/ viernes 25 de mayo de 2018

El avance del país y la percepción social

Con base en un documento que en fecha reciente dio a conocer el INE, señala que la percepción de 2 de cada 3 mexicanos manifiesta que el país está peor que hace 50 años.

Sin embargo, la realidad del país es totalmente diferente, pues se encuentra en una mejor posición que hace 50 años, toda vez que los ingresos han mejorado, (fuente: FMI); se ha generado un mayor número de empleos formales (fuente: INEGI); en el ámbito económico México es una de las economías más estables, con el nivel más bajo de inflación de América latina (fuente: FMI).

A la fecha se tienen 12 acuerdos de libre comercio, 32 de inversión y 6 de complementación económica, lo cual permite que se tenga acceso preferencial a 46 países que representan el 58% del PIB mundial: 53% del comercio mundial, es decir, donde se encuentran 1,150 millones de consumidores potenciales.

México es el primer país exportador de América Latina con el 42.45%, seguido por Brasil, con el 22.5%. Aunado a las reformas estructurales que en años recientes fueron emprendidas.

Con todo lo anterior, ¿por qué la percepción de la gran mayoría de mexicanos es que estamos peor? Es debido al incremento de la inseguridad en los últimos 18 años, al incremento en la corrupción y porque, a pesar del incremento en el empleo, este ha sido insuficiente, provocando un alto nivel de informalidad y un exponencial incremento del crimen organizado.

Si a estos temas agregamos los ciberataques: “En un reciente artículo, The New York Times señala que los bancos en EU están operando, cada vez más, como centros de crisis de ciberseguridad, operados por exmilitares especializados en el manejo de crisis”.

Sobre el mismo, en México no estamos preparados, lo hemos visto en los últimos días de los ataques que han sufrido portales de internet de instituciones públicas y privadas, así como en el robo de grandes cantidades de dinero del SPEI, los cuales son una clara advertencia de los riesgos que significan para la seguridad nacional este tipo de actividades.

Lo lamentable es que, al respecto, la legislación en el Código Penal Federal no tipifica este tipo de conductas, que afectan no solo a las instituciones financieras sino también a los derechos de terceros.

Entre los riesgos al alza a que está sujeta la inflación, se encuentra la depreciación de la moneda y una evolución estancada de la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Los principales retos a enfrentar en México son la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN); el impacto de la reforma fiscal y del incremento en las tasas de interés en Estados Unidos; de manera interna, el proceso electoral, donde se renovarán la presidencia, el Congreso de la Unión y autoridades en 30 entidades federativas; y, por supuesto, la inseguridad.

La contienda electoral va subiendo de tono, expertos señalan que las elecciones serán un plebiscito que medirá la popularidad de las administraciones federal, estatal y municipal y, a la fecha, todas ellas no han podido eliminar o disminuir corrupción y violencia.

Sin embargo, somos un país que sigue viviendo en la esperanza de que las cosas cambien. Lo cierto es que a la próxima administración federal le corresponderá revertir la actual situación, de manera responsable y sensata.

Y esta tendrá que dar un giro de la economía, siempre y cuando se privilegie el crecimiento con desarrollo social sostenido, aunado, por supuesto, a una nueva reforma fiscal.

Como en muchos otros casos, los candidatos deben entender que la discusión no únicamente se centra en una visión populista de la economía por el proceso electoral, debido al gran desconocimiento que en su mayoría tienen de la realidad nacional.

Es por tal razón que lo urgente y necesario es tener un amplio conocimiento y gran claridad de la realidad y futuro del país, para terminar con mitos, mentiras y ocurrencias, las cuales lesionan el desarrollo de la nación.

Sus comentarios jrobertofl@hotmail.com

Con base en un documento que en fecha reciente dio a conocer el INE, señala que la percepción de 2 de cada 3 mexicanos manifiesta que el país está peor que hace 50 años.

Sin embargo, la realidad del país es totalmente diferente, pues se encuentra en una mejor posición que hace 50 años, toda vez que los ingresos han mejorado, (fuente: FMI); se ha generado un mayor número de empleos formales (fuente: INEGI); en el ámbito económico México es una de las economías más estables, con el nivel más bajo de inflación de América latina (fuente: FMI).

A la fecha se tienen 12 acuerdos de libre comercio, 32 de inversión y 6 de complementación económica, lo cual permite que se tenga acceso preferencial a 46 países que representan el 58% del PIB mundial: 53% del comercio mundial, es decir, donde se encuentran 1,150 millones de consumidores potenciales.

México es el primer país exportador de América Latina con el 42.45%, seguido por Brasil, con el 22.5%. Aunado a las reformas estructurales que en años recientes fueron emprendidas.

Con todo lo anterior, ¿por qué la percepción de la gran mayoría de mexicanos es que estamos peor? Es debido al incremento de la inseguridad en los últimos 18 años, al incremento en la corrupción y porque, a pesar del incremento en el empleo, este ha sido insuficiente, provocando un alto nivel de informalidad y un exponencial incremento del crimen organizado.

Si a estos temas agregamos los ciberataques: “En un reciente artículo, The New York Times señala que los bancos en EU están operando, cada vez más, como centros de crisis de ciberseguridad, operados por exmilitares especializados en el manejo de crisis”.

Sobre el mismo, en México no estamos preparados, lo hemos visto en los últimos días de los ataques que han sufrido portales de internet de instituciones públicas y privadas, así como en el robo de grandes cantidades de dinero del SPEI, los cuales son una clara advertencia de los riesgos que significan para la seguridad nacional este tipo de actividades.

Lo lamentable es que, al respecto, la legislación en el Código Penal Federal no tipifica este tipo de conductas, que afectan no solo a las instituciones financieras sino también a los derechos de terceros.

Entre los riesgos al alza a que está sujeta la inflación, se encuentra la depreciación de la moneda y una evolución estancada de la negociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Los principales retos a enfrentar en México son la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN); el impacto de la reforma fiscal y del incremento en las tasas de interés en Estados Unidos; de manera interna, el proceso electoral, donde se renovarán la presidencia, el Congreso de la Unión y autoridades en 30 entidades federativas; y, por supuesto, la inseguridad.

La contienda electoral va subiendo de tono, expertos señalan que las elecciones serán un plebiscito que medirá la popularidad de las administraciones federal, estatal y municipal y, a la fecha, todas ellas no han podido eliminar o disminuir corrupción y violencia.

Sin embargo, somos un país que sigue viviendo en la esperanza de que las cosas cambien. Lo cierto es que a la próxima administración federal le corresponderá revertir la actual situación, de manera responsable y sensata.

Y esta tendrá que dar un giro de la economía, siempre y cuando se privilegie el crecimiento con desarrollo social sostenido, aunado, por supuesto, a una nueva reforma fiscal.

Como en muchos otros casos, los candidatos deben entender que la discusión no únicamente se centra en una visión populista de la economía por el proceso electoral, debido al gran desconocimiento que en su mayoría tienen de la realidad nacional.

Es por tal razón que lo urgente y necesario es tener un amplio conocimiento y gran claridad de la realidad y futuro del país, para terminar con mitos, mentiras y ocurrencias, las cuales lesionan el desarrollo de la nación.

Sus comentarios jrobertofl@hotmail.com