Si se cuenta usted entre los interesados en saber qué ha ocurrido con la denuncia presentada por el gobierno de Luis Miguel Barbosa en contra de 26 servidores públicos morenogalistas por su presunta implicación en la entrega de calificaciones y títulos falsos a un grupo de privilegiados, tome nota de este dato.
Varios de los señalados por obtener el beneficio de la titulación sin merecerlo recibieron la semana pasada un citatorio de la Fiscalía General del Estado en el que se les pide acudir ante esa instancia para colaborar en las indagatorias que se realizan desde noviembre del 2019, cuando la administración estatal presentó denuncias por los delitos de cohecho, tráfico de influencia, ejercicio indebido de funciones y asociación delictuosa por la expedición de los títulos a través del Instituto de Educación Digital del Estado de Puebla (IEDEP).
Entre los investigados se encuentran Jesús Giles Carmona, ex presidente estatal del PAN, así como los ex funcionarios Roberto Ruiz Esparza, Franco Rodríguez Álvarez, David Rosas Armijo y un hermano de Xabier Albisuri Morett, de nombre Íker.
El citatorio iba acompañado de una clara advertencia: en caso de no acudir al llamado serán requeridos nuevamente, pero por medio de una orden de presentación.
Eso solo significa que el asunto no ha sido archivado en el cajón de los temas sin resolver, y que de la misma forma que el de la entrega irregular de notarías públicas, que de a poco han sido anuladas a 10 de sus beneficiarios, cocina de manera sigilosa su resolución y desenlace.
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El repentino interés de los diputados locales emanados de la coalición Juntos Haremos Historia por remover a todos los integrantes del Cabildo de Tehuacán no tiene como trasfondo poner orden en un gobierno municipal que se encuentra de cabeza casi desde que arrancó, en octubre de 2018, sino el de quitarle un bastión de poder a los líderes del Partido Encuentro Social (que incluso sin registro estatal opera como asociación política), pero, sobre todo, a Fernando Manzanilla Prieto.
Los diputados Gabriel Biestro Medinilla y Vianey García Romero, ambos de Morena, recibieron instrucciones de Casa Aguayo para trabajar en la destitución del presidente municipal suplente, Andrés Artemio Caballero López, y de todos sus regidores, lo que metió al Congreso en una dinámica de celeridad que contrastó con el desinterés mostrado previamente, mientras ese ayuntamiento carecía de edil (por el encarcelamiento de Felipe Patjane) y trataba de resolver la crisis con puros enviados de la Secretaría de Gobernación.
La cosa cambió cuando Caballero López recurrió a la justicia electoral para hacer valer sus derechos como presidente municipal suplente, anticipándose a los inexpertos morenistas que despachan en el edificio de la 5 Poniente.
El nuevo edil pertenece a las filas del PES y obedece a los intereses del partido, como demostró que pusiera como secretario general de la Comuna al último dirigente que tuvo ese instituto político antes de perder el registro, José Momox Sánchez.
Caballero y Momox son aliados de Manzanilla, lo que dio a la revocación del Cabildo un carácter de asunto de prioridad política para los intereses del grupo en el poder, como imaginará.
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El gobernador Miguel Barbosa y la presidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, sí estarán juntos en la conmemoración del grito de independencia, aunque usted… no lo crea.
David Méndez Márquez y Liza Aceves López sostuvieron una reunión el viernes en la Secretaría de Gobernación para comenzar a platicar acerca de los preparativos para los festejos patrios, que se encuentran a un mes de distancia.
La charla de los representantes de Barbosa y Rivera se dio en un buen ambiente y sin las tensiones que podría haber ameritado la actual coyuntura.
Méndez mostró buen oficio en el encuentro y aseguró que por parte de la administración estatal existe el interés para que se lleve a cabo una ceremonia en la que prevalezcan el respeto y la armonía entre ambos niveles de gobierno. Lo mismo ofreció Liza Aceves a nombre de su jefa.
Twitter: @jorgerdzc
