/ sábado 30 de enero de 2021

De alta prioridad la unidad nacional

Envueltos en el tema de la pandemia, el mundo vive el momento más complicado, por la enorme cantidad de decesos y contagios que se han propagado, afectando en primera instancia la salud, deteriorado la actividad económica, reflejada con la pérdida de empleos y el cierre de diversas empresas; si bien existe una luz al final del túnel con la vacuna, este año 2021, será de los más difíciles.

En nuestro país, la recuperación será compleja, la cual demandará del compromiso y entrega del sector gubernamental en sus tres niveles replanteando y evaluando nuevas estrategias, las cuales permitan la construcción de políticas públicas que muestren eficiencia y eficacia, en beneficio de todos los sectores productivos, así como el de la sociedad en general.

Sin embargo, ante el incremento imparable en la violencia e inseguridad, una gran parte de la sociedad la asume como parte de las dificultades que se presentan en la vida cotidiana; este desbordamiento hace que el control por parte de los órganos encargados sea casi imperceptible o nula, la cual se ha extendido por todo el territorio nacional.

Después de un poco más de dos años que lleva la actual administración, lejos se ve la reconciliación del país, pues continua la confrontación a pesar de que al ejecutivo federal le sean presentadas propuestas y demandas legitimas de actores sociales, políticos, empresariales y de diversos colectivos.

La difícil y compleja situación que en México y el mundo enfrentamos por la covid-19 y el daño que ha causado a la economía, cualquier forma o manifestación de triunfalismo, hacia quienes viven estos estragos, representa una ofensa, provocando su deterioro, al tiempo que limita las expectativas de crecimiento y por supuesto la del propio desarrollo humano.

Por ello, el gobierno debe tener claro qué, para dinamizar su desarrollo, debe emprender acciones que permitan su sostenibilidad, instrumentando un uso eficientemente de los recursos, con un marco jurídico que, de certeza a la inversión y a los inversionistas privados, para generar los empleos que requerimos y a su vez, mejoren la calidad de vida de los mexicanos.

México no está exento de lo que siga ocurriendo en este mundo convulso, el mayor riesgo para nuestro país, es que se siga vulnerando aún más su deteriorada economía, pues los criterios de política económica, señalan que el crecimiento será lento y su recuperación tardara cerca de cuatro años, para estar en el nivel al que llegamos en el 2018. La esperanza para el mundo y en especial para nuestro país, esta fincada en la aplicación de la vacuna contra la covid-19.

Sin embargo, la movilidad en la época invernal por la búsqueda de ingresos, incremento los contagios por la pandemia, el subsecretario Hugo López Gatell, ha venido señalando que ha hecho lo correcto, lo cual provocó el relajamiento; su triunfalismo, ha sido una de las principales causas del crecimiento de contagios y en consecuencia que los decesos aumentaran significativamente.

Que explicación ha dado a las familias que han perdido a uno o incluso a varios integrantes de su familia, los mexicanos vamos perdiendo la batalla contra la covid-19, principalmente por el mal manejo de la estrategia para controlar y contener la pandemia; parte de esos decesos con un adecuado manejo e información confiable y oportuna, pudieron haberse evitado.

Lo cual obliga a pensar que el denominado “retorno a una nueva normalidad” seguirá provocando un estado permanente de incertidumbre y, como no estábamos preparados para enfrentar la pandemia, todo indica que tampoco se podrá enfrentar la nueva ola de inseguridad y crisis económica nunca antes vista.

Sin duda el presidente de México como jefe del Estado enfrenta, aparte de los problemas que se suscitan, i) los del rezago histórico y ahora ii) recuperar el crecimiento económico en medio de la pandemia de la covid-19; para alcanzar el deseado estado de bienestar.

El presidente López Obrador de manera recurrente plantea que el ejemplo personal cuenta, por ello; en estos momentos críticos, esperamos que rectifique y el suyo tiene que ser ejemplar y, sin duda, un aspecto primordial para poder librar la actual crisis es que se enfoque en promover la unidad nacional.

Sus comentarios jrobertofl@hotmail.com

Envueltos en el tema de la pandemia, el mundo vive el momento más complicado, por la enorme cantidad de decesos y contagios que se han propagado, afectando en primera instancia la salud, deteriorado la actividad económica, reflejada con la pérdida de empleos y el cierre de diversas empresas; si bien existe una luz al final del túnel con la vacuna, este año 2021, será de los más difíciles.

En nuestro país, la recuperación será compleja, la cual demandará del compromiso y entrega del sector gubernamental en sus tres niveles replanteando y evaluando nuevas estrategias, las cuales permitan la construcción de políticas públicas que muestren eficiencia y eficacia, en beneficio de todos los sectores productivos, así como el de la sociedad en general.

Sin embargo, ante el incremento imparable en la violencia e inseguridad, una gran parte de la sociedad la asume como parte de las dificultades que se presentan en la vida cotidiana; este desbordamiento hace que el control por parte de los órganos encargados sea casi imperceptible o nula, la cual se ha extendido por todo el territorio nacional.

Después de un poco más de dos años que lleva la actual administración, lejos se ve la reconciliación del país, pues continua la confrontación a pesar de que al ejecutivo federal le sean presentadas propuestas y demandas legitimas de actores sociales, políticos, empresariales y de diversos colectivos.

La difícil y compleja situación que en México y el mundo enfrentamos por la covid-19 y el daño que ha causado a la economía, cualquier forma o manifestación de triunfalismo, hacia quienes viven estos estragos, representa una ofensa, provocando su deterioro, al tiempo que limita las expectativas de crecimiento y por supuesto la del propio desarrollo humano.

Por ello, el gobierno debe tener claro qué, para dinamizar su desarrollo, debe emprender acciones que permitan su sostenibilidad, instrumentando un uso eficientemente de los recursos, con un marco jurídico que, de certeza a la inversión y a los inversionistas privados, para generar los empleos que requerimos y a su vez, mejoren la calidad de vida de los mexicanos.

México no está exento de lo que siga ocurriendo en este mundo convulso, el mayor riesgo para nuestro país, es que se siga vulnerando aún más su deteriorada economía, pues los criterios de política económica, señalan que el crecimiento será lento y su recuperación tardara cerca de cuatro años, para estar en el nivel al que llegamos en el 2018. La esperanza para el mundo y en especial para nuestro país, esta fincada en la aplicación de la vacuna contra la covid-19.

Sin embargo, la movilidad en la época invernal por la búsqueda de ingresos, incremento los contagios por la pandemia, el subsecretario Hugo López Gatell, ha venido señalando que ha hecho lo correcto, lo cual provocó el relajamiento; su triunfalismo, ha sido una de las principales causas del crecimiento de contagios y en consecuencia que los decesos aumentaran significativamente.

Que explicación ha dado a las familias que han perdido a uno o incluso a varios integrantes de su familia, los mexicanos vamos perdiendo la batalla contra la covid-19, principalmente por el mal manejo de la estrategia para controlar y contener la pandemia; parte de esos decesos con un adecuado manejo e información confiable y oportuna, pudieron haberse evitado.

Lo cual obliga a pensar que el denominado “retorno a una nueva normalidad” seguirá provocando un estado permanente de incertidumbre y, como no estábamos preparados para enfrentar la pandemia, todo indica que tampoco se podrá enfrentar la nueva ola de inseguridad y crisis económica nunca antes vista.

Sin duda el presidente de México como jefe del Estado enfrenta, aparte de los problemas que se suscitan, i) los del rezago histórico y ahora ii) recuperar el crecimiento económico en medio de la pandemia de la covid-19; para alcanzar el deseado estado de bienestar.

El presidente López Obrador de manera recurrente plantea que el ejemplo personal cuenta, por ello; en estos momentos críticos, esperamos que rectifique y el suyo tiene que ser ejemplar y, sin duda, un aspecto primordial para poder librar la actual crisis es que se enfoque en promover la unidad nacional.

Sus comentarios jrobertofl@hotmail.com