/ viernes 24 de abril de 2020

El desafío para México ante la baja del precio del petróleo

La crisis por él Covid-19, se profundiza y su efecto día a día afecta la economía mundial, de acuerdo a estudios y pronósticos del Fondo Monetario Internacional, señala que la mexicana será una de la más golpeada y de lenta recuperación.

A esta situación se suma una nueva preocupación que es la caída en los precios internacionales del petróleo y la reducción del comercio mundial, al caer el precio del barril del crudo; el lunes 20 de abril, la mezcla mexicana de exportación cerro a un precio de –2.37 dólares por barril; cotización que por primera vez se da en el país, el de situar su precio por debajo de cero.

En este orden, los expertos señalan que en México, el costo promedio de producción es de 14.2 dólares por barril, sin considerar el costo de transporte, por tanto, el precio de la mezcla en el mercado internacional su precio promedio es de 17.16 dólares por barril.

Ante este lamentable escenario, tal vez tenga sentido preguntarse: ¿si es viable invertir en el desarrollo de nuevos campos y, si se debe seguir extrayendo la cantidad que actualmente Pemex produce?; debido a que el precio de la mezcla mexicana ha caído, en mes y medio, más de 65 por ciento y que el sistema nacional de refinación pierde al año entre 50 y 60 mil millones de pesos, además de que no se cuenta con la capacidad de almacenamiento.

Las estimaciones de varios organismos nacionales e internacionales establecen que, lamentablemente el país se enfila a una prolongada recesión, como la más grande su historia.

Situación que además se suma a que la economía mexicana se ve afectada por “cuatro choques distintos: dos del exterior como son la fuerte recesión global, y la guerra de precios del petróleo, y dos internos que son la crisis de confianza y el impacto de las medidas de aislamiento social que paralizarán la actividad productiva y comercial” y que argumentar del crecimiento de la inseguridad.

La disminución en los precios de los hidrocarburos, se vino generando, debido a la guerra de precios entre Arabia Saudita y Rusia, lo cual abonó a la baja en la cotización internacional del petróleo (en marzo el presente año). Para el país, si bien con el precio de 17 dólares era cuestionable, imagínese las consecuencias al fijarse por debajo de cero.

Este desequilibrio histórico del mercado mundial petrolero, se fue generando en buena medida por la paralización de la economía a nivel mundial, que fue sin duda, el principal freno a la demanda petrolera, donde México se ve severamente afectado. Es esta consecuencia, una difícil situación la cual debe analizarse y tomar medidas con una visión de Estadista.

Visión donde el análisis debe considerarse y tomarse con enfoques y argumentos basados en aspectos prospectivos, técnicos y científicos y no solo especulativos; pues el destino futuro se torna complejo para el país y para todos los mexicanos.

Por supuesto que además del tema petrolero, se deben establecer medidas concretas para enfrentar esta crisis, debido a la urgencia de decidir; cuando se levante la cuarentena, como se retomara la actividad económica; así como definir apoyos para las empresas y, para el cumplimiento de sus obligaciones que por ley tienen que cubrir, tales como el pago de cuotas del IMSS e INFONAVIT, etc.

Además de considerar las medidas que deben aplicarse, en apoyo al personal que obtiene sus ingresos en la economía informal, o como dotarlos cuando menos de ingresos mínimos para solventar su difícil situación económica y la de sus familias.

Pues como he señalado de manera insistente, es el momento de actuar con sensatez e inteligencia y, atender las recomendaciones de los expertos o más tarde lo lamentaremos; aunado a que cada día que transcurre, será más difícil el control de la pandemia y la reactivación de la economía, acciones mal tomadas en la gobernanza, podrán tensar el descontento de una gran parte de la sociedad.

Sus comentarios jrobertofl@hotmail.com

La crisis por él Covid-19, se profundiza y su efecto día a día afecta la economía mundial, de acuerdo a estudios y pronósticos del Fondo Monetario Internacional, señala que la mexicana será una de la más golpeada y de lenta recuperación.

A esta situación se suma una nueva preocupación que es la caída en los precios internacionales del petróleo y la reducción del comercio mundial, al caer el precio del barril del crudo; el lunes 20 de abril, la mezcla mexicana de exportación cerro a un precio de –2.37 dólares por barril; cotización que por primera vez se da en el país, el de situar su precio por debajo de cero.

En este orden, los expertos señalan que en México, el costo promedio de producción es de 14.2 dólares por barril, sin considerar el costo de transporte, por tanto, el precio de la mezcla en el mercado internacional su precio promedio es de 17.16 dólares por barril.

Ante este lamentable escenario, tal vez tenga sentido preguntarse: ¿si es viable invertir en el desarrollo de nuevos campos y, si se debe seguir extrayendo la cantidad que actualmente Pemex produce?; debido a que el precio de la mezcla mexicana ha caído, en mes y medio, más de 65 por ciento y que el sistema nacional de refinación pierde al año entre 50 y 60 mil millones de pesos, además de que no se cuenta con la capacidad de almacenamiento.

Las estimaciones de varios organismos nacionales e internacionales establecen que, lamentablemente el país se enfila a una prolongada recesión, como la más grande su historia.

Situación que además se suma a que la economía mexicana se ve afectada por “cuatro choques distintos: dos del exterior como son la fuerte recesión global, y la guerra de precios del petróleo, y dos internos que son la crisis de confianza y el impacto de las medidas de aislamiento social que paralizarán la actividad productiva y comercial” y que argumentar del crecimiento de la inseguridad.

La disminución en los precios de los hidrocarburos, se vino generando, debido a la guerra de precios entre Arabia Saudita y Rusia, lo cual abonó a la baja en la cotización internacional del petróleo (en marzo el presente año). Para el país, si bien con el precio de 17 dólares era cuestionable, imagínese las consecuencias al fijarse por debajo de cero.

Este desequilibrio histórico del mercado mundial petrolero, se fue generando en buena medida por la paralización de la economía a nivel mundial, que fue sin duda, el principal freno a la demanda petrolera, donde México se ve severamente afectado. Es esta consecuencia, una difícil situación la cual debe analizarse y tomar medidas con una visión de Estadista.

Visión donde el análisis debe considerarse y tomarse con enfoques y argumentos basados en aspectos prospectivos, técnicos y científicos y no solo especulativos; pues el destino futuro se torna complejo para el país y para todos los mexicanos.

Por supuesto que además del tema petrolero, se deben establecer medidas concretas para enfrentar esta crisis, debido a la urgencia de decidir; cuando se levante la cuarentena, como se retomara la actividad económica; así como definir apoyos para las empresas y, para el cumplimiento de sus obligaciones que por ley tienen que cubrir, tales como el pago de cuotas del IMSS e INFONAVIT, etc.

Además de considerar las medidas que deben aplicarse, en apoyo al personal que obtiene sus ingresos en la economía informal, o como dotarlos cuando menos de ingresos mínimos para solventar su difícil situación económica y la de sus familias.

Pues como he señalado de manera insistente, es el momento de actuar con sensatez e inteligencia y, atender las recomendaciones de los expertos o más tarde lo lamentaremos; aunado a que cada día que transcurre, será más difícil el control de la pandemia y la reactivación de la economía, acciones mal tomadas en la gobernanza, podrán tensar el descontento de una gran parte de la sociedad.

Sus comentarios jrobertofl@hotmail.com