/ domingo 19 de noviembre de 2023

La investigación y los cisnes negros

“Las experiencias de investigación en las Ciencias Sociales” dejó conclusiones imperdibles para los estudiantes y profesores de la Ciencias Políticas en particular y para las ciencias sociales en general, voz de Gabriela I. O´Donnell ahora hay muchos medios que facilitan la labor investigativa, por ejemplo: la grabadora en el celular, la cámara para levantar fotografías, las computadoras portátiles, impresoras y, lo impensable: internet para buscar información previa, contextos históricos. Ya no decir más de la Inteligencia Artificial que está a un tris.

Durante la conferencia de clausura del II Coloquio de Investigación: debates emergentes, que se celebró el 14 y 15 de noviembre pasado en la Biblioteca Dieter Nohlen del Instituto de Ciencias de Gobierno y Desarrollo Estratégico (ICGDE-BUAP), la doctora de la Universidad Nacional de San Martín, Argentina, hizo remembranzas relacionadas con la investigación de su esposo Guillermo O´Donnell (1936-2011). El destacado politólogo dejó la abogacía para dedicarse a la investigación en Ciencia Política, renunció a una exitosa labor porque encontró en la investigación una forma de expresar lo que puede mejorarse en políticas públicas y en gobiernos, siempre en entornos democráticos, lejos del autoritarismo.

Esta experiencia nos propone una máxima: lo único que importa para investigar es el interés, la pasión para hacerlo, independientemente de la profesión que se haya elegido, si bien los temas elegidos requieren ser bien delimitados y abordados desde perspectivas teóricas claras, por eso hay que leer y entender a sus autores.

Un tema que no expuso Gabriela O´Donnell, pero que comentamos, fue la teoría del cisne negro que desarrolló Nassim Taleb, un filósofo investigador libanés naturalizado estadounidense. ¿Cuál es la anécdota del cisne negro? Los europeos pensaban que sólo existían cisnes blancos porque en su continente sólo existía esa especie en ese color. Después de un viaje a Australia, descubrieron que también había cisnes negros; el hallazgo cambió por completo su pensamiento.

La metáfora del cisne negro en la investigación describe un suceso inesperado de gran impacto socioeconómico y que, una vez pasado el hecho, se racionaliza retrospectivamente dando impresión de que se esperaba que ocurriera, tales como la gripe española, los atentados del 11 de septiembre de 2001, etc. Esta teoría se refiere al azar y la incertidumbre que nos deja impávidos, como nos dejó el Covid-19 o como nos está dejando la Inteligencia Artificial, o el legado que deja la muerte del magistrade Jesús Ociel Baena y su novio. En estos escenarios es imprescindible investigar, reflexionar, aportar soluciones, la idea del “conocimiento como práctica”, como el mismo Taleb propone en su teoría “extraer el conocimiento de la experiencia, pero también cuestionar esa experiencia”.

Así entonces, se vale cuestionar si el sistema de partidos está rebasado en México, si el cumplimiento de la Paridad en Todo es sólo un número y no tiene sentido en las prácticas diarias, o si la impunidad se puede inhibir desde el Sistema Nacional Anticorrupción. Planear la investigación y si sale al paso la serendipity (casualidad), es ganancia, si bien la investigación en ciencia política es compleja y de trabajo individual.

Después de compartir comentarios a los protocolos y avances de investigación que expusieron estudiantes de Ciencias Políticas de la Buap, y clausurar los trabajos del Coloquio, Gabriela O´Donnel nos deja la tarea y el compromiso de seguir impulsando la investigación en ciencias sociales, porque es necesario seguir mejorando nuestra vida y la de los que nos rodean. Gracias por su presencia.


*Politóloga, profesora-investigadora. Miembro Fundadora de la AMECIP y secretaria de Membresías. Mail: margarita_arguelles@hotmail.com

“Las experiencias de investigación en las Ciencias Sociales” dejó conclusiones imperdibles para los estudiantes y profesores de la Ciencias Políticas en particular y para las ciencias sociales en general, voz de Gabriela I. O´Donnell ahora hay muchos medios que facilitan la labor investigativa, por ejemplo: la grabadora en el celular, la cámara para levantar fotografías, las computadoras portátiles, impresoras y, lo impensable: internet para buscar información previa, contextos históricos. Ya no decir más de la Inteligencia Artificial que está a un tris.

Durante la conferencia de clausura del II Coloquio de Investigación: debates emergentes, que se celebró el 14 y 15 de noviembre pasado en la Biblioteca Dieter Nohlen del Instituto de Ciencias de Gobierno y Desarrollo Estratégico (ICGDE-BUAP), la doctora de la Universidad Nacional de San Martín, Argentina, hizo remembranzas relacionadas con la investigación de su esposo Guillermo O´Donnell (1936-2011). El destacado politólogo dejó la abogacía para dedicarse a la investigación en Ciencia Política, renunció a una exitosa labor porque encontró en la investigación una forma de expresar lo que puede mejorarse en políticas públicas y en gobiernos, siempre en entornos democráticos, lejos del autoritarismo.

Esta experiencia nos propone una máxima: lo único que importa para investigar es el interés, la pasión para hacerlo, independientemente de la profesión que se haya elegido, si bien los temas elegidos requieren ser bien delimitados y abordados desde perspectivas teóricas claras, por eso hay que leer y entender a sus autores.

Un tema que no expuso Gabriela O´Donnell, pero que comentamos, fue la teoría del cisne negro que desarrolló Nassim Taleb, un filósofo investigador libanés naturalizado estadounidense. ¿Cuál es la anécdota del cisne negro? Los europeos pensaban que sólo existían cisnes blancos porque en su continente sólo existía esa especie en ese color. Después de un viaje a Australia, descubrieron que también había cisnes negros; el hallazgo cambió por completo su pensamiento.

La metáfora del cisne negro en la investigación describe un suceso inesperado de gran impacto socioeconómico y que, una vez pasado el hecho, se racionaliza retrospectivamente dando impresión de que se esperaba que ocurriera, tales como la gripe española, los atentados del 11 de septiembre de 2001, etc. Esta teoría se refiere al azar y la incertidumbre que nos deja impávidos, como nos dejó el Covid-19 o como nos está dejando la Inteligencia Artificial, o el legado que deja la muerte del magistrade Jesús Ociel Baena y su novio. En estos escenarios es imprescindible investigar, reflexionar, aportar soluciones, la idea del “conocimiento como práctica”, como el mismo Taleb propone en su teoría “extraer el conocimiento de la experiencia, pero también cuestionar esa experiencia”.

Así entonces, se vale cuestionar si el sistema de partidos está rebasado en México, si el cumplimiento de la Paridad en Todo es sólo un número y no tiene sentido en las prácticas diarias, o si la impunidad se puede inhibir desde el Sistema Nacional Anticorrupción. Planear la investigación y si sale al paso la serendipity (casualidad), es ganancia, si bien la investigación en ciencia política es compleja y de trabajo individual.

Después de compartir comentarios a los protocolos y avances de investigación que expusieron estudiantes de Ciencias Políticas de la Buap, y clausurar los trabajos del Coloquio, Gabriela O´Donnel nos deja la tarea y el compromiso de seguir impulsando la investigación en ciencias sociales, porque es necesario seguir mejorando nuestra vida y la de los que nos rodean. Gracias por su presencia.


*Politóloga, profesora-investigadora. Miembro Fundadora de la AMECIP y secretaria de Membresías. Mail: margarita_arguelles@hotmail.com