INICIA LA “ÉLITE” PRIISTA UNA “REBELIÓN EN SU GRANJA”
ANTE LA CRÍTICA situación por la que atraviesa el Partido Revolucionario Institucional en Puebla, enviado en las pasadas elecciones a la tercera posición política, la rebelión que encabezó esta semana un importante grupo de tricolores fue tan inesperada como saludable porque con ella, ¡por fin!, principia un movimiento creciente que, según sus integrantes, no se debe llevar a un plan personal sino político, pues solo así será posible que en un futuro pueda retomar su antigua posición de instituto triunfador. Ahora solo se necesita que sea capaz de replantearse y recomponerse.
A NADIE DEBEN espantar las declaraciones de los firmantes de un desplegado que esta semana dirigieron a la delegada del CEN del PRI, a la militancia y a la opinión pública, porque lo que en él se describe y se solicita en algunos puntos no es algo nuevo o descabellado; en otros, ¡ojo!, descalifican posibles alianzas anti-natura para un gobierno de coalición que lastimaría a los priistas y al propio instituto, el cual, aseguran, se encuentra secuestrado.
LA POSTURA CRÍTICA DE este grupo, del cual algunos miembros acusan haber sido amenazados por interpósita persona con cárcel de parte de Eukid Castañón (uno de los voceros y gente de mayor confianza del exgobernador Rafael Moreno Valle y que pertenece al PAN y no al PRI) por participar en esta revuelta, ha causado ámpula entre los prianistas embozados, entre los traidores al tricolor, muchos de ellos cooptados por el exejecutivo, y muchos más que nada tendrían que ver con esta revuelta interna . ¿Por qué? ¡Saque usted sus conclusiones!
PARECÍA IMPOSIBLE que se hicieran planteamientos tan puntuales y menos que estos vinieran de tricolores que tienen o han tenido cierto capital político y un peso específico en el PRI (como los expresidentes, exsenadores, exdiputados, etc.) y que forman parte de la “élite”. Siempre han “saltado” algunos personajes aislados que lo han hecho antes o después de procesos electorales, pero que han sido callados de inmediato con posiciones menores o promesas. Pero ahora es de tal tamaño este grupo, al que por cierto diariamente se le unen nuevos priistas, que debería ser tomado muy en serio por el despreocupado Comité Ejecutivo Nacional del PRI antes de que haya una ruptura mayor y, por lo tanto, una deserción que deje peor mal parado a este partido.
NO ES REPARTIENDO CULPAS Y DESCALIFICACIONES COMO SE SOLUCIONARÁ EL PROBLEMA
EN CUANTO APARECIÓ el multicitado desplegado, vinieron comentarios que señalaron al exgobernador Mario Marín Torres como uno de los instigadores, lo cual fue negado por los firmantes, especificando que ellos también piensan y analizan y, además, quieren al partido que todo les dio y por el que sienten obligación de luchar. ¿Será? Sin embargo, aceptaron que están incluidos algunos compañeros que trabajaron con Marín, pero que aun siendo sus amigos eso no los descalifica para participar “porque no son sus personeros”.
EL GRUPO inconforme es tan fuerte como el que gobierna actualmente al CDE del PRI, por lo que aseguran que son objeto de descalificaciones por parte de las personas que tratan de acallar sus voces. De ser ignorados en sus planteamientos, expresaron, este podría empezar a poner sobre la mesa acuerdos tomados en lo oscurito durante los últimos años y algunos temas más, haciéndolos públicos si es necesario, pues están decididos a llegar a las últimas consecuencias.
SI MARIO MARÍN no está detrás de esta rebelión, entonces ¿quién? fue una pregunta obligada, a lo que varios de los firmantes consultados respondieron: “nosotros, los firmantes con nombres y apellidos y por ello damos la cara”. Al mismo tiempo, aseguraron que no es repartiendo culpas, descalificándolos o lanzando “tsunamis de lodo” como se recuperará al PRI, sino eligiendo a los directivos más idóneos, utilizando los métodos ya existentes. Para ellos el más deseable es el de la consulta a la base y ¡ojo! dejando participar a jóvenes que lleguen a refrescarlo. Los firmantes y otros más, aseguran, no están detrás de “ningún huesito”, pues no es tiempo de elecciones ni tampoco el PRI está en su mejor momento.
NUNCA UN GOBIERNO DE COALICIÓN
UN TEMA MEDULAR del documento es la posible participación de algunos priistas en un gobierno de coalición con el PAN. Sobre él opinan que sería una aberración, puesto que no solo ambos (PRI-PAN) han sido adversarios políticos históricos, sino que pertenecen a dos corrientes ideológicas opuestas. Se habla de la posibilidad de aceptar sin que se tome en cuenta que para ello debe pasar antes por la aprobación del Congreso del Estado, que deberá analizar principios, programas de acción y toda una serie de documentos. Así que no es tan simple.
SI ALGÚN PRIISTA es invitado por el ganador, ya sea panista o morenista, para que se integre a su gobierno, puede aceptar pero lo haría a título personal y de ninguna manera a nombre del tricolor y eso no podría calificarse como una coalición, sino que sería parte de un gobierno plural. Así que no hay que confundir los términos.
¿POR QUÉ NO UNA coalición con el gobierno del PAN en caso de que este gane las elecciones? Porque fuera de lo legal nadie puede negar ni olvidar las humillaciones cometidas por el neopanismo, encabezado por Rafael Moreno Valle, a miles de priistas, la compra de conciencias, las persecuciones, los presos políticos, las acciones antidemocráticas y una larga lista de arbitrariedades ya harto conocidas.
DE ACEPTARSE participar en un gobierno de coalición no solo se disminuiría aún más el ya de por sí mermado número de priistas de corazón; aquellos que votan por estar de acuerdo con sus ideales y no por perseguir ninguna posición. Así, algunos ganarían “un hueso”, pero se daría la percepción de que el PRI claudicó y sin duda aumentaría el rechazo hacia un partido al que considerarían “agachón”. Por todos los antecedentes mencionados, con ello firmaría, por lo menos en Puebla, casi casi su acta de defunción. Y HASTA LA PRÓXIMA
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