Antes de tomar radicalmente partido sobre la reforma eléctrica, debemos estar conscientes de la importancia de este elemento que literalmente mueve al planeta, conocer su evolución y entender que estar a la vanguardia en la materia puede representar grandes beneficios económicos.
Vamos a mencionar brevemente un poco de la historia de la energía y veremos cómo diversos pueblos lograron un avance significativo:
Hace aproximadamente 800 mil años, el hombre comenzó a dominar el fuego, con lo cual la vida cambió en cuanto a los hábitos alimenticios y la forma de abrigarse, dando inicio al manejo de la energía que hoy sigue siendo vital; hace unos 2 mil años, los chinos comenzaron a utilizar el carbón de igual manera; después vinieron las ruedas en los ríos y molinos, máquinas de vapor que le quitaron las centenarias velas a los buques y mejoraron el transporte; ya después se establecieron la electricidad y el petróleo, ambos elementos que siguen siendo fundamentales; la energía nuclear sin duda es la más poderosa, pero cuyo manejo es sumamente peligroso e inclusive amenaza la existencia de la raza humana; y ahora buscamos energías renovables y limpias, simplemente porque el planeta no aguanta más.
Ahora bien, pongamos unos ejemplos de la trascendencia de las energías.
Si nos preguntamos por qué Gran Bretaña tuvo hegemonía, alguna vez, sobre un cuarto de la población mundial tenemos que señalar que un factor decisivo fue el dominio de los mares. Son muy conocidos los grandes viajes que hicieron muchos marineros fuera de esa isla europea, no por alguna curiosidad o aventura sino por motivos económicos.
Recordemos que las lámparas londinenses del siglo XIX eran iluminadas con un combustible que no existía en esa región, sino que había que sacarlo de los cetáceos que circundaban los océanos de cualquier parte del globo, es por eso que hubo una motivación importante para todo el gran desarrollo naviero de ese país. Muchísimas islas alrededor del orbe fueron descubiertas, colonizadas o visitadas por algún ballenero inglés que buscaba el preciado aceite que servía como combustible.
Otro caso es el de los países árabes, quienes tienen la hegemonía en la producción del crudo y han convertido en oasis esos desiertos que hace un siglo tenían un valor ínfimo. Arabia Saudita, Catar y hasta Venezuela se han visto beneficiados de quizá la fuente más importante de energía que ha visto la historia, cuyo uso ya es obsoleto, pero que indudablemente se seguirá usando por motivos económicos.
Pensemos por un momento el crack económico que significaría el ya no usar el oro negro, muchos países, incluyendo México tendrían graves problemas por lo que significaría la pérdida de esos ingresos, aparte del desempleo y caos que se originarían, es por ello que los gobiernos, en acuerdo con las grandes petroleras, prefieren seguir contaminando a crear esa catástrofe. Si lo autos eléctricos no se han popularizado no es porque su tecnología sea muy sofisticada, es más, cualquier carrito de control remoto hecho hace décadas la tiene, sino porque no conviene abaratar los precios de esos coches que siguen siendo muy caros.
La Revolución Industrial dio una hegemonía a Europa durante muchas décadas, pero la bonanza más notable fue ocasionada por el petróleo, mejorando así las condiciones de diversos países de Medio Oriente, al grado de ver excesos como autos cubiertos de oro, del mismo modo, el dominio y popularización de las energías renovables cambiará el rostro de los países que las promuevan.
En cuanto a lo que pasa actualmente en nuestro país debemos mencionar que es algo complejo, se pretende cancelar algunos contratos a empresas privadas, lo cual hay que analizar con mucho cuidado. En primer lugar hay que mencionar que esto generará muchos millones en ganancias para los empresarios participantes y posiblemente también para quienes aprueban la modificación legal, situación que ha dado lugar a las acusaciones de sobornos por haber aprobado la Reforma Energética de Peña Nieto, en donde se menciona el nombre de la empresa Odrebecht, amén del cuestionado proceso en contra de Emilio Lozoya.
No dudo que haya un derroche de corrupción, pero también hay que analizar que en manos del estado mexicano se han dado grandes robos y desfalcos en algunas áreas estratégicas, Pemex es un claro ejemplo de ello, sin embargo, la solución no es privatizar solamente. Es entonces que considero que es muy difícil hacer un juicio de esta iniciativa, ya que ninguno de los caminos se puede considerar como el mejor. Esto otro ejemplo de la gran división de criterios e intereses, simplemente espero que los mexicanos podamos contar con un buen servicio y a precios justos, además de que el estado mexicano pueda conservar en la electricidad un patrimonio nacional. Acerca de las energías limpias, creo que la apuesta no solo depende de las decisiones nacionales, sino de los intereses globales, estando allí el principal obstáculo. Hasta la próxima.
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