/ miércoles 6 de junio de 2018

El factor Doger para el debate

Vigente en el tercer lugar de las preferencias electorales, Enrique Doger Guerrero podría ser el factor que incline la balanza en favor de uno u otro candidato durante y después del debate de aspirantes al gobierno del estado que se realizará el lunes.

Con Martha Erika Alonso Hidalgo y Luis Miguel Barbosa Huerta enfrascados en una disputa directa, peleándose el primer lugar de la contienda frente a miles de eventuales electores que seguirán el encuentro por televisión e Internet, el desempeño del priista podría servir para definir al vencedor de esa noche.

Muy a pesar de lo establecido por el Instituto Electoral del Estado con relación a la violencia política de género, es previsible que Barbosa, de la coalición Juntos Haremos Historia, utilice el tema de la “reelección” de Rafael Moreno Valle como principal herramienta de lucha en contra de Alonso, su rival de la alianza Por Puebla al Frente.

Con el empleo de matices que busquen eludir las restricciones de la autoridad electoral, el senador con licencia aprovechará la oportunidad que brinda el debate para desplegar ese discurso “anti-reelección” que ha sido estandarte en su campaña.

Provocada por el oponente, la ex secretaria general del PAN responderá con misiles de similar envergadura para tratar de minar la autoridad moral del nacido en Zinacatepec, con recursos discursivos como la omisión de algunos inmuebles dentro de la declaración 3de3, los viajes al extranjero y la presunta inexistencia del título profesional que lo acredite como abogado.

Martha Erika reaccionará ante los señalamientos y quizá se anime a tomar la delantera en los ataques.

El debate se convertirá entonces en una pelea de dos.

Por ahí aparecerá Michel Chaín Carrillo para ayudar a la candidata del PAN echándole montón al de Morena.

Pero sin un peso relevante ni credibilidad personal para hacer de su intervención un asunto serio, el “aspirante” del Partido Verde no dejará ninguna huella.

Aquí es donde cobra trascendencia la actuación de Doger.

Si el candidato a gobernador del PRI hace señalamientos por igual en contra de los dos aspirantes punteros, si les produce daños de idéntica magnitud, es muy probable que no mueva las preferencias electorales en torno a ellos y que la situación se mantenga en un aparente empate técnico, por lo menos la noche del debate y la semana posterior al mismo.

No obstante, si el ex rector de la BUAP y ex presidente municipal de Puebla decide confrontar solo a uno, o más a uno que al otro, puede contribuir al cuasi entierro político de aquel que sea objeto de las críticas… y al empoderamiento del otro.

Doger es el mejor orador de los cuatro candidatos y quien mejor se desenvuelve frente a las cámaras.

Con una retórica plagada de sarcasmo, el priista podría darle mayor credibilidad a las acusaciones de Alonso contra Barbosa o a las de Barbosa contra Alonso, en beneficio de cualquiera de los dos.

Por eso habrá que estar muy pendientes de lo que ocurra con el abanderado del PRI.

Es posible que apueste a jugar para conveniencia propia y de su candidatura, emitiendo acusaciones en contra de Alonso y Barbosa en un titánico intento por escalar hasta el segundo lugar de la intención de voto.

Pero también es posible que opte por cargarse de un lado, de manera deliberada o no, para terminar por inclinar la balanza en favor de uno de sus rivales.

El lunes se despejarán las dudas.


Twitter: @jorgerdzc

jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx

Vigente en el tercer lugar de las preferencias electorales, Enrique Doger Guerrero podría ser el factor que incline la balanza en favor de uno u otro candidato durante y después del debate de aspirantes al gobierno del estado que se realizará el lunes.

Con Martha Erika Alonso Hidalgo y Luis Miguel Barbosa Huerta enfrascados en una disputa directa, peleándose el primer lugar de la contienda frente a miles de eventuales electores que seguirán el encuentro por televisión e Internet, el desempeño del priista podría servir para definir al vencedor de esa noche.

Muy a pesar de lo establecido por el Instituto Electoral del Estado con relación a la violencia política de género, es previsible que Barbosa, de la coalición Juntos Haremos Historia, utilice el tema de la “reelección” de Rafael Moreno Valle como principal herramienta de lucha en contra de Alonso, su rival de la alianza Por Puebla al Frente.

Con el empleo de matices que busquen eludir las restricciones de la autoridad electoral, el senador con licencia aprovechará la oportunidad que brinda el debate para desplegar ese discurso “anti-reelección” que ha sido estandarte en su campaña.

Provocada por el oponente, la ex secretaria general del PAN responderá con misiles de similar envergadura para tratar de minar la autoridad moral del nacido en Zinacatepec, con recursos discursivos como la omisión de algunos inmuebles dentro de la declaración 3de3, los viajes al extranjero y la presunta inexistencia del título profesional que lo acredite como abogado.

Martha Erika reaccionará ante los señalamientos y quizá se anime a tomar la delantera en los ataques.

El debate se convertirá entonces en una pelea de dos.

Por ahí aparecerá Michel Chaín Carrillo para ayudar a la candidata del PAN echándole montón al de Morena.

Pero sin un peso relevante ni credibilidad personal para hacer de su intervención un asunto serio, el “aspirante” del Partido Verde no dejará ninguna huella.

Aquí es donde cobra trascendencia la actuación de Doger.

Si el candidato a gobernador del PRI hace señalamientos por igual en contra de los dos aspirantes punteros, si les produce daños de idéntica magnitud, es muy probable que no mueva las preferencias electorales en torno a ellos y que la situación se mantenga en un aparente empate técnico, por lo menos la noche del debate y la semana posterior al mismo.

No obstante, si el ex rector de la BUAP y ex presidente municipal de Puebla decide confrontar solo a uno, o más a uno que al otro, puede contribuir al cuasi entierro político de aquel que sea objeto de las críticas… y al empoderamiento del otro.

Doger es el mejor orador de los cuatro candidatos y quien mejor se desenvuelve frente a las cámaras.

Con una retórica plagada de sarcasmo, el priista podría darle mayor credibilidad a las acusaciones de Alonso contra Barbosa o a las de Barbosa contra Alonso, en beneficio de cualquiera de los dos.

Por eso habrá que estar muy pendientes de lo que ocurra con el abanderado del PRI.

Es posible que apueste a jugar para conveniencia propia y de su candidatura, emitiendo acusaciones en contra de Alonso y Barbosa en un titánico intento por escalar hasta el segundo lugar de la intención de voto.

Pero también es posible que opte por cargarse de un lado, de manera deliberada o no, para terminar por inclinar la balanza en favor de uno de sus rivales.

El lunes se despejarán las dudas.


Twitter: @jorgerdzc

jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx