Muchas son las mujeres que han contribuido a la educación y han participado de forma brillante en México y en el mundo, en esta ocasión sólo recordaremos a tres de ellas, distinguidas mujeres para brindarles un reconocimiento a todas.
La maestra Emilia Elías de Ballesteros, nació en 1914 en la ciudad de Madrid, en España, donde cursó la enseñanza primaria, los estudios secundarios y los de maestra de primaria en la enseñanza en la Normal Central y posteriormente en la Escuela Superior del Magisterio, obtuvo el título de Maestra de Enseñanza Normal, equivalente al de la Licenciatura en Pedagogía. Posteriormente amplió sus estudios en universidades de París y Bruselas. Fue alumna de los doctores Simon, Decroly y Demoor en las ciencias relacionadas con la educación.
Ejerció el cargo de profesora de Geografía en la Escuela Normal de Gerona y; de Pedagogía, Historia en la Normal de Segovia y en la Escuela Normal de Maestras de Madrid, ejerciendo en esta última el puesto de directora, el cual desempeñaba al momento de salir de España.
A su llegada a México, reanudó su labor docente como profesora de Ciencias de la Educación en la Escuela Normal Superior de Maestros y en la Escuela Normal de Pachuca.
Fue autora de diversas obras sobre temas educativos y pedagógicos, entre ellas Didáctica del Lenguaje, que obtuvo el premio único del Concurso Nacional Abierto de Madrid, en España.
La maestra Emilia Elías de Ballesteros, con un reconocimiento por contribuir mucho a la Pedagogía mexicana a través de sus obras y sus cátedras en las escuelas normales mexicanas.
La maestra Hilda Taba nació en 1902 en el sureste de Estonia. Adquirió su primer certificado de maestra en un seminario didáctico, se graduó en la Facultad de la Universidad de Tartuen. Más tarde, con visa de estudiante viajó a los Estados Unidos de América y realiza estudios de maestría en el College Byan Mawren en Filadelfia, Pennsylvania, en donde obtuvo el grado de Doctorado en Filosofía por la Universidad de Columbia.
Su trayectoria pedagógica fue muy rica y variada, comenzó impartiendo tutorías y después fue profesora en el Dalton School. Fue profesora asistente de educación y coordinó el área de Estudios Sociales en la Universidad de Ohio. Realizó estudios de investigación científica y su perfecta compresión de los procesos educativos, que fueron aplicados en las escuelas normales mexicanas. Dirigió proyectos importantes de pedagogía en las Universidades de Nueva York, Chicago y California, en los Estados Unidos de América, que repercutieron en los planes de estudio de la educación básica en varios países, principalmente de México.
La maestra Rosario María Gutiérrez Eskildsen, nació en 1899 en Villahermosa, Tabasco. Fue una alumna estudiosa, luego de quedar huérfana a temprana edad, la primera parte de su escolaridad la concluyó en el Instituto Juárez de Villahermosa, un colegio fundado por el avanzado político y educador Manuel Sánchez Mármol. A la edad de 19 años se trasladó a la Ciudad de México, donde trabajó como maestra de educación primaria y asistió a la UNAM, donde se graduó en la Maestría de Literatura y el doctorado en Lingüística. Obtuvo una beca para estudios en la Universidad de Columbia, en Estados Unidos de América.
La maestra impactó sobre todo a los jóvenes profesores que se preparaban para impartir Lenguaje y Literatura en las escuelas secundarias del país. Enseñó algunos mecanismos del lenguaje para los alumnos con problemas del habla (armar y desarmar el idioma español).
La maestra Rosario María Gutiérrez Eskildsen, escribió varios libros sobre el lenguaje y sus dificultades en la enseñanza del español, y muchos artículos sobre temas relativos a la Gramática y la Lingüística en general. Otros sobre Dialectología, Pedagogía de la Lengua, la Fonética y la Prosodia en particular para los alumnos del español en el sureste de México.
Hizo muchas contribuciones en varios estudios con otros investigadores del lenguaje y del español, considerándose una pionera en la Dialectología.
Se dedicó en tiempo completo a sus trabajos de investigación y educación. Sus estudiantes siempre llevaron su sello, distinguiéndose sus alumnos como maestros inquietos, apasionados por la docencia e innovadores en el lenguaje. La maestra Rosario María Gutiérrez Eskildsen se convirtió en una leyenda en la educación mexicana.
*Doctor en Educación.
