/ lunes 10 de junio de 2019

Elección inédita fue la de Barbosa Huerta

Más allá de los pros y contras que se suscitaron en la jornada electoral dominical de la semana pasada, pasará a la historia política del Estado como la elección más limpia, pacífica y democrática, ya que estuvo exenta de actos de violencia, de venta de votos, de acarreo de personas, de robo de urnas, de coacción a los votantes, de compra de autoridades electorales, y del intervencionismo operativo de las autoridades federales, estatales y municipales.

Su costo principal fue el elevado abstencionismo. el de muchos votantes acostumbrados a vender su sufragio.

Las encuestas no estuvieron amañadas, no se equivocaron, o se equivocaron a medias, al darle el triunfo a Miguel Barbosa durante todo el tiempo de campaña, y al final ganó por una ventaja a la mitad de la estimada por casi todas las encuestadoras. No fue un triunfo holgado de 20 puntos, pero si obtuvo una ventaja de 11 puntos sobre el panista Enrique Cárdenas Sánchez.

Lo que si fue una sorpresa para todos los candidatos y todos los paridos, fue el elevado abstencionismo. Se esperaba una alta votación, que Morena arrasara en las urnas electorales, pero fue todo lo contrario, y esta ha resultado una gran sorpresa para todos los observadores locales y nacionales y los estudiosos del fenómeno político electoral.

Por qué la militancia de Morena no salió a votar en el municipio de Puebla y la zona Metropolitana, y los panistas si salieron a votar por su candidato, y los votantes del PAN arrasaron a Morena, infligiéndole su primera derrota en donde había mostrado en comicios pasados una fuerza arrolladora

El triunfo de Barbosa fue posible por los sufragios que aportaron a Morena sus aliados del PT y el PVEM, pues el partido de la estrella le sumó 10 puntos de la votación total y el Verde Ecologista ocho para alcanzar en conjunto 682 mil 245 boletas marcadas a su favor. Fue algo inédito para ambos partidos-

Morena fue el partido que perdió más base electoral en los procesos que se llevaron a cabo el pasado domingo 2 de junio en Puebla y Baja California. En 2018 sacó 4 millones 511 mil 536 votos en estos estados de la República y ayer sólo sacaron en total un millón 567 mil 28 votos. Es decir, Morena perdió 2 millones 944 mil 508 electores en las pasadas elecciones. Casi 3 millones de votos menos que la elección anterior, o sea 65 por ciento menos votación.

Ya se ha dicho por observadores de Morena y del PAN y analistas políticos que una de las culpables de la debacle de Morena es el mal gobierno de la Presidenta Municipal, Claudia Rivera Vivanco. Su administración no ha inspirado confianza a los poblanos por sus balbuceos e indecisiones de gobierno, y por la ausencia de un plan y proyecto de gobierno, y la escasa presencia de la obra pública, entre otras fallas como la inseguridad y el avance de la criminalidad en el municipio.

Sin embargo, existen otras causas que contribuyeron al desenlace anterior, como por ejemplo la profunda división que provocó al interior de Morena el proceso interno de selección del candidato a la gubernatura. La confrontación que se dio entre Miguel Barbosa y el senador Alejandro Armenta no fue menor, dividió en dos partes a la militancia durante más de media campaña constitucional, hasta que el senador, Ricardo Monreal logró unirlos y hacer las paces a nivel cupular, pero las bases quedaron escindidas.

Esa fue una herida que dejó su huella en el ánimo de miles de votantes morenistas que no estaban con Miguel Barbosa y se la habían jugado con Alejandro Armenta. La polarización tuvo su costo también el día de las elecciones.

A esto hay que agregarle que Miguel Barbosa nunca alcanzó a ser un candidato fuerte, popular y carismático, aunque sí muy conocido. Sin duda es el mejor, el de mayor contextura y oficio político, forjado en las grandes ligas de la política nacional; y el que mejor programa de gobierno traía en su discurso. Y por eso ganó la contienda electoral, por eso se mantuvo siempre en las preferencias electorales de cuanta encuesta se levantó por medios locales y nacionales. Y su triunfo es inobjetable.

Es inédito por todos lados que se le quiera analizar, pese a que como ya se ha dicho que el voto de los morenistas bajó sensiblemente en el municipio y la zona Metropolitana.

En todo caso se trata de un primer aviso que se envía desde Puebla y Baja California a nivel nacional de que ya el puro nombre de Andrés Manuel López Obrador no es suficiente para arrasar en las urnas electorales porque la percepción local y nacional de los electores está cambiando o empieza a evolucionar ante la problemática social, política, económica y de inseguridad que sigue prevaleciendo en el país, y los cambios que demanda la sociedad son más urgentes. Es un tema que deberá analizar el gobernador electo para actuar rápida y eficazmente en la encomienda que le han encargado los poblanos.

Para el gobernador electo, Luis Miguel Barbosa, el abstencionismo durante la jornada electoral es un reflejo del hartazgo que la población siente hacia los políticos…NOS ESCUCHAMOS diariamente de las 13 a las 14 horas en ABC Radio 1280 de AM.

Más allá de los pros y contras que se suscitaron en la jornada electoral dominical de la semana pasada, pasará a la historia política del Estado como la elección más limpia, pacífica y democrática, ya que estuvo exenta de actos de violencia, de venta de votos, de acarreo de personas, de robo de urnas, de coacción a los votantes, de compra de autoridades electorales, y del intervencionismo operativo de las autoridades federales, estatales y municipales.

Su costo principal fue el elevado abstencionismo. el de muchos votantes acostumbrados a vender su sufragio.

Las encuestas no estuvieron amañadas, no se equivocaron, o se equivocaron a medias, al darle el triunfo a Miguel Barbosa durante todo el tiempo de campaña, y al final ganó por una ventaja a la mitad de la estimada por casi todas las encuestadoras. No fue un triunfo holgado de 20 puntos, pero si obtuvo una ventaja de 11 puntos sobre el panista Enrique Cárdenas Sánchez.

Lo que si fue una sorpresa para todos los candidatos y todos los paridos, fue el elevado abstencionismo. Se esperaba una alta votación, que Morena arrasara en las urnas electorales, pero fue todo lo contrario, y esta ha resultado una gran sorpresa para todos los observadores locales y nacionales y los estudiosos del fenómeno político electoral.

Por qué la militancia de Morena no salió a votar en el municipio de Puebla y la zona Metropolitana, y los panistas si salieron a votar por su candidato, y los votantes del PAN arrasaron a Morena, infligiéndole su primera derrota en donde había mostrado en comicios pasados una fuerza arrolladora

El triunfo de Barbosa fue posible por los sufragios que aportaron a Morena sus aliados del PT y el PVEM, pues el partido de la estrella le sumó 10 puntos de la votación total y el Verde Ecologista ocho para alcanzar en conjunto 682 mil 245 boletas marcadas a su favor. Fue algo inédito para ambos partidos-

Morena fue el partido que perdió más base electoral en los procesos que se llevaron a cabo el pasado domingo 2 de junio en Puebla y Baja California. En 2018 sacó 4 millones 511 mil 536 votos en estos estados de la República y ayer sólo sacaron en total un millón 567 mil 28 votos. Es decir, Morena perdió 2 millones 944 mil 508 electores en las pasadas elecciones. Casi 3 millones de votos menos que la elección anterior, o sea 65 por ciento menos votación.

Ya se ha dicho por observadores de Morena y del PAN y analistas políticos que una de las culpables de la debacle de Morena es el mal gobierno de la Presidenta Municipal, Claudia Rivera Vivanco. Su administración no ha inspirado confianza a los poblanos por sus balbuceos e indecisiones de gobierno, y por la ausencia de un plan y proyecto de gobierno, y la escasa presencia de la obra pública, entre otras fallas como la inseguridad y el avance de la criminalidad en el municipio.

Sin embargo, existen otras causas que contribuyeron al desenlace anterior, como por ejemplo la profunda división que provocó al interior de Morena el proceso interno de selección del candidato a la gubernatura. La confrontación que se dio entre Miguel Barbosa y el senador Alejandro Armenta no fue menor, dividió en dos partes a la militancia durante más de media campaña constitucional, hasta que el senador, Ricardo Monreal logró unirlos y hacer las paces a nivel cupular, pero las bases quedaron escindidas.

Esa fue una herida que dejó su huella en el ánimo de miles de votantes morenistas que no estaban con Miguel Barbosa y se la habían jugado con Alejandro Armenta. La polarización tuvo su costo también el día de las elecciones.

A esto hay que agregarle que Miguel Barbosa nunca alcanzó a ser un candidato fuerte, popular y carismático, aunque sí muy conocido. Sin duda es el mejor, el de mayor contextura y oficio político, forjado en las grandes ligas de la política nacional; y el que mejor programa de gobierno traía en su discurso. Y por eso ganó la contienda electoral, por eso se mantuvo siempre en las preferencias electorales de cuanta encuesta se levantó por medios locales y nacionales. Y su triunfo es inobjetable.

Es inédito por todos lados que se le quiera analizar, pese a que como ya se ha dicho que el voto de los morenistas bajó sensiblemente en el municipio y la zona Metropolitana.

En todo caso se trata de un primer aviso que se envía desde Puebla y Baja California a nivel nacional de que ya el puro nombre de Andrés Manuel López Obrador no es suficiente para arrasar en las urnas electorales porque la percepción local y nacional de los electores está cambiando o empieza a evolucionar ante la problemática social, política, económica y de inseguridad que sigue prevaleciendo en el país, y los cambios que demanda la sociedad son más urgentes. Es un tema que deberá analizar el gobernador electo para actuar rápida y eficazmente en la encomienda que le han encargado los poblanos.

Para el gobernador electo, Luis Miguel Barbosa, el abstencionismo durante la jornada electoral es un reflejo del hartazgo que la población siente hacia los políticos…NOS ESCUCHAMOS diariamente de las 13 a las 14 horas en ABC Radio 1280 de AM.