/ sábado 17 de abril de 2021

La experimentación en animales es ética y necesaria

Muchos se conmovieron por la imagen del conejo Ralph, un muñeco de peluche sumamente victimizado y que ha tendido una gran audiencia, sin embargo, esto no aporta a la verdad como tal y solo enciende más lo ánimos de quienes han tomado la pseudo defensa animal como algo enajenante.

Hace unos días se celebró la representación del viacrusis en diversas partes del mundo, con la típica representación de un Jesús torturado y humillado, creando así el concepto de culpa eterna y dando justificación a los grandes crímenes y matanzas de la Iglesia Católica.

Mostrar a alguien como un mártir es sumamente peligroso, ya que este se puede convertir en un asesino o un dictador, recordemos que Adolfo Hitler y Hugo Chávez estuvieron en la cárcel, salieron y gozaron una gran popularidad que los llevó al poder y después se aferraron al poder totalmente.

Ahora bien, sabemos que en los últimos años la defensa animal se ha vuelto casi una religión para millones, pero también hemos visto que esto se ha convertido en una mera simulación para ocultar otros problemas más graves o tratar de compensar conflictos personales. Para muestra tenemos a la alcaldesa Claudia Rivera, quien con su propuesta de prohibir la corrida de toros quiere distraer la atención de su manifiesta mala administración. Igualmente hay muchas personas que se muestran amorosas con las mascotas, pero no tienen buena actitud hacia los demás.

Ahora bien, recordemos que, gracias a la experimentación animal, el ser humano ha podido utilizar un sinfín de productos que son del uso diario, cosas tan simples como un champú o maquillaje, o sustancias que resultan vitales, como los medicamentos.

Decía Carlos Fuentes en “El toro y la virgen”, que la fiesta brava nos recuerda que el hombre debe asesinar un poco a la naturaleza para poder sobrevivir, esto no significa que el entorno sea destruido por un egoísmo, sino que debe haber un desarrollo sustentable, pero es inevitable que haya seres sacrificados, no asesinados, porque el concepto es muy diferente, el sacrificio implica una causa legítima. Por ejemplo, la alimentación en el caso de los cerdos y también los conejos, cuya carne es magra y muy saludable.

En cuanto a la ética, debemos recordar que esta depende de un tiempo y un espacio, además de que se orienta al concepto de lo bueno para una generalidad, y precisamente los test científicos han dado buenos resultados que se reflejan en beneficios para millones de adultos y niños.

Desgraciadamente la doble moral es el común denominador de nuestros tiempos, por ejemplo, hay quien se muestra compasivo con los animales y en contra de su uso en laboratorio, pero esa misma persona no concibe su vida sin su iphone, el cual fue posiblemente fabricado mediante la explotación laboral; usa maquillaje y hasta salvó su vida con productos que fueron probados en ratas o conejos. Entonces resulta un absurdo “desgarrarse las vestiduras” por el video mencionado que solo exalta la moda de victimización.

También resultan sumamente equivocadas las opiniones que señalan que se debe experimentar en delincuentes y no en animales, eso es jurídicamente imposible y nos retrasaría siglos en la defensa de los derechos humanos.

Hay quien puede afirmar que el ser humano es la peor plaga del planeta; convertirse en vegano; estar en contra de la experimentación animal; entre otras cosas, es más, tiene todo el derecho a pensar eso, pero debe actuar de forma coherente y no solo buscar la aprobación en sus redes sociales, eso es hipocresía y no contribuye a la salvación de la flora y fauna del planeta. Quien este en contra de las conductas mencionadas, se puede ir a uno de los muchos rincones incivilizados del planeta, a vivir sin los elementos tecnológicos actuales, pero nunca he visto que uno de los llamados animalistas haga eso.

Recordemos que algunas de las invenciones técnicas pueden tener una historia de sangre, como las surgidas en la guerra, pero son usadas a diario porque, dentro de ese pasado negativo, han dado múltiples beneficios.

Los animales usados en laboratorios deben ser objeto de todo el respeto, son sacrificados por un motivo científico; son una especie de héroes, así como las personas que ofrendaron su vida por ideales, por lo que esas criaturas deben ser reconocidas en esa dimensión y aceptar que su uso en experimentos es necesario, ya que constituye una base fundamental de un avance científico que busca el mejoramiento de las condiciones para los humanos, aunque estos cada vez piensen menos y ataquen acciones que les permiten existir, aun para renegar de sí mismos. Hasta la próxima.

Dudas o comentarios: 22 25 64 75 05; vicente_leopoldo@hotmail.com; síganme en facebook por mi nombre y en twitter: @vicente_aven.

Muchos se conmovieron por la imagen del conejo Ralph, un muñeco de peluche sumamente victimizado y que ha tendido una gran audiencia, sin embargo, esto no aporta a la verdad como tal y solo enciende más lo ánimos de quienes han tomado la pseudo defensa animal como algo enajenante.

Hace unos días se celebró la representación del viacrusis en diversas partes del mundo, con la típica representación de un Jesús torturado y humillado, creando así el concepto de culpa eterna y dando justificación a los grandes crímenes y matanzas de la Iglesia Católica.

Mostrar a alguien como un mártir es sumamente peligroso, ya que este se puede convertir en un asesino o un dictador, recordemos que Adolfo Hitler y Hugo Chávez estuvieron en la cárcel, salieron y gozaron una gran popularidad que los llevó al poder y después se aferraron al poder totalmente.

Ahora bien, sabemos que en los últimos años la defensa animal se ha vuelto casi una religión para millones, pero también hemos visto que esto se ha convertido en una mera simulación para ocultar otros problemas más graves o tratar de compensar conflictos personales. Para muestra tenemos a la alcaldesa Claudia Rivera, quien con su propuesta de prohibir la corrida de toros quiere distraer la atención de su manifiesta mala administración. Igualmente hay muchas personas que se muestran amorosas con las mascotas, pero no tienen buena actitud hacia los demás.

Ahora bien, recordemos que, gracias a la experimentación animal, el ser humano ha podido utilizar un sinfín de productos que son del uso diario, cosas tan simples como un champú o maquillaje, o sustancias que resultan vitales, como los medicamentos.

Decía Carlos Fuentes en “El toro y la virgen”, que la fiesta brava nos recuerda que el hombre debe asesinar un poco a la naturaleza para poder sobrevivir, esto no significa que el entorno sea destruido por un egoísmo, sino que debe haber un desarrollo sustentable, pero es inevitable que haya seres sacrificados, no asesinados, porque el concepto es muy diferente, el sacrificio implica una causa legítima. Por ejemplo, la alimentación en el caso de los cerdos y también los conejos, cuya carne es magra y muy saludable.

En cuanto a la ética, debemos recordar que esta depende de un tiempo y un espacio, además de que se orienta al concepto de lo bueno para una generalidad, y precisamente los test científicos han dado buenos resultados que se reflejan en beneficios para millones de adultos y niños.

Desgraciadamente la doble moral es el común denominador de nuestros tiempos, por ejemplo, hay quien se muestra compasivo con los animales y en contra de su uso en laboratorio, pero esa misma persona no concibe su vida sin su iphone, el cual fue posiblemente fabricado mediante la explotación laboral; usa maquillaje y hasta salvó su vida con productos que fueron probados en ratas o conejos. Entonces resulta un absurdo “desgarrarse las vestiduras” por el video mencionado que solo exalta la moda de victimización.

También resultan sumamente equivocadas las opiniones que señalan que se debe experimentar en delincuentes y no en animales, eso es jurídicamente imposible y nos retrasaría siglos en la defensa de los derechos humanos.

Hay quien puede afirmar que el ser humano es la peor plaga del planeta; convertirse en vegano; estar en contra de la experimentación animal; entre otras cosas, es más, tiene todo el derecho a pensar eso, pero debe actuar de forma coherente y no solo buscar la aprobación en sus redes sociales, eso es hipocresía y no contribuye a la salvación de la flora y fauna del planeta. Quien este en contra de las conductas mencionadas, se puede ir a uno de los muchos rincones incivilizados del planeta, a vivir sin los elementos tecnológicos actuales, pero nunca he visto que uno de los llamados animalistas haga eso.

Recordemos que algunas de las invenciones técnicas pueden tener una historia de sangre, como las surgidas en la guerra, pero son usadas a diario porque, dentro de ese pasado negativo, han dado múltiples beneficios.

Los animales usados en laboratorios deben ser objeto de todo el respeto, son sacrificados por un motivo científico; son una especie de héroes, así como las personas que ofrendaron su vida por ideales, por lo que esas criaturas deben ser reconocidas en esa dimensión y aceptar que su uso en experimentos es necesario, ya que constituye una base fundamental de un avance científico que busca el mejoramiento de las condiciones para los humanos, aunque estos cada vez piensen menos y ataquen acciones que les permiten existir, aun para renegar de sí mismos. Hasta la próxima.

Dudas o comentarios: 22 25 64 75 05; vicente_leopoldo@hotmail.com; síganme en facebook por mi nombre y en twitter: @vicente_aven.