/ viernes 1 de marzo de 2019

Florentino Alonso - Alejandro Armenta, en alianza contra Barbosa

Lo que queda del morenovallismo se decantó por el morenista Alejandro Armenta Mier para tratar de retener una parte de los privilegios que obsequia el poder y que muchas veces, o casi todas, derivan en millonarios beneficios económicos.

Esa es la tesis que concluyeron los colaboradores de Luis Miguel Barbosa Huerta después de atar cabos y cruzar información que pudiera dar con las motivaciones que llevaron a la publicación de la carta de la mamá de Martha Erika Alonso Hidalgo, que dirige al presidente Andrés Manuel López Obrador y en la que hace acusaciones directas contra el aspirante a mandatario.

En el búnker de Barbosa se tiene la certeza de que ese texto fue orquestado con un claro fin político-electoral y que tiene como promotores principales al senador con licencia, también aspirante a gobernador, y a un personaje que cobró mucha relevancia en la campaña de 2018, como recaudador de fondos para su hermana: Florentino Alonso Hidalgo.

Según esto, el hermano mayor de Martha Erika ha hecho una alianza con Armenta para apoyarlo en la contienda interna de Morena y recibir después, a cambio de los servicios prestados, jugosos dividendos económicos, similares a los que esperaba conseguir en el malogrado gobierno de la ex secretaria general del PAN.

Una muestra pública de ese acuerdo para tratar de hacerse de la gubernatura es la carta que firma Martha Hidalgo viuda de Alonso, con el fin de descarrilar a Barbosa.

Vayamos a los datos duros.

¿Quién es Florentino Alonso?

El hermano de Martha Erika participó en la campaña de 2018 como financiero.

No fue cercano a Rafael Moreno Valle ni gozó de su simpatía, pero el vínculo fraternal con la candidata le bastó para convertirse en el principal recaudador de fondos externos de la campaña.

Contactó a empresarios de distintos lugares del país para convencerlos de aportar dinero al proyecto político de su hermana, con la promesa de que una vez instalados en Casa Puebla recibirían de vuelta la inversión.

Eso le sirvió para ser una de las piezas fundamentales en el equipo alterno de la candidata a gobernadora, en el que rara vez metía las manos su marido.

Florentino Alonso hizo un buen trabajo pero quedó comprometido hasta el cuello, con decenas de empresarios detrás, esperando la hora para cobrar sus ganancias.

El fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en favor de la ratificación de los resultados del 1 de julio, ocurrido en los primeros minutos del domingo 9 de diciembre, colmó de expectativas al empresario, que ya se veía en condiciones de poder cumplir sus promesas y hacer mucho más.

Lo que vino después es de sobra conocido.

El desplome del helicóptero Agusta en víspera de Navidad sacudió y modificó la geografía política del estado.

Los acontecimientos del 24 de diciembre, sin embargo, no frenaron al hermano mayor de la gobernadora fallecida.

Por el contrario.

A principios de enero jugó con la idea de ser candidato a gobernador en la elección extraordinaria.

Motivado por la crisis económica que se avecinaba sobre él y sus acreedores, buscó alianzas para meterse como precandidato en el PAN.

Fracasó.

Unas semanas después, los integrantes del actual gobierno interino encontraron casos documentados que exhiben sus intentos por tratar de amarrar algunos negocios en el efímero periodo de Jesús Rodríguez Almeida, quien quedó como encargado de despacho a la muerte de su hermana.

Entre los mismos colaboradores de Barbosa se narra una historia que sucedió a las pocas horas de la toma de protesta de Guillermo Pacheco Pulido.

El martes 22 de enero, la Dirección de Adquisiciones de Bienes y Servicios de la Secretaría de Finanzas publicó una licitación para el suministro de comida para los programas alimentarios del DIF, por un monto de 600 millones de pesos.

Enterados de la convocatoria, que el lunes 21 había sido autorizada por Eduardo Tovilla Lara, los nuevos responsables de Finanzas ordenaron frenar la licitación, lo que hicieron el miércoles 23, con la publicación de una fe de erratas.

Tenían que indagar qué había detrás de esa pretendida compra por 600 millones de pesos y la respuesta llegó pronto.

A los pocos días se presentaron en Finanzas los representantes de una empresa de Chihuahua para reclamar por el freno a la licitación.

En el acalorado diálogo con altos funcionarios de esa dependencia, confesaron que iban a ser los beneficiarios del contrato, que habían llegado a ese acuerdo con Florentino Alonso y que le iban a dar 15 por ciento en comisión una vez que se éste se concretara.

También dijeron que habían aportado 20 millones de pesos para la campaña de Martha Erika.

Como usted imaginará, los chihuahuenses fueron echados del inmueble.

Este episodio y otros más, que aseguran conocer con datos verificables, son los que llevaron a los barbosistas a poner a Florentino Alonso y Alejandro Armenta como promotores de la carta publicada este jueves.

Alonso, afirman, quiere recuperar lo que imaginó suyo antes del siniestro en que perdieron la vida Martha Erika, Moreno Valle y tres personas más.


@jorgerdzc

Correo: jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx

Lo que queda del morenovallismo se decantó por el morenista Alejandro Armenta Mier para tratar de retener una parte de los privilegios que obsequia el poder y que muchas veces, o casi todas, derivan en millonarios beneficios económicos.

Esa es la tesis que concluyeron los colaboradores de Luis Miguel Barbosa Huerta después de atar cabos y cruzar información que pudiera dar con las motivaciones que llevaron a la publicación de la carta de la mamá de Martha Erika Alonso Hidalgo, que dirige al presidente Andrés Manuel López Obrador y en la que hace acusaciones directas contra el aspirante a mandatario.

En el búnker de Barbosa se tiene la certeza de que ese texto fue orquestado con un claro fin político-electoral y que tiene como promotores principales al senador con licencia, también aspirante a gobernador, y a un personaje que cobró mucha relevancia en la campaña de 2018, como recaudador de fondos para su hermana: Florentino Alonso Hidalgo.

Según esto, el hermano mayor de Martha Erika ha hecho una alianza con Armenta para apoyarlo en la contienda interna de Morena y recibir después, a cambio de los servicios prestados, jugosos dividendos económicos, similares a los que esperaba conseguir en el malogrado gobierno de la ex secretaria general del PAN.

Una muestra pública de ese acuerdo para tratar de hacerse de la gubernatura es la carta que firma Martha Hidalgo viuda de Alonso, con el fin de descarrilar a Barbosa.

Vayamos a los datos duros.

¿Quién es Florentino Alonso?

El hermano de Martha Erika participó en la campaña de 2018 como financiero.

No fue cercano a Rafael Moreno Valle ni gozó de su simpatía, pero el vínculo fraternal con la candidata le bastó para convertirse en el principal recaudador de fondos externos de la campaña.

Contactó a empresarios de distintos lugares del país para convencerlos de aportar dinero al proyecto político de su hermana, con la promesa de que una vez instalados en Casa Puebla recibirían de vuelta la inversión.

Eso le sirvió para ser una de las piezas fundamentales en el equipo alterno de la candidata a gobernadora, en el que rara vez metía las manos su marido.

Florentino Alonso hizo un buen trabajo pero quedó comprometido hasta el cuello, con decenas de empresarios detrás, esperando la hora para cobrar sus ganancias.

El fallo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación en favor de la ratificación de los resultados del 1 de julio, ocurrido en los primeros minutos del domingo 9 de diciembre, colmó de expectativas al empresario, que ya se veía en condiciones de poder cumplir sus promesas y hacer mucho más.

Lo que vino después es de sobra conocido.

El desplome del helicóptero Agusta en víspera de Navidad sacudió y modificó la geografía política del estado.

Los acontecimientos del 24 de diciembre, sin embargo, no frenaron al hermano mayor de la gobernadora fallecida.

Por el contrario.

A principios de enero jugó con la idea de ser candidato a gobernador en la elección extraordinaria.

Motivado por la crisis económica que se avecinaba sobre él y sus acreedores, buscó alianzas para meterse como precandidato en el PAN.

Fracasó.

Unas semanas después, los integrantes del actual gobierno interino encontraron casos documentados que exhiben sus intentos por tratar de amarrar algunos negocios en el efímero periodo de Jesús Rodríguez Almeida, quien quedó como encargado de despacho a la muerte de su hermana.

Entre los mismos colaboradores de Barbosa se narra una historia que sucedió a las pocas horas de la toma de protesta de Guillermo Pacheco Pulido.

El martes 22 de enero, la Dirección de Adquisiciones de Bienes y Servicios de la Secretaría de Finanzas publicó una licitación para el suministro de comida para los programas alimentarios del DIF, por un monto de 600 millones de pesos.

Enterados de la convocatoria, que el lunes 21 había sido autorizada por Eduardo Tovilla Lara, los nuevos responsables de Finanzas ordenaron frenar la licitación, lo que hicieron el miércoles 23, con la publicación de una fe de erratas.

Tenían que indagar qué había detrás de esa pretendida compra por 600 millones de pesos y la respuesta llegó pronto.

A los pocos días se presentaron en Finanzas los representantes de una empresa de Chihuahua para reclamar por el freno a la licitación.

En el acalorado diálogo con altos funcionarios de esa dependencia, confesaron que iban a ser los beneficiarios del contrato, que habían llegado a ese acuerdo con Florentino Alonso y que le iban a dar 15 por ciento en comisión una vez que se éste se concretara.

También dijeron que habían aportado 20 millones de pesos para la campaña de Martha Erika.

Como usted imaginará, los chihuahuenses fueron echados del inmueble.

Este episodio y otros más, que aseguran conocer con datos verificables, son los que llevaron a los barbosistas a poner a Florentino Alonso y Alejandro Armenta como promotores de la carta publicada este jueves.

Alonso, afirman, quiere recuperar lo que imaginó suyo antes del siniestro en que perdieron la vida Martha Erika, Moreno Valle y tres personas más.


@jorgerdzc

Correo: jrodriguez@elsoldepuebla.com.mx