/ domingo 5 de noviembre de 2023

La brecha de información en la sobreinformación

Como todos sabemos el mundo vive un momento muy lamentable con el conflicto que se ha endurecido en Medio Oriente, hechos sin precedentes y una guerra que ha dejado miles de muertos se ha intensificado en los últimos días en un territorio que tristemente es presa permanente de la violencia. Además de reprochar, la poco contundente postura que ha tomado el Gobierno Federal ante estos tristes hechos, esta guerra también debe abrirnos los ojos para destacar la importancia de las redes sociales al momento de informar o desinformar.

Todos hemos visto en redes sociales circular cantidad de videos y de mensajes mismos que muchas veces han sido tomados de hechos tristemente reales, pero bajo condiciones y tiempos diferentes a los que pretenden informar. En este momento en el que todos tenemos herramientas para informar y desinformar debemos ser muy conscientes y responsables tanto de la información que consumimos y aún más de la información que compartimos.

Así que hoy nos vemos amenazados por la gran cantidad de información que circula, misma que en primera instancia no debería ser negativa, pero entre tanta información es muy fácil poder incrustar información falsa o tendenciosa y el caso particular de la guerra en Palestina lo demuestra con mucha claridad, pero todos los días y con muchos otros temas nos vemos expuestos a información falsa. Entre tanta información es difícil distinguir lo verdadero y lo falso, incluso muchos periodistas profesionales con prestigio internacional y lideres de opinión han sido víctimas de estas falsas noticias y han caído en pifias generado más desinformación.

El objetivo de esta reflexión no es ni de cerca pretender limitar la libertad de expresión, sino es garantizar el derecho del que también somos acreedores a información veraz y objetiva, los garantes de dicho derecho debemos ser nosotros mismos, cuidando y analizando la información que compartimos.

Para cerrar esta entrega, porque mi corazón así me lo demanda, quiero enviar mi amor y mi mayor anhelo de paz, compasión y tolerancia para todas las víctimas inocentes de esta guerra.

Como todos sabemos el mundo vive un momento muy lamentable con el conflicto que se ha endurecido en Medio Oriente, hechos sin precedentes y una guerra que ha dejado miles de muertos se ha intensificado en los últimos días en un territorio que tristemente es presa permanente de la violencia. Además de reprochar, la poco contundente postura que ha tomado el Gobierno Federal ante estos tristes hechos, esta guerra también debe abrirnos los ojos para destacar la importancia de las redes sociales al momento de informar o desinformar.

Todos hemos visto en redes sociales circular cantidad de videos y de mensajes mismos que muchas veces han sido tomados de hechos tristemente reales, pero bajo condiciones y tiempos diferentes a los que pretenden informar. En este momento en el que todos tenemos herramientas para informar y desinformar debemos ser muy conscientes y responsables tanto de la información que consumimos y aún más de la información que compartimos.

Así que hoy nos vemos amenazados por la gran cantidad de información que circula, misma que en primera instancia no debería ser negativa, pero entre tanta información es muy fácil poder incrustar información falsa o tendenciosa y el caso particular de la guerra en Palestina lo demuestra con mucha claridad, pero todos los días y con muchos otros temas nos vemos expuestos a información falsa. Entre tanta información es difícil distinguir lo verdadero y lo falso, incluso muchos periodistas profesionales con prestigio internacional y lideres de opinión han sido víctimas de estas falsas noticias y han caído en pifias generado más desinformación.

El objetivo de esta reflexión no es ni de cerca pretender limitar la libertad de expresión, sino es garantizar el derecho del que también somos acreedores a información veraz y objetiva, los garantes de dicho derecho debemos ser nosotros mismos, cuidando y analizando la información que compartimos.

Para cerrar esta entrega, porque mi corazón así me lo demanda, quiero enviar mi amor y mi mayor anhelo de paz, compasión y tolerancia para todas las víctimas inocentes de esta guerra.