/ miércoles 11 de diciembre de 2019

Auditan también a Claudia Rivera

El nuevo titular de la Auditoría Superior del Estado no se anda por las ramas.

El mismo día que Francisco José Romero Serrano dio inicio a un par de procesos de fiscalización en la BUAP, el miércoles 4 de diciembre, envió también una auditoría al ayuntamiento de Puebla para revisar el manejo de los recursos públicos en el primer año de gobierno de la gestión municipal.

Claudia Rivera Vivanco integra ahora, junto con el rector Alfonso Esparza Ortiz, esa selecta lista de servidores públicos que comenzaron a ser investigados casi al mismo tiempo que el nuevo auditor recorría el edificio de la 5 sur para conocer las instalaciones y presentarse con los miembros del personal que quedó bajo su mando.

La prisa aplicada en el caso muestra que hay mucho interés en indagar las cuentas del ayuntamiento de la capital del estado.

Si bien Rivera no ha querido hacer público el hecho, lo que puede explicarse como un intento por evitar la confrontación directa con el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, el episodio ha generado algunas suspicacias entre los integrantes de su administración, quienes se cuestionan las verdaderas motivaciones del auditor para ponerlos en la mira tan pronto.

Tanto Barbosa como Rivera emanaron de la coalición Juntos Haremos Historia, la misma que tuvo a Morena como partido principal y que llevó a Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de la república, pero eso no ha impedido que los dos personajes protagonizaran diferentes etapas de desencuentros, prácticamente desde que los dos fueron candidatos en 2018.

En los días previos a la apertura de la réplica de la Capilla Sixtina tuvieron el último diferendo público.

La administración municipal clausuró por unas horas los trabajos de instalación que se hacían en el atrio de catedral, lo que fue interpretado como una ofensa casi personal al mandatario, principal impulsor –junto con el arzobispo—de la llegada de esa atracción cultural a Puebla.

En respuesta, la presidenta municipal fue excluida del acto de apertura.

Incidentes como ese son los que alimentan a los mal pensados

Los llevan a creer, como en la máxima casa de estudios del estado, que la intempestiva intervención de Romero Serrano va más allá de una simple y rutinaria indagatoria administrativa.

***

Américo Zúñiga Martínez, un abogado de 41 años que fue presidente municipal de Xalapa, Veracruz, y líder del Comité Directivo Estatal del PRI en aquella entidad, llegará esta semana a reforzar las actividades partidistas del tricolor en Puebla.

Zúñiga Martínez ha sido elegido para convertirse en delegado especial del Comité Ejecutivo Nacional del priismo en tierras poblanas, por lo que seguramente estará a cargo de la selección de candidatos a puestos de elección popular que irán a la contienda intermedia en 2021.

La noticia podría ser buena para los priistas poblanos, que por fin tienen un dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, que los ha volteado a ver.

Sin embargo, no deberían esperanzarse mucho en su virtual delegado.

Américo Zúñiga sufrió en junio de 2017, como presidente municipal de Xalapa en funciones, una de las peores derrotas electorales del PRI.

Esa vez, el candidato a alcalde por el Movimiento Regeneración Nacional, Pedro Hipólito Rodríguez Herrero, se hizo de la victoria con 68 mil 700 votos, al vencer a Miriam Ferrárez Centeno, de la alianza PAN-PRD, que obtuvo 44 mil 300 sufragios, y a Alejandro Montano Guzmán, del PRI, que apenas alcanzó 18 mil 700 votos, 50 mil menos que el ganador.

Después de dejar la alcaldía de Xalapa se fue a dirigir el PRI estatal, pero su partido ya había sido barrido por Morena un año antes de que Andrés Manuel López Obrador apareciera en las boletas electorales.

Twitter: @jorgerdzc

jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx

El nuevo titular de la Auditoría Superior del Estado no se anda por las ramas.

El mismo día que Francisco José Romero Serrano dio inicio a un par de procesos de fiscalización en la BUAP, el miércoles 4 de diciembre, envió también una auditoría al ayuntamiento de Puebla para revisar el manejo de los recursos públicos en el primer año de gobierno de la gestión municipal.

Claudia Rivera Vivanco integra ahora, junto con el rector Alfonso Esparza Ortiz, esa selecta lista de servidores públicos que comenzaron a ser investigados casi al mismo tiempo que el nuevo auditor recorría el edificio de la 5 sur para conocer las instalaciones y presentarse con los miembros del personal que quedó bajo su mando.

La prisa aplicada en el caso muestra que hay mucho interés en indagar las cuentas del ayuntamiento de la capital del estado.

Si bien Rivera no ha querido hacer público el hecho, lo que puede explicarse como un intento por evitar la confrontación directa con el gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta, el episodio ha generado algunas suspicacias entre los integrantes de su administración, quienes se cuestionan las verdaderas motivaciones del auditor para ponerlos en la mira tan pronto.

Tanto Barbosa como Rivera emanaron de la coalición Juntos Haremos Historia, la misma que tuvo a Morena como partido principal y que llevó a Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de la república, pero eso no ha impedido que los dos personajes protagonizaran diferentes etapas de desencuentros, prácticamente desde que los dos fueron candidatos en 2018.

En los días previos a la apertura de la réplica de la Capilla Sixtina tuvieron el último diferendo público.

La administración municipal clausuró por unas horas los trabajos de instalación que se hacían en el atrio de catedral, lo que fue interpretado como una ofensa casi personal al mandatario, principal impulsor –junto con el arzobispo—de la llegada de esa atracción cultural a Puebla.

En respuesta, la presidenta municipal fue excluida del acto de apertura.

Incidentes como ese son los que alimentan a los mal pensados

Los llevan a creer, como en la máxima casa de estudios del estado, que la intempestiva intervención de Romero Serrano va más allá de una simple y rutinaria indagatoria administrativa.

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Américo Zúñiga Martínez, un abogado de 41 años que fue presidente municipal de Xalapa, Veracruz, y líder del Comité Directivo Estatal del PRI en aquella entidad, llegará esta semana a reforzar las actividades partidistas del tricolor en Puebla.

Zúñiga Martínez ha sido elegido para convertirse en delegado especial del Comité Ejecutivo Nacional del priismo en tierras poblanas, por lo que seguramente estará a cargo de la selección de candidatos a puestos de elección popular que irán a la contienda intermedia en 2021.

La noticia podría ser buena para los priistas poblanos, que por fin tienen un dirigente nacional, Alejandro Moreno Cárdenas, que los ha volteado a ver.

Sin embargo, no deberían esperanzarse mucho en su virtual delegado.

Américo Zúñiga sufrió en junio de 2017, como presidente municipal de Xalapa en funciones, una de las peores derrotas electorales del PRI.

Esa vez, el candidato a alcalde por el Movimiento Regeneración Nacional, Pedro Hipólito Rodríguez Herrero, se hizo de la victoria con 68 mil 700 votos, al vencer a Miriam Ferrárez Centeno, de la alianza PAN-PRD, que obtuvo 44 mil 300 sufragios, y a Alejandro Montano Guzmán, del PRI, que apenas alcanzó 18 mil 700 votos, 50 mil menos que el ganador.

Después de dejar la alcaldía de Xalapa se fue a dirigir el PRI estatal, pero su partido ya había sido barrido por Morena un año antes de que Andrés Manuel López Obrador apareciera en las boletas electorales.

Twitter: @jorgerdzc

jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx