Claudia Rivera Vivanco prepara el terreno para ausentarse del ayuntamiento de Puebla sin provocar un daño en su imagen pública. ¿Cómo?, se preguntará usted, pues comunicándole a los habitantes del municipio más grande del estado que, con o sin ella, el personal y las instituciones que dan forma al gobierno municipal seguirán trabajando a tambor batiente hasta el último día de la administración.
Por supuesto, en caso de concretarse su partida, la edil emanada de Morena no se ausentará de manera definitiva, sino solo el tiempo necesario para participar en esa aventura denominada reelección y que ha metido una nueva dinámica al proceso electoral que ya se encuentra en curso.
La presidenta municipal protagonizó este lunes 10 entrevistas consecutivas en el Salón de Protocolos del palacio, y en ninguna de ellas, incluida la que tocó hacer a EL SOL DE PUEBLA, hizo el anuncio o la confesión clara y explícita que se esperaba acerca de sus intenciones de reelección.
En el pasado recurrió a las artes de la evasión discursiva que todo político debe dominar para evitar traspiés y descalabros, pero esta vez la tuvo más fácil. Con solo apelar a la reciente prohibición del Consejo General del INE pudo guardarse las respuestas que podrían haber complicado su estrategia para separarse del cargo en los próximos días y lanzarse a una nueva aventura electoral.
Sin embargo, pese a sus propias restricciones, no impidió que la atmósfera que rodeó las entrevistas y el mensaje que sus palabras enviaran entrelíneas fuera acomodado, justamente, en el contexto electoral.
Si no planea o no ha decidido abandonar temporalmente la presidencia municipal, ¿para qué insistir una y otra vez en las capacidades del ayuntamiento para trabajar con la misma eficiencia y los mismos resultados que lo ha hecho hasta el momento?
Por supuesto que Rivera Vivanco tiene las maletas listas para marcharse de la oficina.
A menos, como siempre puede ocurrir, que un acontecimiento de causa mayor le haga cambiar de opinión en los días por venir.
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A propósito de la restricción establecida desde el INE para que los servidores públicos del país se pronuncien en público sobre las contiendas electorales, ya sea a favor o en contra de cualquiera de los contendientes, el gobernador Miguel Barbosa respondió que no tiene problema alguno para acatar la disposición y afirmó que así lo hará.
“Nosotros vamos a ser respetuosos de las resoluciones que dicten los órganos electorales y si hubiere un cambio a la resolución que dicta el INE por impugnación que hiciera alguna parte interesada, pues veremos cómo queda al final, así es que me pronuncio para que sea yo en el gobierno del estado el primero en respetar los acuerdos de los órganos electorales”, expuso el mandatario.
En el pasado reciente, Barbosa ha sido cuestionado por los reporteros en torno a temas concretos de Morena, partido del que emanó como candidato a gobernador, así como de la alianza que han conformado los partidos PAN, PRI y PRD, y en todas las veces ha contestado.
Así que, esta medida, impulsada principalmente por los consejeros Lorenzo Córdova y Ciro Murayama, tiene en el gobernador y los 217 presidentes municipales a sus destinatarios.
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La presidenta del Tribunal Electoral del Estado, Norma Angélica Sandoval Sánchez, acaba de dar a los ediles y diputados locales que buscan la reelección un buen regalo (atrasado) de Reyes Magos.
Los presidentes municipales y legisladores que pretenden repetir en el cargo tendrán un mes más antes de solicitar licencia, después de que ese órgano electoral aprobara reducir de 120 a 90 días antes de la elección, el periodo para que los interesados se separen de sus funciones.
Si bien el plazo depende en la mayoría de los casos de cada partido, basados en lo que dictan las reglas de las contiendas internas, la medida, que dota de 30 días más de beneficios a los interesados, es buena.
