Si usted es dueño de un vehículo que visiblemente contamine prepare su cartera pues parece que va en serio la aplicación de sanciones por parte de los agentes de Tránsito Municipal de la capital poblana con multas que irán de los mil 689 a los dos mil 534 pesos.
La presidenta municipal Claudia Rivera Vivanco asegura que ya está muy avanzado el proyecto para poner en práctica algo que ya es una atribución del ayuntamiento y que está contenido en el Código Reglamentario Municipal.
El Artículo 274, fracción I, inciso h) que establece multas de 20 a 30 días de Unidad de Medida de Actualización (UMA) a quien conduzca vehículos que contaminen ostensiblemente el ambiente o produzcan ruido o humo excesivo.
Pero en lugar de, simplemente, aplicarlo, la alcaldesa piensa en una estrategia para poner en marcha las sanciones y de avisarle a los ciudadanos que de no corregirlo vendrá la penalización económica.
Bien por la iniciativa de que se haga valer la normativa, pero parte del análisis debe considerar el riesgo que existe con agentes viales tengan una herramienta más para obtener una buena “mordida”, que sigue sin desterrarse del gobierno municipal.
Ojalá la estrategia también tenga instrumentos para observar y sancionar omisiones de aquellos uniformados que se presten a buscar dádivas.
***
Ahora tocó a Puebla una escena en la que el “pueblo bueno” impide a elementos del Ejército Mexicano realizar tareas en contra del robo de combustible en San Martín Texmelucan.
Los soldados intentaron acercarse a ductos de Petróleos Mexicanos donde huachicoleros extraían gas de manera ilegal sin embargo unos espontáneos ciudadanos salieron en defensa de los delincuentes, se plantaron sobre la calle Lardizábal de la colonia La Purísima y lanzaron piedras a la milicia.
En un video difundido en redes sociales se observa que los uniformados no repelen la agresión y optan por retroceder.
Por desgracia las escenas se replican en diferentes puntos del país y el respeto o si gusta usted, el temor que se tenía de los soldados ha venido de más a menos y mandan señales poco favorables hacia el combate a la delincuencia.
Hacen pensar que si ni el ejército, que cuenta con armas de grueso calibre, entrenamiento táctico y vehículos blindados, qué pueden hacer policías municipales con todas las limitaciones que sabemos tienen.
No vaya a ocurrir lo mismo con la Guardia Nacional, que, de entrada, está teniendo serias complicaciones para reclutar al que será su personal. Por el bien de Puebla y de México, que no sea así.
