/ miércoles 21 de julio de 2021

Estos jóvenes no plantean irse de Cuba

“Yo creo que sí, yo creo que es muy diferente a lo que hemos visto antes”, responde Ricardo Pascoe Pierce cuando le planteamos que las protestas en Cuba lucen como una película vieja para viejos editores de periódicos, tal vez protagonizada en otro momento por Corea del Norte en algún cable de agencias, o por opositores venezolanos o cubanos viviendo en Miami gritando afuera del café Versailles, según algún portal de noticias regional. Un episodio más de esos que los lectores ocasionales olvidan rápido. “Establezco dos o tres diferencias importantes”, dice el hombre que en este país respetamos profundamente por su paso por el Partido de la Revolución Democrática, por su cercanía con Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y por estar al frente de la embajada de México en Cuba en los inicios del nuevo siglo.

“En primer lugar el fenómeno generacional”, arranca Pascoe Pierce. “Quien está encabezando la rebelión en Cuba es una generación de jóvenes completamente desafectos del régimen, es decir, no creen ni en su Gobierno ni en la retórica, digamos tradicional del gobierno cubano contra Estados Unidos y a favor, dicen, de los pueblos oprimidos. Pero, por el otro lado, es una generación que no está planteando irse de la Isla. Están planteando quedarse y cambiar la Isla. Y esa es una diferencia muy grande, porque los dos últimos grandes movimientos, en el 94, el llamado Maleconazo, pero también en 1908 el Marielazo, en ambas situaciones la gente planteaba irse de la Isla, hoy no están planteando eso, están planteando quedarse”.

No están pidiendo visas, están pidiendo libertad y cambio de régimen, esa es una gran diferencia.

“Ese es un primer cambio, el segundo cambio es el fenómeno de la revolución tecnológica, hoy Cuba vive la confrontación de dos revoluciones, la Revolución Cubana, con su pensamiento único, y la Revolución Tecnológica, con su diversidad de opiniones, de nuevas vías de comunicación, de mayor democracia y libertad en la comunicación, en la expresión. Entonces, estas dos revoluciones son políticas, son sociales y son culturales. Y yo veo que los jóvenes están utilizando los instrumentos de esta revolución para expresarse de otra manera, no es casual que el Gobierno haya cortado el internet, pero no va a poder cortar el internet mucho tiempo, porque el internet ya es indispensable para la economía cubana. Si no hay internet no funciona la economía, ni en Cuba ni en ningún lado, entonces van a tener que volver a poner el internet y por lo tanto esa revolución cultural, intelectual, social, que es la Revolución Tecnológica, versusla Revolución Cubana, van a seguir. Y por último, me parece muy importante destacar que la gente piensa que sí es posible cambiar el régimen, han visto experiencias en toda América Latina. Chile es un caso reciente, donde por un incidente del aumento del precio del Metro, que fue creciendo y creciendo el movimiento ante la represión del Gobierno, porque el Gobierno chileno de Derecha salió a reprimir a la gente, y fue creciendo... hasta que ahora resulta que Chile está hasta cambiando su Constitución. Creció y creció a partir de un detalle. Y lo mismo está sucediendo en Cuba, porque el presidente Miguel Díaz-Canel llamó a la represión públicamente como un tirano, igual que el tirano chileno, es decir, reaccionaron los dos de la misma manera, primero la represión ante las protestas y después las cosas siguen creciendo a pesar de ellos”.

hiroshi@oem.com.mx

“Yo creo que sí, yo creo que es muy diferente a lo que hemos visto antes”, responde Ricardo Pascoe Pierce cuando le planteamos que las protestas en Cuba lucen como una película vieja para viejos editores de periódicos, tal vez protagonizada en otro momento por Corea del Norte en algún cable de agencias, o por opositores venezolanos o cubanos viviendo en Miami gritando afuera del café Versailles, según algún portal de noticias regional. Un episodio más de esos que los lectores ocasionales olvidan rápido. “Establezco dos o tres diferencias importantes”, dice el hombre que en este país respetamos profundamente por su paso por el Partido de la Revolución Democrática, por su cercanía con Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano y por estar al frente de la embajada de México en Cuba en los inicios del nuevo siglo.

“En primer lugar el fenómeno generacional”, arranca Pascoe Pierce. “Quien está encabezando la rebelión en Cuba es una generación de jóvenes completamente desafectos del régimen, es decir, no creen ni en su Gobierno ni en la retórica, digamos tradicional del gobierno cubano contra Estados Unidos y a favor, dicen, de los pueblos oprimidos. Pero, por el otro lado, es una generación que no está planteando irse de la Isla. Están planteando quedarse y cambiar la Isla. Y esa es una diferencia muy grande, porque los dos últimos grandes movimientos, en el 94, el llamado Maleconazo, pero también en 1908 el Marielazo, en ambas situaciones la gente planteaba irse de la Isla, hoy no están planteando eso, están planteando quedarse”.

No están pidiendo visas, están pidiendo libertad y cambio de régimen, esa es una gran diferencia.

“Ese es un primer cambio, el segundo cambio es el fenómeno de la revolución tecnológica, hoy Cuba vive la confrontación de dos revoluciones, la Revolución Cubana, con su pensamiento único, y la Revolución Tecnológica, con su diversidad de opiniones, de nuevas vías de comunicación, de mayor democracia y libertad en la comunicación, en la expresión. Entonces, estas dos revoluciones son políticas, son sociales y son culturales. Y yo veo que los jóvenes están utilizando los instrumentos de esta revolución para expresarse de otra manera, no es casual que el Gobierno haya cortado el internet, pero no va a poder cortar el internet mucho tiempo, porque el internet ya es indispensable para la economía cubana. Si no hay internet no funciona la economía, ni en Cuba ni en ningún lado, entonces van a tener que volver a poner el internet y por lo tanto esa revolución cultural, intelectual, social, que es la Revolución Tecnológica, versusla Revolución Cubana, van a seguir. Y por último, me parece muy importante destacar que la gente piensa que sí es posible cambiar el régimen, han visto experiencias en toda América Latina. Chile es un caso reciente, donde por un incidente del aumento del precio del Metro, que fue creciendo y creciendo el movimiento ante la represión del Gobierno, porque el Gobierno chileno de Derecha salió a reprimir a la gente, y fue creciendo... hasta que ahora resulta que Chile está hasta cambiando su Constitución. Creció y creció a partir de un detalle. Y lo mismo está sucediendo en Cuba, porque el presidente Miguel Díaz-Canel llamó a la represión públicamente como un tirano, igual que el tirano chileno, es decir, reaccionaron los dos de la misma manera, primero la represión ante las protestas y después las cosas siguen creciendo a pesar de ellos”.

hiroshi@oem.com.mx