/ sábado 14 de diciembre de 2019

Le llegó su hora al Poder Judicial Estatal. Fin al influyentismo. Ahora “a limpiar la casa”

Como un balde de agua fría cayó entre jueces y magistrados, (especialmente éstos últimos) el discurso pronunciado por el gobernador del Estado Luis Miguel Barbosa Huerta, durante el informe de actividades del presidente del Tribunal Superior de Justicia estatal Héctor Sánchez porque, deja entrever una importante transformación, que por el momento podría sintetizarse en el fin de viejos vicios y a “limpiar la casa”. Asimismo la aplicación de justicia y sanciones a corruptos y a quienes no actúen conforme a la ley; el fin del influyentismo y la eliminación de una larga permanencia dentro del puesto. Se acabarán los “magistrados de por vida”.

Si bien dichos funcionarios escucharon con seriedad dichos pronunciamientos, por lo menos 15 de ellos considerados magistrados “moreno vallistas y galistas” que llegaron en diversas épocas de las pasada administración, pusieron una cara de espanto, porque saben que sus días como tales en el TSJ podrían estar contados, al haber llegado impuestos por los ex gobernadores del PAN Rafael Moreno valle y Antonio Gali. Su llegada obedeció a la estrategia de sus padrinos, de ser los encargados de implantar medidas y amarres para un perfecto control de este poder. Con ello también para que no fuera fácil ni su destitución, ni una justa aplicación de la justicia pues todo se hacía o se resolvía, (como sigue sucediendo) “a modo”. Así el TSJ se llenó de magistrados y jueces improvisados, sin ninguna experiencia y destinados sólo para obedecer.

Quienes llegaron en los últimos 8 años aún permanecen incrustados en este poder, donde por cierto no han estado a la altura de su investidura, pues su trabajo deja mucho que desear. De ahí las constantes denuncias. De acuerdo a expertos, éstos personajes “amarraron” los códigos internos y la ley para que permanecieran un largo tiempo, obedeciendo a intereses políticos.

Dentro de los planteamientos del ejecutivo para “limpiar la casa”, está una iniciativa –en elaboración- para que el poder judicial del estado sea verdaderamente independiente. Asimismo que los funcionarios no tengan fuero y puedan ser juzgados por las faltas que cometan, las cuales deben recibir las sanciones a que se hagan acreedores. Así se quiere eliminar del TSJ a los corruptos, que a decir de la voz pópuli, son muchos.

LOS GRANDES VICIOS EN EL TSJ

Las denuncias sobre acoso sexual, dádivas para cambiar resoluciones y grandes rezagos, ( suman 10 mil los casos pendientes de examinar) son algunos de los grandes vicios que han predominado por años. Asimismo los acuerdos “en lo obscurito” y favores para la contratación de familiares y amigos, que en la mayoría de los casos no están capacitados y que poco a poco han venido conformando sus propias “tribus” ya que un solo magistrado puede tener entre 15 o 20 familiares y recomendados, incluyendo inclusive a sus concubinas, lo cual de todos es sabido. La capacitación y actualización de jueces está por los suelos, y el dinero del presupuesto es manejado a través de algunas “partidas secretas” o discrecionalmente.

La perpetuación en el cargo es otro gran problema. De ahí que los magistrados recibieron el anuncio del gobernador, de que no pueden serlo de por vida, sino por un plazo determinado como a la fecha sucede en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Para ello se cambiará la ley.

Puebla necesita un poder judicial no sólo autónomo sino también justo, actualizado, sin rezagos, y sin corrupción y tal parece que las medidas que se tomarán ¡Al fin! permitirán un cambio sustancial en éste. Así que magistrados como Roberto Grajales, Jorge Cruz Bermúdez un moreno vallista puro, Ismael Mancilla, Ignacio Galván, José Montiel, Belinda Aguilar Díaz, y otros diez por lo menos, con el sello azul, que constituyen una férrea barrera para que las cosas cambien, deberían “poner sus barbas a remojar”.

Así que el informe de Héctor Sánchez será ampliamente recordado, y no por logros alcanzados, pues realmente los avances son pírricos, entre ellos la contratación de nuevos jueces, casi todos familiares de magistrados, sino por las consecuencias que vienen de la respuesta que le dio el Gobernador Barbosa, quien sabe de todos problemas internos del TSJ, del cordón de azules incrustados, de la animadversión hacia su persona, de la corrupción imperante, etc. Ahora sólo falta el anuncio de una auditoría seria de los recursos, pues ahí se encontrarán sorpresas y mucha corrupción.

¡NO ES ESTRATEGIA DE ECONOMÍA, ES FALTA DE PLANEACIÓN EL SUB EJERICIO EN EL AYUNTAMIENTO DE CRV!

Expertos en finanzas señalaron que la fallida “estrategia de economía” en el ayuntamiento que ha originado un sub ejercicio de más de 1 mil 300 millones de pesos, no puede disfrazarse como tal, porque la realidad es que ni la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco ni su equipo, -al que no ha querido cambiar- saben de planeación y de aplicación de recursos, lo cual pone de manifiesto su incapacidad para gobernar.

Sería larga la lista de necesidades y problemas que enfrenta Puebla. Tres son los más importantes, la inseguridad, el ambulantismo y la falta de obra pública. A cualquiera de ellos pudo haberse aplicado ese presupuesto o parte de él. Ahora que “el cochinito” no puede ser un verdadero ahorro, pues tenerlo en el Banco, es solo una pérdida de tiempo porque cuando se aplique, -si es que esto sucede- el costo de los proyectos habrá aumentado, así que ¿Cuál ahorro?.

Claudia habla del “cochinito” logrado para la realización de obra social, pero no dice cuál de manera concreta. Tampoco el ¿por qué? si había planes, esta no se realizó en todo un año. Está bien que no realice obras de “relumbrón”, pero sí trabajos perecederos que mejoren los servicios de la ciudad, sobre todo en colonias y en juntas auxiliares, en el descuidado centro histórico, en los principales camellones y jardines. El proyectado rescate del Mercado Unión, la transformación de la CAPU y atención a la 46 poniente anunciados por ella con bombo y platillo, todavía no tienen un proyecto definido ni fecha de aterrizaje. ¿Será que seguirá haciendo ahorros para realizarlos?, ¿le alcanzará, o los irá posponiendo?.

¿Y la seguridad Amá?..Por otra parte la delincuencia sigue sentando sus reales en la ciudad de Puebla, en el transporte etc., y sin embargo no se logra dar la protección necesaria ni en las zonas habitadas por gentes de recursos, ni en la periferia donde viven los más pobres, pues los delincuentes atacan a todos por igual. Este debería ser el tema prioritario para la alcaldesa y dejar a un lado cualquier sueño guajiro. Urge la contratación de expertos en planeación que le permita que para 2020 se ejerza por lo menos, el presupuesto que tenga Puebla, y se eliminen los “cochinitos” que no le han dado ningún resultado positivo y solo evidencian su inexperiencia para gobernar. Todo lo anterior, sin duda la deja muy mal parada.

2020 debe ser un año en que Claudia debe aplicar el poco oficio político que ha aprendido si es que así ha sido, y evitar esos enfrentamientos con el gobernador Miguel Barbosa, con sus propios compañeros regidores de MORENA porque su partido puede sufrir las consecuencias en el próximo proceso electoral. Ahora que las cosas se le pueden complicar si los resultados de la auditoría que se le realizará por parte de la ASE, no son satisfactorios, que es lo más seguro. Así que quizá haya nuevos escándalos en puerta. Y HASTA LA PRÓXIMA

mariagarciasolis@hotmail.com

Como un balde de agua fría cayó entre jueces y magistrados, (especialmente éstos últimos) el discurso pronunciado por el gobernador del Estado Luis Miguel Barbosa Huerta, durante el informe de actividades del presidente del Tribunal Superior de Justicia estatal Héctor Sánchez porque, deja entrever una importante transformación, que por el momento podría sintetizarse en el fin de viejos vicios y a “limpiar la casa”. Asimismo la aplicación de justicia y sanciones a corruptos y a quienes no actúen conforme a la ley; el fin del influyentismo y la eliminación de una larga permanencia dentro del puesto. Se acabarán los “magistrados de por vida”.

Si bien dichos funcionarios escucharon con seriedad dichos pronunciamientos, por lo menos 15 de ellos considerados magistrados “moreno vallistas y galistas” que llegaron en diversas épocas de las pasada administración, pusieron una cara de espanto, porque saben que sus días como tales en el TSJ podrían estar contados, al haber llegado impuestos por los ex gobernadores del PAN Rafael Moreno valle y Antonio Gali. Su llegada obedeció a la estrategia de sus padrinos, de ser los encargados de implantar medidas y amarres para un perfecto control de este poder. Con ello también para que no fuera fácil ni su destitución, ni una justa aplicación de la justicia pues todo se hacía o se resolvía, (como sigue sucediendo) “a modo”. Así el TSJ se llenó de magistrados y jueces improvisados, sin ninguna experiencia y destinados sólo para obedecer.

Quienes llegaron en los últimos 8 años aún permanecen incrustados en este poder, donde por cierto no han estado a la altura de su investidura, pues su trabajo deja mucho que desear. De ahí las constantes denuncias. De acuerdo a expertos, éstos personajes “amarraron” los códigos internos y la ley para que permanecieran un largo tiempo, obedeciendo a intereses políticos.

Dentro de los planteamientos del ejecutivo para “limpiar la casa”, está una iniciativa –en elaboración- para que el poder judicial del estado sea verdaderamente independiente. Asimismo que los funcionarios no tengan fuero y puedan ser juzgados por las faltas que cometan, las cuales deben recibir las sanciones a que se hagan acreedores. Así se quiere eliminar del TSJ a los corruptos, que a decir de la voz pópuli, son muchos.

LOS GRANDES VICIOS EN EL TSJ

Las denuncias sobre acoso sexual, dádivas para cambiar resoluciones y grandes rezagos, ( suman 10 mil los casos pendientes de examinar) son algunos de los grandes vicios que han predominado por años. Asimismo los acuerdos “en lo obscurito” y favores para la contratación de familiares y amigos, que en la mayoría de los casos no están capacitados y que poco a poco han venido conformando sus propias “tribus” ya que un solo magistrado puede tener entre 15 o 20 familiares y recomendados, incluyendo inclusive a sus concubinas, lo cual de todos es sabido. La capacitación y actualización de jueces está por los suelos, y el dinero del presupuesto es manejado a través de algunas “partidas secretas” o discrecionalmente.

La perpetuación en el cargo es otro gran problema. De ahí que los magistrados recibieron el anuncio del gobernador, de que no pueden serlo de por vida, sino por un plazo determinado como a la fecha sucede en la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Para ello se cambiará la ley.

Puebla necesita un poder judicial no sólo autónomo sino también justo, actualizado, sin rezagos, y sin corrupción y tal parece que las medidas que se tomarán ¡Al fin! permitirán un cambio sustancial en éste. Así que magistrados como Roberto Grajales, Jorge Cruz Bermúdez un moreno vallista puro, Ismael Mancilla, Ignacio Galván, José Montiel, Belinda Aguilar Díaz, y otros diez por lo menos, con el sello azul, que constituyen una férrea barrera para que las cosas cambien, deberían “poner sus barbas a remojar”.

Así que el informe de Héctor Sánchez será ampliamente recordado, y no por logros alcanzados, pues realmente los avances son pírricos, entre ellos la contratación de nuevos jueces, casi todos familiares de magistrados, sino por las consecuencias que vienen de la respuesta que le dio el Gobernador Barbosa, quien sabe de todos problemas internos del TSJ, del cordón de azules incrustados, de la animadversión hacia su persona, de la corrupción imperante, etc. Ahora sólo falta el anuncio de una auditoría seria de los recursos, pues ahí se encontrarán sorpresas y mucha corrupción.

¡NO ES ESTRATEGIA DE ECONOMÍA, ES FALTA DE PLANEACIÓN EL SUB EJERICIO EN EL AYUNTAMIENTO DE CRV!

Expertos en finanzas señalaron que la fallida “estrategia de economía” en el ayuntamiento que ha originado un sub ejercicio de más de 1 mil 300 millones de pesos, no puede disfrazarse como tal, porque la realidad es que ni la alcaldesa Claudia Rivera Vivanco ni su equipo, -al que no ha querido cambiar- saben de planeación y de aplicación de recursos, lo cual pone de manifiesto su incapacidad para gobernar.

Sería larga la lista de necesidades y problemas que enfrenta Puebla. Tres son los más importantes, la inseguridad, el ambulantismo y la falta de obra pública. A cualquiera de ellos pudo haberse aplicado ese presupuesto o parte de él. Ahora que “el cochinito” no puede ser un verdadero ahorro, pues tenerlo en el Banco, es solo una pérdida de tiempo porque cuando se aplique, -si es que esto sucede- el costo de los proyectos habrá aumentado, así que ¿Cuál ahorro?.

Claudia habla del “cochinito” logrado para la realización de obra social, pero no dice cuál de manera concreta. Tampoco el ¿por qué? si había planes, esta no se realizó en todo un año. Está bien que no realice obras de “relumbrón”, pero sí trabajos perecederos que mejoren los servicios de la ciudad, sobre todo en colonias y en juntas auxiliares, en el descuidado centro histórico, en los principales camellones y jardines. El proyectado rescate del Mercado Unión, la transformación de la CAPU y atención a la 46 poniente anunciados por ella con bombo y platillo, todavía no tienen un proyecto definido ni fecha de aterrizaje. ¿Será que seguirá haciendo ahorros para realizarlos?, ¿le alcanzará, o los irá posponiendo?.

¿Y la seguridad Amá?..Por otra parte la delincuencia sigue sentando sus reales en la ciudad de Puebla, en el transporte etc., y sin embargo no se logra dar la protección necesaria ni en las zonas habitadas por gentes de recursos, ni en la periferia donde viven los más pobres, pues los delincuentes atacan a todos por igual. Este debería ser el tema prioritario para la alcaldesa y dejar a un lado cualquier sueño guajiro. Urge la contratación de expertos en planeación que le permita que para 2020 se ejerza por lo menos, el presupuesto que tenga Puebla, y se eliminen los “cochinitos” que no le han dado ningún resultado positivo y solo evidencian su inexperiencia para gobernar. Todo lo anterior, sin duda la deja muy mal parada.

2020 debe ser un año en que Claudia debe aplicar el poco oficio político que ha aprendido si es que así ha sido, y evitar esos enfrentamientos con el gobernador Miguel Barbosa, con sus propios compañeros regidores de MORENA porque su partido puede sufrir las consecuencias en el próximo proceso electoral. Ahora que las cosas se le pueden complicar si los resultados de la auditoría que se le realizará por parte de la ASE, no son satisfactorios, que es lo más seguro. Así que quizá haya nuevos escándalos en puerta. Y HASTA LA PRÓXIMA

mariagarciasolis@hotmail.com