Polémicos y cuestionados, los procesos de designación de titular en la Comisión de Derechos Humanos del Estado y en la Auditoría Superior del Estado reflejan las debilidades de la democracia poblana, puesto que solo se quedaron en una discusión política que, según parece, no irá a más.
Esa es la apreciación del rector de la Universidad Iberoamericana, Mario Patrón Sánchez, alrededor de las recientes designaciones llevadas a cabo desde el Poder Legislativo local, que se distinguieron por la confrontación de una mayoría a cargo de Morena y sus aliados con los representantes de otros partidos, principalmente el PAN.
“Me parece que todos estos procesos dan cuenta de nuestra democracia débil. Deberían de ser procesos muy cuidados por todas las fuerzas políticas, transparentes, de parlamento abierto y, sobre todo, en función de herramientas y capacidades que los tienen que habilitar (a los aspirantes) para ocupar el puesto”, subrayó el académico.
Y tiene razón.
Tendría que haber un proceso de designación técnico y transparente para elegir a quien tenga mayores capacidades para desempeñar el cargo que se está poniendo sobre la mesa, no de otro tipo de consideraciones, como las políticas.
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Por cierto, el gobernador Luis Miguel Barbosa respondió a los panistas y a todos aquellos que afirman que la elección del nuevo auditor superior, Francisco José Romero Serrano, derivó de una instrucción suya.
Barbosa se desmarcó del personaje, a quien los panistas ya llaman el “auditor carnal”.
“Yo hace tiempo que no hablo con Francisco Romero”, expuso, para argumentar que no había tenido nada que ver con su nombramiento.
En cambio, les recordó a los diputados y dirigentes del PAN que fueron ellos quienes en el pasado reciente impusieron un auditor a modo del gobierno del estado, en alusión a David Villanueva y el ex gobernador Rafael Moreno Valle, y que lo hicieron bajo presiones y amenazas.
“No sé a qué se refieran con eso. Yo hace tiempo que no hablo con Francisco Romero. Esta dinámica (el proceso de designación) se dio en el Congreso local. Respeto los procedimientos del Congreso. Acción Nacional está dedicado a querer boicotear todo lo que se hace desde los poderes públicos del Estado. Que recuerden cómo nombraron al auditor anterior, en medio de amenazas y presiones; que recuerden qué papel jugaron y cómo ejercieron el poder”, les dijo.
Por ahí ni para debatirle.
En efecto, en el pasado los panistas hicieron lo mismo que hoy denuncian.
Que, atención, eso tampoco es pretexto para justificar que en el presente se repitan los esquemas.
Se supone que la 4T no recurriría a ese tipo de imposiciones.
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Muy lentos van en el ayuntamiento de Puebla con los prometidos trabajos de rescate del Mercado Unión, que tendrían que comenzar este mismo año.
De hecho, no hay ninguna obra todavía, debido a que la Secretaría de Gobernación municipal no ha podido concretar las negociaciones con los dueños de los locales.
Así que el asunto va para largo.
