En los últimos meses hemos hablado del uso de la tecnología para darle viabilidad a las empresas y para generar las llamadas Smart cities o ciudades inteligentes. Hoy hablaremos del uso de la tecnología para un mejor funcionamiento de las familias desde sus casas.
No es un tema novedoso, más bien se trata de hablar del internet de las cosas y la utilidad de las tecnologías como una realidad que ya estamos viendo en los hogares de los mexicanos.
Dos empresas de tecnología recientemente anunciaron el lanzamiento de un dispositivo electrónico que en casa será un auxiliar en tareas de seguridad y de entretenimiento, así como en actividades de la vida cotidiana.
Al estar conectados a internet, estos dispositivos otorgan a las familias mayor seguridad al interactuar con dispositivos inteligentes como cámaras de vigilancia, alarmas, focos inteligentes y cerraduras; también dan un mayor control sobre aparatos electrónicos y electrodomésticos como televisores, refrigeradores, hornos, calentadores de agua, entre otros.
En materia de entretenimiento estos dispositivos tienen la capacidad de conectarse con aplicaciones para reproducir música o de videos para transmitir a través de una pantalla; también puede realizar tareas tan básicas como poner una alarma, dar datos del clima, tiempos estimados a un lugar de destino, información de apoyo en tareas escolares o información general de un buscador como ¿cuál es la capital de Rusia?, ¿cuáles son los escenarios de México ante una victoria o derrota en el Mundial de futbol? o ¿qué es una torta de tamal?
Para algunas personas esto no es novedoso. Sin embargo, sí tiene un gran valor que es el avance sólido de nuestro país en el uso de la tecnología para elevar el bienestar de la población y propiciar mejores condiciones de desarrollo. Para ello, el internet es la herramienta básica para detonar el uso de la tecnología. En este sentido, es importante contar con dos condiciones básicas como son el despliegue de infraestructura para llevar telecomunicaciones a todas las regiones del país y, lo más importante, la capacidad de la población para adaptarse a las nuevas tendencias. En ambos aspectos México avanza con paso firme.
Sin duda, para que esta cultura del internet de las cosas, como se ha llamado a estos avances, continúe ganando terreno entre las familias, es necesario tener apertura en conceptos como innovación, educación y cultura sobre lo digital. El uso de la tecnología propicia la reducción de costos, genera oportunidades e incentiva mejoras para la sociedad.
Y en esta apuesta que México ha hecho a las telecomunicaciones y a la tecnología como elementos detonadores del desarrollo no se debe olvidar que esta debe ser inclusiva con todas las personas, pues solo así lograremos un desarrollo sostenible e integrador de largo plazo, y un desarrollo comprometido con el ser humano.
Twitter@jorgejuraidini
