La amenaza de castigar los hechos de corrupción del pasado sigue latente, incluso, cada vez más presente en el ambiente político-gubernamental del estado.
Ayer tocó el turno al grupo de los expresidentes municipales, según lo revelado por el gobernador Miguel Barbosa Huerta en su habitual mañanera.
Barbosa informó que la Auditoría Superior del Estado presentó 21 denuncias en contra de exediles de la entidad por su presunta participación, incluso autoría, en diversos hechos de corrupción, lo que tendría que ver principalmente con el desvío de los recursos públicos.
Aunque no quiso dar nombres de los acusados, sí dejó clara la identidad de uno de ellos, quien estuvo al frente del ayuntamiento de San Andrés Cholula en el periodo anterior al de Karina Pérez Popoca (¿le suena el nombre de Leoncio Paisano Arias?).
Así lo dijo el mandatario estatal:
“La Auditoría Superior del Estado presentó 21 denuncias contra exalcaldes a los que se les detectaron operaciones simuladas con facturas falsas, uno de ellos es San Andrés Cholula. El actual ayuntamiento de la alcaldesa Karina Pérez ya tiene integrada toda una investigación por diversos actos de corrupción contra el señor Paisano y contra gente de su gobierno, contra todos ellos.”
Eso significa que, además de exfuncionarios de las administraciones del extinto Rafael Moreno Valle y José Antonio Gali Fayad, el auditor Francisco Romero Serrano va también en contra de expresidentes municipales.
Curiosamente un panista parece encabezar la lista de los exalcaldes en apuros.
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En el PRI no dejan de utilizar esos métodos anquilosados y anacrónicos que los distinguieron en el pasado como un partido que jugaba a la democracia pero que en realidad apelaba siempre al autoritarismo de un único personaje.
Eso parece repetirse ahora que la Comisión Nacional de Postulación de Candidaturas ha establecido el método de selección que usará para ungir a sus 15 candidatos a diputados federales de Puebla (lo mismo que del resto del país).
Dicho organismo interno, facultado a su vez por la Comisión Política Permanente del Consejo Político Nacional, que preside ni más ni menos que Alejandro Moreno Cárdenas, determinó que será a través de exámenes como elegirán a sus mejores hombres y mujeres para abanderar la causa partidista del 2021.
Y qué evaluarán los líderes tricolores para postular candidatos.
Ahí le va: conocimientos, aptitudes y habilidades, que serán calificadas por el Instituto de Formación Política “Jesús Reyes Heroles”.
Parece una broma, pero no lo es.
El priismo ha optado por este método de selección que, en realidad, disfraza el ancestral dedazo.
Un auténtico dedazo con fachada de “examen de conocimientos” que nadie creerá, pero en el que todos participarán, como siempre en ese partido.
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Vanessa Barahona de la Rosa volvió a dejar planchados a los diputados integrantes de la Comisión de Turismo del Congreso del Estado.
La titular de la Secretaría de Turismo de la administración estatal había confirmado para estar presente en una comparecencia virtual que sostendría este miércoles con los legisladores locales, en punto de las 2 de la tarde, pero un poco después de las 10 de la mañana usó de enlace al secretario de Gobernación, David Méndez Márquez, para disculparse por lo que sería su nueva y segunda ausencia.
Los diputados solo quieren preguntarle sobre la situación que atraviesa el sector turístico en la entidad, además de que pretenden exponerle la preocupación de los prestadores de servicio de la industria ante la contingencia sanitaria por coronavirus.
En realidad, no pretenden atacarla, aunque, entre los integrantes de esa comisión figure José Juan Espinosa Torres.
