Las reacciones de indignación por el asesinato de la abogada y activista Cecilia Monzón Pérez, ocurrido el sábado en el municipio de San Pedro Cholula, se multiplicaron este lunes y rebasaron el territorio nacional con un pronunciamiento enérgico del gobierno de España, país del que la mujer ejecutada a balazos también tenía nacionalidad.
El tema escaló a tal nivel que el presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, tuvo que referirse a él en una parte de la conferencia de prensa mañanera, para afirmar que los responsables materiales del feminicidio habían sido unos sicarios mandados expresamente para cometer ese crimen y comprometerse a trabajar para resolver el crimen, de la mano del gobierno del estado de Puebla.
En su turno, el mandatario estatal, Miguel Barbosa Huerta, hizo lo propio. Fue directo al llamar feminicidio ese hecho criminal y reiteró el mensaje de López Obrador en el sentido de que la colaboración coordinada de ambos niveles de gobierno ayudaría a dar con los responsables y castigarlos.
Mientras, familiares y amigos de Monzón Pérez la despidieron en un funeral privado, en el que, además de los sentimientos naturales de tristeza y dolor por el ser amado perdido, imperó el deseo de encontrar a los culpables para hacerle justicia.
No será un homicidio que quede impune, fue el compromiso expresado por los gobernantes de la cuatroté desde sus trincheras. Eso esperan los poblanos.
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Rafael Micalco Méndez hizo una observación política interesante este lunes en conferencia de prensa.
El diputado local emanado del PAN dijo que el apoyo que dio la fracción del PRI a su par de Morena en el Congreso del Estado, para que Amanda Gómez Nava fuese seleccionada como nueva titular de la Auditoría Superior del Estado, pone en riesgo la alianza electoral que tienen planeada los dos partidos de oposición.
Si los tricolores se aliaron con la cuatroté para la votación de su candidata a auditora, ¿cómo entonces se unirán al blanquiazul para enfrentar a Morena en las elecciones locales del 2024?, se pregunta Micalco, y con razón.
El solo comportamiento de los legisladores que presumiblemente armarán la coalición Va por Puebla, que además de PAN y PRI tendrá de su lado al PRD, en la sesión del pasado jueves, debería llevar a los dirigentes de esos partidos a repensar la eventual alianza.
Así como a nivel nacional se presumía que, si el PRI avalaba la reforma eléctrica de López Obrador, ya no tendría nada que hacer del lado del PAN, lo mismo podría pensarse acá en el contexto de la selección de Gómez Nava.
Sin embargo, el razonamiento de Micalco se enfrenta a dos obstáculos.
Primero, que dos diputadas del PAN votaron a favor de la nueva auditora y así lo reconocieron.
Y segundo, que el propio diputado no interviene en ninguno de los procesos de negociación de la coalición. Así que lo más probable es que el comentario quede como una mera anécdota.
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El ingreso de pastelillos de chocolate con marihuana en el Centro Escolar Morelos, ocurrido el viernes de la semana pasada, volverá a poner en el debate público la implementación del denominado “operativo mochila”, que en anteriores ocasiones ha tratado de ponerse en marcha sin éxito alguno.
Después de los acontecimientos, que trascendieron debido a la intoxicación sufrida por algunos estudiantes tras el consumo de los pastelillos, las madres de familia de ese centro escolar se reunieron este lunes para pedirle a las autoridades educativas que se emprenda un instrumento de prevención que evite el ingreso de drogas a las aulas. La primera idea que llegó a la mesa fue la del “operativo mochila”, una presunta herramienta de vigilancia que no ha funcionado en el pasado y no tendrá por qué hacerlo ahora.
Lo que es un hecho es que el titular de la SEP, Melitón Lozano Pérez, tendrá que pensar en un remedio para dar certeza y tranquilidad a las madres de los alumnos.
