Más de dos mil presuntos simpatizantes de la 4T y del presidente Andrés Manuel López Obrador moverán mañana sábado a sus huestes para tratar de conseguirse un lugar en el Consejo Estatal de Morena, que quedará formado por 75 mujeres y 75 hombres.
La presunción de simpatía con el Movimiento de Regeneración Nacional se emplea en esta columna debido a que muy probablemente muchos de los aspirantes en realidad no han de comulgar con los preceptos de López Obrador y su partido, pero dicen que sí y pretenden quedar dentro de ese selecto grupo de 150 consejeros para disfrutar las mieles del servicio público, que no son otra cosa más que poder y dinero.
Dos mil 300 personas, en su mayoría poblanos, fueron avalados para participar mañana en las 15 asambleas distritales que se realizarán con el fin de elegir a los nuevos integrantes del Consejo Estatal de ese partido.
Detrás de muchos de esos aspirantes hay jefes políticos que apadrinan su nominación y que aspiran hacerse del control del partido a través de ellos, de cara, lo más importante, al proceso electoral de 2024.
¿Quiénes son los líderes de esos grupos políticos?
Por lo menos hay cuatro claramente identificables: el gobernador Miguel Barbosa Huerta, la expresidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, así como los legisladores federales y aspirantes al gobierno del estado, Alejandro Armenta Mier e Ignacio Mier Velasco.
En los corrillos del partido presidencial se asegura que Barbosa y Armenta han hecho un acuerdo para apoyar a un solo grupo de aspirantes a consejeros y que en un bando opuesto se encuentran también aliados entre sí, Rivera y Mier.
La selección de mañana es relevante porque representa el paso previo a la definición del nuevo dirigente.
Quienes se hagan de la mayoría pondrán presidente del partido el 13 de agosto, y después, en el 24, influirán sobre el resto de los interesados en la definición de candidatos a puestos de elección popular.
Por eso es que esos cuatro actores políticos están metidos de lleno en el proceso, a través de sus respectivos operadores.
Tres aspiran a competir por el gobierno del estado y uno a manejar, para uno o una de los suyos, los hilos de su propia sucesión.
La contienda de mañana se realizará en 40 centros de votación, repartidos en 15 cabeceras distritales, entre 9 de la mañana y 5 de la tarde.
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La diputada local emanada del PAN, Guadalupe Leal Rodríguez, ceja en el intento que busca prohibir las corridas de toros y las peleas de gallos en el estado, como propuso a partir de una iniciativa de ley que provocó polémica y puso a debatir a personajes de diferentes partidos políticos.
Decidida a evitar que la propuesta legislativa sea votada en contra con el argumento de que habrá personas y familias enteras que queden en el desamparo con la pérdida de su empleo, Leal acudió con la titular de la Secretaría de Economía del gobierno del estado, Olivia Salomón Vibaldo, para saber cuánta gente depende económicamente de la tauromaquia y los gallos.
Aunque no logró saber con exactitud cuántas personas tienen empleo gracias a esas dos actividades, sí pudo conocer que los trabajos que se generan son temporales y representan menos del uno por ciento de la actividad agropecuaria en la entidad.
Eso, dicho en otras palabras, significa que la afectación económica por prohibir esos espectáculos será marginal, y que no podrá significar un argumento de peso entre sus opositores para conservar la defensa de ambos.
La diputada está en lo suyo, con todo y que, se sabe, la principal negativa para impedir corridas de toros y peleas de gallos en la entidad provendrá del grupo mayoritario en el Congreso, el de Morena y la 4T.
