Claudia Rivera Vivanco no mintió.
No se sabe si por iniciativa propia o por la presión de los grupos que resultaron perjudicados con la elección de 150 nuevos consejeros estatales, pero el presidente nacional de Morena, Mario Delgado Carrillo, dio instrucciones para que se revisaran todos y cada uno de los paquetes de votos relacionados con la contienda del sábado pasado en Puebla.
Los sabuesos del dirigente partidista tienen la orden de revisar la documentación existente para detectar irregularidades y, en su caso, proceder a la anulación de los triunfos en los que se acredite que fue a través de ilegalidades como se consiguió la victoria.
Eso significa que la expresidenta municipal de Puebla dijo la verdad cuando aseguró que vendría una etapa de revisión del proceso para avalar o echar abajo la elección de los consejeros, lo que, en teoría, tiene que ocurrir antes del 13 de agosto, día en que esos nuevos integrantes del órgano directivo definirán al nuevo dirigente del partido presidencial.
Sin embargo, aunque haya una auscultación minuciosa de los paquetes de votos, se prevé muy complicado que pueda comprobarse que los simpatizantes (ahora militantes) de Morena hayan emitido su voto por uno u otro aspirante a partir de la manipulación o la compra del mismo.
Los paquetes no contendrán ninguna evidencia de inducción ilegal del voto a favor de los ganadores.
Por ahí no se hallará nada.
Pero bueno, que se investigue, en una de esas logran tirar a uno que otro consejero presumiblemente electo.
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Mario Riestra Piña ya se anotó para competir por la candidatura del PAN a la presidencia municipal de Puebla.
A diferencia de su compañera de partido y de legislatura, Ana Teresa Aranda, que fue ambigua en la respuesta que dio a los reporteros cuando le preguntaron, esta misma semana, si pretende postularse como candidata a gobernadora o a presidenta municipal, Riestra dijo que sí, que le entrará cuando estén dadas las condiciones y hayan llegado los plazos para hacerlo.
Apuntó que le gustaría estar en la boleta electoral en 2024 y subrayó que va a trabajar por el municipio de Puebla. En función del escenario, de la decisión que se tome en equipo y que efectúen otras personalidades, en alusión a Eduardo Rivera Pérez, si se abre el espacio, participará.
Eso quedó claro.
Si el actual presidente municipal decide contender por la gubernatura, él hará lo propio por la alcaldía de la capital.
Si no, si el edil opta por buscar la reelección, él respetará y acatará.
Mario Riestra se mostró alineado con Eduardo Rivera y respetuoso de las decisiones que este vaya a tomar.
También expuso, para no generar malas interpretaciones, que continuará entregado a su labor como diputado federal, lo que será, al fin y al cabo, su mejor carta de presentación, ante los panistas primero y frente a los electores después, en caso de competir por la alcaldía.
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Todavía no empieza la contienda interna, formal, para definir candidato a la presidencia de la república en Morena, y la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ya se ha metido en problemas legales en el estado de Puebla.
El PAN poblano denunció ante el Instituto Nacional Electoral a la jefa de gobierno por promoción personalizada y actos anticipados de campaña, en los que habría incurrido a partir de la difusión de anuncios espectaculares con la imagen y nombre de la servidora pública, haciendo referencia a la baja en la delincuencia.
La propaganda de Sheinbaum es sumamente burda, en efecto, pues recurre a ese viejo recurso de buscar una revista que sirva de promoción de la imagen con una supuesta entrevista fake cuya portada se utiliza para tapizar un territorio determinado.
Como aspirante a la sucesión de López Obrador, la jefa de gobierno no debería estar tan confiada de que podrá engañar a los organismos electorales.
El PAN sabe de eso, pues lo hizo con Rafael Moreno Valle y José Antonio Gali Fayad, así que, quizá, ha preparado una muy buena denuncia.
