El ciudadano común, sin inclinarse a favor de ningún partido político y que solamente quiere vivir en un clima de tranquilidad y con servicios públicos de calidad, exige resultados de sus autoridades especialmente en materia de seguridad pública.
Sin embargo, tal parece que esto poco importa a la presidenta municipal de San Andrés Cholula, Karina Pérez Popoca, quien lejos de ofrecer compromiso por combatir la delincuencia busca excusas, en otras palabras, pretextos.
Así lo manifestó el pasado martes en declaraciones a la prensa al acusar, sin pruebas, la existencia de una campaña negra en contra de los gobiernos municipales que emanaron del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).
Desde su perspectiva, “alguien” busca hacer quedar mal ante el colectivo general a las autoridades que provienen de esta fuerza política, no del PRI ni del PAN o el PRD, solamente de Morena.
Y todo lo enmarca ante la posibilidad de que pueda repetirse la elección a la gubernatura.
Para sustentar sus señalamientos ante la prensa dijo que tuvo un intercambio de puntos de vista con empresarios que le han dicho que los acontecimientos recientes, como asaltos a mano armada a los automovilistas en la Vía Atlixcáyotl, tienen como finalidad desacreditar el trabajo municipal.
Si la alcaldesa considera que existe una campaña de desprestigio en contra, entonces su equipo de inteligencia policial ya tiene marcado el plan de trabajo para lanzar una contraofensiva deteniendo a los grupos delictivos y así revertir la “campaña negra”.
La incompetencia no puede esconderse y más en materia de seguridad pública, una de las exigencias más importantes de la población que pide vivir en paz.
Karina Pérez debe entender que su labor debe concentrarse en gobernar bien para el municipio y dejar de lado los temas políticos.
La elección de julio pasado quedó en el pasado y en el caso del resultado a la gubernatura, impugnado por Morena, debe seguir su curso natural de resolución a cargo del TEPJF y no debe ser el pretexto para percibir que algo raro existe contra autoridades municipales emanadas del partido de Andrés Manuel López Obrador.
El ciudadano no quiere pretextos, quiere resultados. Y pronto.
Si la presidenta municipal de San Andrés Cholula tiene pruebas o datos que afirmen la existencia de una campaña negra para dejar mal parados a los ayuntamientos morenistas, incluidos Puebla, San Pedro Cholula, Cuautlancingo o Coronango, sería bueno que lo demostrara, pero con pruebas.
¿Acaso es pecado o confabulación en su contra dar a conocer la inseguridad, como asaltos a mano armada o el asesinato a plena luz del día de un presunto narcomenudista en el área de food truck ubicada a un costado de la preparatoria de la Ibero?
¿No sería mejor pedir a su secretario de Seguridad Pública, Arturo Saucedo, capacitarse debidamente e implementar un plan de trabajo urgente y coordinarse debidamente con el gobierno estatal?
Lo malo es que esa visión “corta” de este tipo de autoridades empieza a compartirse con otros alcaldes, como el caso de Luis Alberto Arriaga, el camaleónico político y edil de San Pedro Cholula, quien también secundó parte de las declaraciones de Karina Pérez.
A su parecer, es “extraño y raro” que exista una delincuencia muy organizada y diferente a la habitual, que golpea a los municipios de la zona metropolitana.
Así el nivel de las autoridades de la llamada “cuarta transformación”.
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