El éxodo de militantes y cuadros distinguidos en el PRI rumbo a Morena puede acelerarse. De ahí que los altos mandos del Revolucionario Institucional ruegan porque el candidato de la competencia sea Luis Miguel Barbosa Huerta.
Conocedores que prácticamente son pocas las posibilidades de ganar en la elección extraordinaria del primero de junio, buscan mantener una base que les permita recomponer el camino e ir fortaleciendo estructuras para los comicios intermedios del 2021.
El PRI apuesta porque el candidato de Morena se llame Luis Miguel Barbosa para que se traduzca en la salida mesurada, hasta cierto punto, de priistas que salten de barco como ya se ha visto con algunos cuadros que ya están en la precampaña del ex perredista u operando desde el aparato de gobierno estatal interino.
A nivel nacional y también local ven como un riesgo latente que el ex partidazo se quede sin elementos de “peso” que les permita hacer un papel decoroso, si los morenistas se inclinan por un personaje diferente a Barbosa Huerta.
Tal es el caso de Alejandro Armenta Mier, quien aún tiene fuerte presencia entre el priismo poblano, partido político del que emanó e hizo gran parte de su carrera profesional-política.
Es bien visto pese a cambiar de camiseta y no existe duda que, si resulta elegido, entonces ahora sí, se pueda dar el verdadero éxodo de priistas a Morena.
Significaría dejar en los “huesos” lo que queda del PRI.
En los comicios de julio de 2018 el entonces candidato a gobernador Enrique Doger Guerrero obtuvo 550 mil sufragios, cantidad que se duda que se pueda alcanzar en este proceso extraordinario.
Y más si el contendiente de la competencia se llama Alejandro Armenta Mier.
Los que saben dicen que ahora sí se consumaría el llamado PRIMOR.
Por eso la cúpula del tricolor no quieren que el elegido sea Armenta Mier.
Ya se imaginan el papelazo que pueden hacer el primero de junio.
¿O no?
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De los siete aspirantes registrados en busca de la candidatura a gobernador del PAN, llama la atención el caso de Ana Teresa Aranda.
Cero puntos obtuvo durante el encuentro de la Comisión Permanente Estatal de Acción Nacional del pasado sábado donde fue electa la tercia que ha sido propuesta a Comité Ejecutivo Nacional (CEN) y que tendrá la misión de elegir a su contendiente a gubernatura de Puebla.
La “Doña” ya no es bien vista entre los azules.
Su guerra contra Rafael Moreno Valle Rosas la llevó a un desgaste interno que la llevó a separarse del PAN.
Ahora que intenta regresar, gran parte de los militantes la ven como una oportunista que busca satisfacer sus necesidades personales en lugar de la marca PAN.
Ni el propio “Yunque” la quiere.
Aunque busca que le hagan el milagro a nivel nacional y sea la elegida, políticamente sería un gran error.
Una imposición flagrante mandaría la señal que el CEN ya ha negociado la derrota en Puebla.
De ahí que se espera que el próximo candidato, como está previsto, sea el morenovallista Guillermo Velázquez Gutiérrez, quien solamente estuvo en el cargo de edil de Atlixco cuatro meses y medio tras pedir licencia temporal al cargo el pasado sábado.
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@Marcomironc
