/ jueves 21 de abril de 2022

Finlandia ya tiene experiencia vs Rusia

Si analizamos las crónicas de la Segunda Guerra Mundial, nos encontraremos con episodios épicos respecto a las batallas entre finlandeses y rusos, los primeros resistieron la invasión y luego se unieron a los nazis, mostrándose sumamente eficaces en contra de un ejército que los superaba ampliamente. La historia dice que Finlandia sabe cómo defenderse ante un rival que lucía y luce colosal ante ellos.


El conflicto actual en Ucrania está provocando amenazas fuera de esos escenarios, ante la intención de Finlandia y Suecia para integrarse a la Otan, el Kremlin se ha manifestado al respecto, emitiendo una amenaza sobre países que parecían estar alejados.

Cuando se pone un ejemplo de lo que es el desarrollo humano, civilidad y paz, tenemos que mencionar a los suecos, quienes históricamente han estado alejados de los conflictos armados y tienen un nivel de vida envidiable, inclusive para los Estados Unidos y varios países de Europa. Es entonces que resulta extraña la posibilidad de hacer una alianza militar con Occidente, no obstante, parece que todos deben tomar bando para asegurarse de pertenecer a alguno de los dos grandes bloques que dominan al mundo.

En el caso de la otra nación escandinava, nos encontramos con antecedentes bastante importantes que nos hacen dudar acerca de la eficacia del otrora Ejército Rojo frente a un rival que ha sido menospreciado, pero que hada gran pelea.

Recordemos la Guerra de Invierno, iniciada pocos meses después de la invasión a Polonia, un 30 noviembre de 1939, con lo cual los soviéticos se ganaron la expulsión de la Sociedad de Naciones, antecedente de la ONU, castigo que podríamos considerar hasta ridículo, ya que fueron las mismas tropas de la Unión Soviética quienes remataron a unos polacos prácticamente rendidos ante la Wehrmacht. La lucha parecía muy fácil para los socialistas, sin embargo, la férrea resistencia hizo ver mal a unas fuerzas armadas que lucían muy superiores. Los finlandeses apenas contaban con unos 32 tanques y 8 mil voluntarios suecos, ante una fuerza de casi tres cuartos de millón de hombres y 6,500 blindados, diferencia que no se notó en el campo de batalla.

Esta guerra fue un éxito para el régimen Nacional Socialista, ya que el Ejército Rojo y la Sociedad de Naciones sufrieron una humillación, situación que motivó a Adolfo Hitler a lanzar la Operación Barbarroja en contra de unos aparentemente inferiores rusos que no habían podido derrotar ampliamente a unos pocos finlandeses. Este conflicto acabó el 13 de marzo de 1940.

Los escandinavos se aliaron con los nazis y lanzaron la Guerra de Continuación, iniciándose un 25 junio de 1941, coincidiendo con la invasión alemana a la URSS, la cual tuvo un éxito sorprendente al inicio, haciendo pensar a Helsinki en una gran venganza de la guerra de agresión sufrida meses antes, interés principal, más que apoyar al Tercer Reich, situación que fue detectada por Moscú, haciendo que perdiera prioridad el frente. Después de la debacle alemana, se pudo dar el armisticio entre Finlandia y la URSS, considerando el conflicto algo aparte de la Guerra Mundial, con lo que el 19 de septiembre de 1944 se firmaron las capitulaciones con la condición principal de que el gobierno de Helsinki dejara de ser aliado de la Alemania nazi.

En ambos casos notamos que la enorme superioridad rusa no fue efectiva ante un territorio boscoso y nevado, más allá de la debilidad que tenía y tiene el ejército finlandés, es por eso que hoy la amenaza no hace tanto ruido para un país que ha sabido repeler las fuerzas del segundo ejército del mundo. Esto también lo saben los rusos y quizá por eso amenazan con usar armas nucleares en el Báltico, situación que sería lamentable para ellos y para todo el mundo, por lo que significa una conflagración atómica mundial.

Esperemos que pronto se acepten las condiciones para recuperar la paz que Rusia ha dado a Ucrania, recordando que el conflicto tiene una génesis en la expansión de Occidente, por lo cual también tienen cierto grado de responsabilidad la Otan y EU, el problema es que esto afecta a todos y por ello creo que lo mejor que puede darse es un escenario donde Zelenski capitule por el bien de su país y del mundo. Recordemos que en la guerra no hay justicia ni ética, así que solo podemos esperar que no haya más muertos y que las ambiciones de la Otan y de Putin no pongan en peligro al planeta entero.


Dudas o comentarios: 22 25 64 75 05; vicente_leopoldo@hotmail.com; síganme en facebook por mi nombre y en twitter: @vicente_aven.


Si analizamos las crónicas de la Segunda Guerra Mundial, nos encontraremos con episodios épicos respecto a las batallas entre finlandeses y rusos, los primeros resistieron la invasión y luego se unieron a los nazis, mostrándose sumamente eficaces en contra de un ejército que los superaba ampliamente. La historia dice que Finlandia sabe cómo defenderse ante un rival que lucía y luce colosal ante ellos.


El conflicto actual en Ucrania está provocando amenazas fuera de esos escenarios, ante la intención de Finlandia y Suecia para integrarse a la Otan, el Kremlin se ha manifestado al respecto, emitiendo una amenaza sobre países que parecían estar alejados.

Cuando se pone un ejemplo de lo que es el desarrollo humano, civilidad y paz, tenemos que mencionar a los suecos, quienes históricamente han estado alejados de los conflictos armados y tienen un nivel de vida envidiable, inclusive para los Estados Unidos y varios países de Europa. Es entonces que resulta extraña la posibilidad de hacer una alianza militar con Occidente, no obstante, parece que todos deben tomar bando para asegurarse de pertenecer a alguno de los dos grandes bloques que dominan al mundo.

En el caso de la otra nación escandinava, nos encontramos con antecedentes bastante importantes que nos hacen dudar acerca de la eficacia del otrora Ejército Rojo frente a un rival que ha sido menospreciado, pero que hada gran pelea.

Recordemos la Guerra de Invierno, iniciada pocos meses después de la invasión a Polonia, un 30 noviembre de 1939, con lo cual los soviéticos se ganaron la expulsión de la Sociedad de Naciones, antecedente de la ONU, castigo que podríamos considerar hasta ridículo, ya que fueron las mismas tropas de la Unión Soviética quienes remataron a unos polacos prácticamente rendidos ante la Wehrmacht. La lucha parecía muy fácil para los socialistas, sin embargo, la férrea resistencia hizo ver mal a unas fuerzas armadas que lucían muy superiores. Los finlandeses apenas contaban con unos 32 tanques y 8 mil voluntarios suecos, ante una fuerza de casi tres cuartos de millón de hombres y 6,500 blindados, diferencia que no se notó en el campo de batalla.

Esta guerra fue un éxito para el régimen Nacional Socialista, ya que el Ejército Rojo y la Sociedad de Naciones sufrieron una humillación, situación que motivó a Adolfo Hitler a lanzar la Operación Barbarroja en contra de unos aparentemente inferiores rusos que no habían podido derrotar ampliamente a unos pocos finlandeses. Este conflicto acabó el 13 de marzo de 1940.

Los escandinavos se aliaron con los nazis y lanzaron la Guerra de Continuación, iniciándose un 25 junio de 1941, coincidiendo con la invasión alemana a la URSS, la cual tuvo un éxito sorprendente al inicio, haciendo pensar a Helsinki en una gran venganza de la guerra de agresión sufrida meses antes, interés principal, más que apoyar al Tercer Reich, situación que fue detectada por Moscú, haciendo que perdiera prioridad el frente. Después de la debacle alemana, se pudo dar el armisticio entre Finlandia y la URSS, considerando el conflicto algo aparte de la Guerra Mundial, con lo que el 19 de septiembre de 1944 se firmaron las capitulaciones con la condición principal de que el gobierno de Helsinki dejara de ser aliado de la Alemania nazi.

En ambos casos notamos que la enorme superioridad rusa no fue efectiva ante un territorio boscoso y nevado, más allá de la debilidad que tenía y tiene el ejército finlandés, es por eso que hoy la amenaza no hace tanto ruido para un país que ha sabido repeler las fuerzas del segundo ejército del mundo. Esto también lo saben los rusos y quizá por eso amenazan con usar armas nucleares en el Báltico, situación que sería lamentable para ellos y para todo el mundo, por lo que significa una conflagración atómica mundial.

Esperemos que pronto se acepten las condiciones para recuperar la paz que Rusia ha dado a Ucrania, recordando que el conflicto tiene una génesis en la expansión de Occidente, por lo cual también tienen cierto grado de responsabilidad la Otan y EU, el problema es que esto afecta a todos y por ello creo que lo mejor que puede darse es un escenario donde Zelenski capitule por el bien de su país y del mundo. Recordemos que en la guerra no hay justicia ni ética, así que solo podemos esperar que no haya más muertos y que las ambiciones de la Otan y de Putin no pongan en peligro al planeta entero.


Dudas o comentarios: 22 25 64 75 05; vicente_leopoldo@hotmail.com; síganme en facebook por mi nombre y en twitter: @vicente_aven.