A juzgar de la información pública del Gobierno del Estado, se debería de reconsiderar la pertinencia de la llamada Policía Turística pues de apoyo al turismo tiene poco y de acciones ligadas a la seguridad todo lo demás.
Resulta que de las acciones reportadas el año pasado por esta corporación, creada en tiempos del morenovallismo, la mayor parte de las 454 acciones fueron para realizar actividades netamente policiacas.
En total, solamente apoyaron con indicaciones a turistas nacionales y extranjeros en 16 ocasiones, realizaron apoyos de traducción en tres más y realizaros dos acciones de acompañamiento, esto quiere decir que representan el 4.6% de las intervenciones.
Por el contario participaron en 135 eventos que implicaron la presentación de posibles delincuentes ante un Juez Calificador, acompañaron en 85 ocasiones a personas que lo solicitaron para realizar retiros de efectivo y ayudaron a 58 ciudadanos para ubicar a familiares extraviados.
La información refiere que en 38 ocasiones los elementos de la Policía Turística remitieron a presuntos delincuentes ante el Ministerio Público, en 35 ocasiones dieron orientación médica y en 24 casos más brindaron vigilancia preventiva.
Así que valdría la pena valorar si se justifica que una policía que no realiza funciones turísticas siga llamándose así.
***
Por novena ocasión desde que es presidente, Andrés Manuel López Obrador estará de visita en territorio poblano y en esta ocasión será para sostener una reunión con pueblos originarios de Pahuatlán.
De acuerdo a la agenda semanal del mandatario, el sábado próximo estará en ese municipio en un evento organizado por el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas y ese mismo día también visitará Tenango de Doria, Hidalgo.
Lo interesante del asunto es saber si la agenda presidencial contempla como propósito tratar de convencer a los indígenas de ambas comunidades si sobre el gasoducto Tuxpan- Tula que pasaría por sus territorios y que han generado un rechazo generalizado.
***
Francisco Romero Serrano, titular de la Auditoría Superior del Estado (ASE), reveló que no son tres sino 17 las obras realizadas en tiempo del morenovallismo bajo un esquema de Pago por Prestación de Servicios (PPS).
Lo malo del asunto es que por su propia naturaleza, explicó el Auditor, estas obras no pueden ser revisadas en sus expedientes. Por ello se abocarán a revisar los contratos, para verificar que exista una proporcionalidad entre la contraprestación mensual con el costo real de la obra.
“Algunas obras por su naturaleza no pueden ser revisadas porque son PPS, con participación de terceros y ese tercero es el que tiene el expediente de obra como tal. De las 32, 17 corresponden a PPS”, explicó.
Durante el gobierno de Rafael Moreno Valle, su secretario de Administración y Finanzas, Roberto Moya Clemente, solamente reconoció tres contratos bajo la modalidad de PPS: el Centro Integral de Servicios (CIS), el Museo Internacional Barroco (MIB) y las plataformas de Audi, todos ellos con un monto comprometido a 25 años de más de 22 mil 500 millones de pesos.
En su declaración, el auditor no profundiza en cuáles son las otras obras bajo esquema PPS aunque se sabe que entre el paquete de 32 obras que son revisadas con lupa figuran la Estrella de Puebla, Ciudad Modelo, el Tren Turístico Puebla-Cholula, el Museo de la Evolución, el Teleférico y la línea 2 de la RUTA.
.jpg "Donald Trump (11).jpg")