 2020

Apuntan panistas a Eduardo Rivera

Era solo cuestión de tiempo para que comenzara a brotar la desconfianza entre los aspirantes del PAN a la alcaldía de Puebla que se aglutinaron alrededor de Jesús Zaldívar Benavides para ganar el Comité Directivo Municipal de ese partido en la capital.

Si existen sospechas de que Eduardo Rivera Pérez podría haber llegado a ciertos acuerdos políticos con personajes de la cuatroté para encaminarse sin muchos contratiempos a la contienda electoral del 2021, las dudas se incrementaron en los últimos días, después de que uno de sus rivales dentro del panismo se percatara de que hay ex colaboradores del ex alcalde en administraciones vigentes, emanadas de Morena.

Según la especie, salida, se insiste, de un aspirante a la presidencia municipal de Puebla que pretende competirle la nominación a Eduardo Rivera, el ex edil ha logrado colar, por acuerdo directo con Claudia Rivera Vivanco, en un caso, y con David Méndez Márquez, en otro, a servidores públicos que en el pasado colaboraron con él y que le acompañaron en diversas aventuras políticas.

En el ayuntamiento de Rivera Vivanco hay tres de ellos.

Se trata de Fernando David Letipichia Castro, quien es director de Desarrollo Urbano en la Secretaría de Desarrollo Urbano y Sustentabilidad; de Jesús Duque Visconti, director de Atención Vecinal y Comunitaria en la Secretaría de Gobernación, y de Pilar Aguilar Nájera, que se desempeña como jefa del departamento de Vinculación Estratégica en la Secretaría de Bienestar.

Los tres trabajaron para Rivera y uno de ellos, incluso, fue más allá.

Duque Visconti aportó dinero para la campaña electoral de su ex jefe en los comicios de 2018, según quedó asentado y transparentado en el sistema de fiscalización del Instituto Nacional Electoral.

En el gobierno de Luis Miguel Barbosa hay una mujer que también ha levantado cejas entre los mal pensados.

María del Rayo Ramírez Polo, una militante panista que pertenece a grupos de extrema derecha y que ha disputado cargos de representación dentro del partido blanquiazul, de la mano de Juan Carlos Mondragón y Ana Teresa Aranda, labora en la dirección de Tenencia de la Tierra.

Los cargos oficiales de estos cuatro funcionarios y una que otra indagatoria personal han llevado a los adversarios políticos de Eduardo Rivera a concluir que el precandidato a edil sostiene alguna suerte de preacuerdos con personajes representativos de Morena, con el objetivo de limpiar el camino hacia su eventual postulación.

Ser publicitado como el aspirante más aventajado dentro del PAN, como han mostrado los resultados de las encuestas sobre preferencias electorales en la capital dadas a conocer hasta ahora, tendrá sus repercusiones.

Los que vienen detrás se molestarán y actuarán en consecuencia, como ya lo hacen.


Twitter: @jorgerdzc

Correo: jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx

Era solo cuestión de tiempo para que comenzara a brotar la desconfianza entre los aspirantes del PAN a la alcaldía de Puebla que se aglutinaron alrededor de Jesús Zaldívar Benavides para ganar el Comité Directivo Municipal de ese partido en la capital.

Si existen sospechas de que Eduardo Rivera Pérez podría haber llegado a ciertos acuerdos políticos con personajes de la cuatroté para encaminarse sin muchos contratiempos a la contienda electoral del 2021, las dudas se incrementaron en los últimos días, después de que uno de sus rivales dentro del panismo se percatara de que hay ex colaboradores del ex alcalde en administraciones vigentes, emanadas de Morena.

Según la especie, salida, se insiste, de un aspirante a la presidencia municipal de Puebla que pretende competirle la nominación a Eduardo Rivera, el ex edil ha logrado colar, por acuerdo directo con Claudia Rivera Vivanco, en un caso, y con David Méndez Márquez, en otro, a servidores públicos que en el pasado colaboraron con él y que le acompañaron en diversas aventuras políticas.

En el ayuntamiento de Rivera Vivanco hay tres de ellos.

Se trata de Fernando David Letipichia Castro, quien es director de Desarrollo Urbano en la Secretaría de Desarrollo Urbano y Sustentabilidad; de Jesús Duque Visconti, director de Atención Vecinal y Comunitaria en la Secretaría de Gobernación, y de Pilar Aguilar Nájera, que se desempeña como jefa del departamento de Vinculación Estratégica en la Secretaría de Bienestar.

Los tres trabajaron para Rivera y uno de ellos, incluso, fue más allá.

Duque Visconti aportó dinero para la campaña electoral de su ex jefe en los comicios de 2018, según quedó asentado y transparentado en el sistema de fiscalización del Instituto Nacional Electoral.

En el gobierno de Luis Miguel Barbosa hay una mujer que también ha levantado cejas entre los mal pensados.

María del Rayo Ramírez Polo, una militante panista que pertenece a grupos de extrema derecha y que ha disputado cargos de representación dentro del partido blanquiazul, de la mano de Juan Carlos Mondragón y Ana Teresa Aranda, labora en la dirección de Tenencia de la Tierra.

Los cargos oficiales de estos cuatro funcionarios y una que otra indagatoria personal han llevado a los adversarios políticos de Eduardo Rivera a concluir que el precandidato a edil sostiene alguna suerte de preacuerdos con personajes representativos de Morena, con el objetivo de limpiar el camino hacia su eventual postulación.

Ser publicitado como el aspirante más aventajado dentro del PAN, como han mostrado los resultados de las encuestas sobre preferencias electorales en la capital dadas a conocer hasta ahora, tendrá sus repercusiones.

Los que vienen detrás se molestarán y actuarán en consecuencia, como ya lo hacen.


Twitter: @jorgerdzc

Correo: jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx