Parece que, por primera vez en la historia de los procesos electorales en Puebla, esta vez sí habrá confrontación de ideas, y tal vez hasta de agresiones orales y descalificaciones, en el encuentro de candidatos al gobierno del estado que se realizará el próximo domingo, bajo la dirección del Instituto Nacional Electoral.
Luis Miguel Barbosa Huerta, de la coalición Juntos Haremos Historia, será quien abra el debate, mientras que Enrique Cárdenas Sánchez, del PAN, PRD y Movimiento Ciudadano, será el último que haga el uso de la palabra durante el encuentro, según se definió ayer en el sorteo que realizó la Comisión Temporal de Debates del INE, que preside el consejero Ciro Mutayama.
Lo interesante es que ahora se sabe que el primer round se efectuará justamente entre Barbosa y Cárdenas, quienes son hasta ahora el 1-2 en las preferencias electorales y quienes se han enfrascado en una guerra de declaraciones en los últimos días.
Cárdenas tendrá que exponer su plataforma en materia de empleo y desarrollo regional en un minuto para que después los otros dos candidatos cuestionen sus planteamientos, comenzando por Barbosa.
Seguro que este ejercicio de contraste de propuestas sacará chispas.
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Una vez concretado ¡por fin! el encuentro de los integrantes del Consejo Coordinador Empresarial con Luis Miguel Barbosa, el presidente de ese organismo de representación declaró ante los medios el tipo de relación que los hombres de negocios desean con el futuro mandatario del estado, sea quien sea.
El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Montiel Solana, afirmó que este sector no secuestrará ni será secuestrado por el próximo gobierno estatal.
"No pretendemos ni que él nos secuestre, ni nosotros secuestrarlo; qué bueno que ambas partes entendemos eso como una relación institucional, de respeto y de trabajo", expuso.
No está muy claro que qué se refiere con eso del “secuestro”, pero tal vez habla de autonomía e independencia en la toma de decisiones.
A ver si es cierto.
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Lo dicho: el ayuntamiento de Puebla terminó por ceder a la presión de los payasos, pues un día después del plantón realizado en el zócalo de la ciudad anunció que volverán a “trabajar” en el corazón del Centro Histórico, tal y como demandaban.
A través de las redes sociales, la Secretaría de Gobernación municipal, a cargo de René Sánchez Galindo, dio a conocer que siempre sí les permitirá ocupar la vía pública, sobre la 3 Oriente, a un costado de catedral.
El argumento del funcionario: una supuesta política de inclusión en favor de todos los grupos de la ciudad.
En un inicio el ayuntamiento había ofrecido como alternativas el parque de San Luis, ubicado en las calles 5 de Mayo y10 Oriente, así como la Feria de Puebla, solo de manera temporal, pero como eso no satisfizo a los payasos, ahora se quedarán junto al zócalo.
Eso sí, la Comuna afirma que antes de conseguir el permiso tendrán que cubrir una serie de requisitos que pronto se darán a conocer, para disque mantener el orden en la zona.
Luego entonces, el centro de la ciudad seguirá asemejándose cada vez más a un mercado sobre ruedas, desorganizado, feo y sucio, donde cada quien haga lo que quiera gracias a la “inclusión”.
