/ lunes 26 de febrero de 2018

¿Exceso de confianza en Morena?

Las altas expectativas de votación que tienen los líderes del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en Puebla pueden derivar en un exceso de confianza. Y el exceso de confianza, como se sabe, puede llevar a descuidar aspectos de la contienda y terminar en una inesperada tragedia electoral.

Esta combinación de sentimientos y preocupaciones existentes al interior del partido de Andrés Manuel López Obrador parece haber detenido, al menos por unos días, la formalización de Claudia Rivera Vivanco como candidata a la presidencia municipal de Puebla.

Si bien la eventual nominación de Rivera Vivanco como abanderada de la alianza “Juntos haremos historia”, en la que participan Morena, PT y PES, obedece a una concesión a los genuinos militantes del partido ‘pejista’, el hecho no ha dejado de recibir comentarios negativos entre sus propios compañeros.

Aquellos seguidores de López Obrador que se incorporaron a su equipo en meses recientes son los que han realizado las observaciones más agudas.

Con la debida prudencia, dado que al precandidato presidencial le desagradan las opiniones en contra, han sugerido llevar un perfil más competitivo para la que es la ciudad más importante del estado y la que concentra el mayor número de electores.

El debate interno ha llevado a posponer la unción de Rivera, que emana de la dirigencia estatal del partido, donde es consejera y ocupa la Secretaría de Diversidad Sexual.

El sitio oficial de Morena en internet presenta a la precandidata como brigadista de López Obrador desde 2011 e integrante de la estructura de defensa del voto en los comicios federales de 2012.

Rivera Vivanco posee esos antecedentes internos que otros personajes enfundados en la camiseta del tabasqueño no tienen, como Luis Miguel Barbosa, Alejandro Armenta Mier y Nancy de la Sierra Arámburo.

Aun así, no es su añeja lealtad a los intereses lopezobradoristas lo que está en duda, sino su capacidad para sumarle votos al abanderado presidencial en el núcleo de votantes más grande del estado.

El pragmatismo que Morena ha mostrado en otras demarcaciones parece no tener réplica en el municipio de Puebla.

Según se ve, aquí en la capital lleva ventaja esa teoría que pronostica cascadas de votos en favor de todos los abanderados morenistas, sin importar cualidades individuales, por la sola presencia del ‘Peje’ en la boleta electoral.

Justo eso es lo que preocupa a un sector pensante de la coalición “Juntos haremos historia”, que el exceso de confianza le impida a esos tres partidos políticos hacerse de a una victoria que, a cuatro meses de distancia, se observa posible.


***

Un hecho que pasó desapercibido para la mayoría de los asistentes al informe del edil Luis Banck Serrato, y que vale la pena rescatar, fue la visible incomodidad de Eduardo Rivera Pérez en el evento, celebrado el 15 de febrero en la junta auxiliar Ignacio Romero Vargas.

Ese medio día, el virtual candidato a presidente municipal de Puebla no se sumó a la cascada de aplausos que recibía Banck como parte del ritual acostumbrado en ese tipo de acontecimientos.

Sentado en primera fila, a un costado de Martha Érika Alonso Hidalgo, Rivera Pérez lucía incómodo y hasta molesto.

La razón de ese estado de ánimo pudo estar relacionada con el contenido del informe.

Esa vez, Banck Serrato hizo varias menciones y reconocimientos a la labor del ex gobernador Rafael Moreno Valle y del gobernador en funciones, José Antonio Gali Fayad, y ninguna a la administración de Rivera, que fue edil de Puebla en la primera mitad del sexenio morenovallista.

La sorpresa del respetable pudo ser compartida por Eduardo Rivera al ver las imágenes de Moreno Valle y escuchar su voz en el video de un informe que no era el suyo, como ocurrió ese jueves, pero el enfado debió llegar después, al ser ignorado en los reconocimientos.

En medio de un proceso electoral complejo, una deferencia con el invitado y precandidato a alcalde hubiese sido buena en función del nuevo contexto de unidad partidista que pregona el PAN.


Twitter: @jorgerdzc

Correo: jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx

Las altas expectativas de votación que tienen los líderes del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) en Puebla pueden derivar en un exceso de confianza. Y el exceso de confianza, como se sabe, puede llevar a descuidar aspectos de la contienda y terminar en una inesperada tragedia electoral.

Esta combinación de sentimientos y preocupaciones existentes al interior del partido de Andrés Manuel López Obrador parece haber detenido, al menos por unos días, la formalización de Claudia Rivera Vivanco como candidata a la presidencia municipal de Puebla.

Si bien la eventual nominación de Rivera Vivanco como abanderada de la alianza “Juntos haremos historia”, en la que participan Morena, PT y PES, obedece a una concesión a los genuinos militantes del partido ‘pejista’, el hecho no ha dejado de recibir comentarios negativos entre sus propios compañeros.

Aquellos seguidores de López Obrador que se incorporaron a su equipo en meses recientes son los que han realizado las observaciones más agudas.

Con la debida prudencia, dado que al precandidato presidencial le desagradan las opiniones en contra, han sugerido llevar un perfil más competitivo para la que es la ciudad más importante del estado y la que concentra el mayor número de electores.

El debate interno ha llevado a posponer la unción de Rivera, que emana de la dirigencia estatal del partido, donde es consejera y ocupa la Secretaría de Diversidad Sexual.

El sitio oficial de Morena en internet presenta a la precandidata como brigadista de López Obrador desde 2011 e integrante de la estructura de defensa del voto en los comicios federales de 2012.

Rivera Vivanco posee esos antecedentes internos que otros personajes enfundados en la camiseta del tabasqueño no tienen, como Luis Miguel Barbosa, Alejandro Armenta Mier y Nancy de la Sierra Arámburo.

Aun así, no es su añeja lealtad a los intereses lopezobradoristas lo que está en duda, sino su capacidad para sumarle votos al abanderado presidencial en el núcleo de votantes más grande del estado.

El pragmatismo que Morena ha mostrado en otras demarcaciones parece no tener réplica en el municipio de Puebla.

Según se ve, aquí en la capital lleva ventaja esa teoría que pronostica cascadas de votos en favor de todos los abanderados morenistas, sin importar cualidades individuales, por la sola presencia del ‘Peje’ en la boleta electoral.

Justo eso es lo que preocupa a un sector pensante de la coalición “Juntos haremos historia”, que el exceso de confianza le impida a esos tres partidos políticos hacerse de a una victoria que, a cuatro meses de distancia, se observa posible.


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Un hecho que pasó desapercibido para la mayoría de los asistentes al informe del edil Luis Banck Serrato, y que vale la pena rescatar, fue la visible incomodidad de Eduardo Rivera Pérez en el evento, celebrado el 15 de febrero en la junta auxiliar Ignacio Romero Vargas.

Ese medio día, el virtual candidato a presidente municipal de Puebla no se sumó a la cascada de aplausos que recibía Banck como parte del ritual acostumbrado en ese tipo de acontecimientos.

Sentado en primera fila, a un costado de Martha Érika Alonso Hidalgo, Rivera Pérez lucía incómodo y hasta molesto.

La razón de ese estado de ánimo pudo estar relacionada con el contenido del informe.

Esa vez, Banck Serrato hizo varias menciones y reconocimientos a la labor del ex gobernador Rafael Moreno Valle y del gobernador en funciones, José Antonio Gali Fayad, y ninguna a la administración de Rivera, que fue edil de Puebla en la primera mitad del sexenio morenovallista.

La sorpresa del respetable pudo ser compartida por Eduardo Rivera al ver las imágenes de Moreno Valle y escuchar su voz en el video de un informe que no era el suyo, como ocurrió ese jueves, pero el enfado debió llegar después, al ser ignorado en los reconocimientos.

En medio de un proceso electoral complejo, una deferencia con el invitado y precandidato a alcalde hubiese sido buena en función del nuevo contexto de unidad partidista que pregona el PAN.


Twitter: @jorgerdzc

Correo: jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx