/ domingo 20 de marzo de 2022

La Ciencia y nuestra Democracia están de luto

Silvia Gómez-Tagle Lemaistre (1944-2022)


En un departamento acogedor, rodeado de una luz tenue, un buen día me recibió Silvia Gómez-Tagle gracias a las gestiones de Rosa Ynés Alacio quien publicó en 2011 una reseña de la magnífica obra editada por la Dra. Silvia, “Alternativas para la democracia en América Latina”, un trabajo colaborativo que ofrece una metodología única. Siempre con una mirada inteligente, vibrante, comuna respuesta pertinente y argumentada en temas de la democracia, y del sindicalismo mexicano que fue su primera investigación como antropóloga, me dio la oportunidad de conocerla en ese lado humano de su ser que no tenía fronteras. Ahora descansa en paz y deja una real pérdida para la ciencia social de nuestro país.


Profesora-Investigadora del Centro de Estudios Sociológicos del Colegio de México, Doctora en Antropología, por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), fue Directora de la Revista Nueva Antropología que “en la década de los 80 del siglo pasado…surgió como un espacio de reflexión, y a sugerencia de Guillermo Bonfil vio la luz como una asociación civil, para que no dependiera de instancias y vaivenes burocráticos. La publicación de la revista es apoyada por el INAH, El Colegio de México, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS)”, a decir en el aniversario 41 (2016).


Las transiciones democráticas, conflictos electorales, reflexiones en torno a los retos y desafíos de la democracia, vieron la luz en publicaciones de los libros: La Geografía del Poder y las Elecciones en México; La transición inconclusa: treinta años de elecciones en México; Insurgencia y democracia en los sindicatos electricistas; Democratización y globalización en América Latina; Alternativas para la democracia en América Latina; La confianza y la participación de la juventud en la democracia; La cultura política de los jóvenes en la Ciudad de México 2018; Informe de la encuesta de Cultura Política de los Jóvenes en el Estado de Guanajuato 2018; Estudios sobre la cultura política de los Jóvenes en el Estado de México; además de artículos y capítulos de libros, lo que sustentó la categoría de Investigadora Nacional del SIN nivel III.


La Asociación Mexicana de Ciencias Políticas la nombró Asociada Vitalicia y le rindió un homenaje “A la mejor trayectoria académica”, pero más allá de estos reconocimientos cabe resaltar que fue una mujer comprometida con la transición de nuestra democracia, activamente participó impulsando el debate congruente desde la izquierda, incluso en el movimiento del 68.


El legado que deja a la ciencia es indiscutible: disciplina, método, honestidad académica. El legado que deja a la Democracia mexicana es el impulso desde su actividad política, participación que abonó a la transición que ahora gozamos, con un árbitro electoral independiente del poder ejecutivo. Además, hay otro legado más, a los jóvenes, a quienes les dedicó sus más recientes investigaciones sobre la participación y la cultura política. Ella tenía una condición física que le impedía caminar, adecuó su espacio para vivir independiente, vital, activa, eso es lo que deja: no hay impedimento físico que limite el trabajo y la participación. Un valor para vivir. Descanse en Paz una mujer maravillosa.


*Politóloga, profesora-investigadora. Miembro Fundadora de la AMECIP y secretaria de Membresías (2022-2024) Mail: margarita_arguelles@hotmail.com


Silvia Gómez-Tagle Lemaistre (1944-2022)


En un departamento acogedor, rodeado de una luz tenue, un buen día me recibió Silvia Gómez-Tagle gracias a las gestiones de Rosa Ynés Alacio quien publicó en 2011 una reseña de la magnífica obra editada por la Dra. Silvia, “Alternativas para la democracia en América Latina”, un trabajo colaborativo que ofrece una metodología única. Siempre con una mirada inteligente, vibrante, comuna respuesta pertinente y argumentada en temas de la democracia, y del sindicalismo mexicano que fue su primera investigación como antropóloga, me dio la oportunidad de conocerla en ese lado humano de su ser que no tenía fronteras. Ahora descansa en paz y deja una real pérdida para la ciencia social de nuestro país.


Profesora-Investigadora del Centro de Estudios Sociológicos del Colegio de México, Doctora en Antropología, por el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS), fue Directora de la Revista Nueva Antropología que “en la década de los 80 del siglo pasado…surgió como un espacio de reflexión, y a sugerencia de Guillermo Bonfil vio la luz como una asociación civil, para que no dependiera de instancias y vaivenes burocráticos. La publicación de la revista es apoyada por el INAH, El Colegio de México, el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social (CIESAS)”, a decir en el aniversario 41 (2016).


Las transiciones democráticas, conflictos electorales, reflexiones en torno a los retos y desafíos de la democracia, vieron la luz en publicaciones de los libros: La Geografía del Poder y las Elecciones en México; La transición inconclusa: treinta años de elecciones en México; Insurgencia y democracia en los sindicatos electricistas; Democratización y globalización en América Latina; Alternativas para la democracia en América Latina; La confianza y la participación de la juventud en la democracia; La cultura política de los jóvenes en la Ciudad de México 2018; Informe de la encuesta de Cultura Política de los Jóvenes en el Estado de Guanajuato 2018; Estudios sobre la cultura política de los Jóvenes en el Estado de México; además de artículos y capítulos de libros, lo que sustentó la categoría de Investigadora Nacional del SIN nivel III.


La Asociación Mexicana de Ciencias Políticas la nombró Asociada Vitalicia y le rindió un homenaje “A la mejor trayectoria académica”, pero más allá de estos reconocimientos cabe resaltar que fue una mujer comprometida con la transición de nuestra democracia, activamente participó impulsando el debate congruente desde la izquierda, incluso en el movimiento del 68.


El legado que deja a la ciencia es indiscutible: disciplina, método, honestidad académica. El legado que deja a la Democracia mexicana es el impulso desde su actividad política, participación que abonó a la transición que ahora gozamos, con un árbitro electoral independiente del poder ejecutivo. Además, hay otro legado más, a los jóvenes, a quienes les dedicó sus más recientes investigaciones sobre la participación y la cultura política. Ella tenía una condición física que le impedía caminar, adecuó su espacio para vivir independiente, vital, activa, eso es lo que deja: no hay impedimento físico que limite el trabajo y la participación. Un valor para vivir. Descanse en Paz una mujer maravillosa.


*Politóloga, profesora-investigadora. Miembro Fundadora de la AMECIP y secretaria de Membresías (2022-2024) Mail: margarita_arguelles@hotmail.com