Seguramente la senadora Nancy de la Sierra Arámburo no ha tenido en sus manos y mucho menos leído la “Cartilla moral” del presidente, Andrés Manuel López Obrador, esa que dice, entre otras cosas, que mentir es una acción mala.
La legisladora emanada de la coalición Juntos Haremos Historia arrancó esta semana una gira por varias regiones del estado para encabezar presuntas asambleas informativas.
El supuesto objetivo de esos encuentros con los pobladores de la entidad es darles a conocer qué es lo que ha hecho hasta ahora en el Senado de la República en apenas unos meses, cuando la realidad es que ha emprendido una suerte de campaña política para tratar de hacerse de la candidatura de Morena al Gobierno del Estado.
Por eso es que queda claro que no ha leído la “Cartilla” presidencial.
O que, si lo hizo, no está interesada en respetar las sugerencias del mandatario mexicano para conducirse por el camino del bien y la rectitud.
Y eso que busca la candidatura por el partido de López Obrador.
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Guillermo Pacheco Pulido ha dado unos pasos más en su interés por hacerse de la gubernatura interina.
Después de recibir algunos respaldos públicos, él mismo salió ayer a confirmar sus aspiraciones, avalado por dos diputados locales de la coalición Juntos Haremos Historia: Héctor Alonso Granados y Emilio Maurer Espinosa.
Lo interesante es que el ex presidente municipal de Puebla y expresidente del Tribunal Superior de Justicia no solo admitió que quiere, sino que delineó parte de lo que sería su trabajo como mandatario de solo unos meses.
El principal objetivo sería combatir la inseguridad para traer paz al estado, expuso, y se comprometió a no meter la mano en la contienda electoral extraordinaria que servirá para definir al gobernador de cinco años y medio.
Sin duda, nuevos tiempos políticos en Puebla.
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A la que siguen saliéndole mal las cosas es a la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco.
Resulta que en los tres meses que lleva al frente de la administración municipal se ha disparado la percepción de inseguridad entre los habitantes de la ciudad capital, según datos de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana que realiza el Inegi.
El dato es relevante y grave porque arroja más indicios sobre el mal desempeño que ha tenido la presidenta municipal de Morena en el arranque de gobierno.
No solo lo ha hecho de manera incorrecta en ambulantaje y tránsito vehicular, sino también en inseguridad.