¿Qué pasa con el senador Alejandro Armenta Mier?
Apenas transcurrió la consulta para la revocación de mandato del presidente López Obrador, con todas sus críticas, polémica y puntos de discusión encontrados, y el legislador poblano, emanado de Morena, ya quiere meter a los mexicanos en procesos similares en los estados.
Armenta, que aspira a ser gobernador de Puebla en la sucesión del 2024, anunció que propondrá reformar la Constitución del país para que en las entidades federativas se realicen otras consultas de revocación de mandato, pero relacionadas con el gobernador, los diputados federales y, también, los senadores.
Por supuesto, esta idea pone como responsable de la organización y puesta en marcha de las consultas al Instituto Nacional Electoral, como ocurrió con el proceso de revocación de mandato del pasado 10 de abril.
Dicho ejercicio democrático se entiende como el instrumento de participación solicitado por la ciudadanía para determinar la conclusión anticipada en el desempeño del cargo a partir de la pérdida de la confianza.
¿No vio Armenta todas las complejidades que generó la consulta en torno a la figura presidencial, las discusiones y las críticas de parte de los sectores más pensantes de la sociedad, que no necesariamente rivales o enemigos del régimen?
¿Tampoco se dio cuenta de los obstáculos que desde el poder se le pusieron al INE, como el recorte de recursos económicos para la organización de esa consulta?
Una propuesta de esa manera, a nivel nacional, en cada uno de los estados, suena fuera de contexto, innecesaria, hasta ruda, en estos momentos.
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Atención Aristóteles Belmont Cortés, secretario de Organización de Morena con funciones de presidente, desde el PAN y el PRI pueden estarle comiendo el mandado a su partido de cara a los comicios estatales del 2024, por lo menos aquí en la ciudad de Puebla, y ni cuenta se ha dado.
Ambos partidos opositores han utilizado diferentes trincheras para emprender acciones económicas directas en beneficio de los habitantes del municipio, con ideas más o menos creativas, a las que se han visto obligados debido a la imposibilidad de regalar dinero como lo hace el gobierno federal.
Un ejemplo de ello es el programa que puso en marcha el presidente municipal Eduardo Rivera Pérez, emanado del partido blanquiazul.
Rivera dio inicio al programa “Martes de Descuentos”, en el que participan 200 establecimientos comerciales de la capital para bajar los precios al consumidor en ese día de la semana en particular.
Así, mediante la celebración de ese acuerdo, se beneficia a los compradores de esas tiendas y a los empresarios, quienes podrán ingresar más dinero en martes, un día tradicionalmente malo para las ventas al menudeo.
En el PRI se ha hecho algo similar.
El recién estrenado dirigente del Comité Directivo Municipal, Sebastián Hernández Orozco, ha realizado un convenio con una cantidad importante de negocios para otorgar descuentos a los militantes del tricolor, lo que no es poca cosa en un contexto de crisis económica como el actual.
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Anunciada la decisión definitiva, a los comerciantes del centro histórico que anteriormente se opusieron a la peatonalización de la 6 Oriente (la calle de los dulces) no les ha quedado más remedio que aceptar y adaptarse a las nuevas circunstancias.
José Juan Ayala Vázquez, representante de los comerciantes del primer cuadro de la ciudad, dio a conocer que sus agremiados han pensado qué hacer para lograr la reactivación de sus ventas.
El remedio está en la promoción de eventos culturales en la vía pública para atraer visitantes y turistas, eventuales compradores de los famosos dulces típicos. Les irá bien.
