Desde el año 2020 hemos vivido situaciones excepcionales generadas por la pandemia ocasionada por el COVID-19, que ha provocado cambios sustantivos en la forma en que interactuamos como sociedad.
Uno de los principales efectos ha sido lo que los especialistas denominan como el “COVID prolongado”, “COVID-19 de larga duración”, “COVID-19 postagudo”, “efectos a largo plazo del COVID-19” o “COVID-19 crónico”.
De acuerdo con los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos, las afecciones posteriores al COVID-19 son una amplia gama de nuevos problemas de salud, recurrentes o en curso, que las personas pueden experimentar cuatro semanas o más después de haberse infectado por primera vez por el virus.
Incluso las personas que no tuvieron síntomas en los días o semanas posteriores a haberse infectado pueden experimentar afecciones posteriores. Estas afecciones pueden tener diferentes tipos y combinaciones de problemas de salud durante diferentes lapsos.
Los CDC afirman que algunas personas pueden experimentar una gama de síntomas nuevos o en curso que pueden durar semanas o meses después de haberse contagiado por primera vez. A diferencia de algunas otras afecciones posteriores que solamente suelen ocurrir en personas que se enfermaron gravemente, los síntomas que se enlistan pueden manifestarse en cualquier persona que se haya enfermado, incluso si fue leve, o si no tuvieron síntomas iniciales:
- Dificultad para respirar o falta de aire
- Cansancio o fatiga
- Dificultad para pensar o concentrarse
- Tos
- Dolor en el pecho o en el estómago
- Dolor de cabeza
- Corazón que late rápido o muy fuerte (conocido como palpitaciones)
- Dolor muscular o en las articulaciones
- Sensación de hormigueo
- Diarrea
- Problemas para dormir
- Fiebre
- Mareos o vértigo al ponerse de pie
- Sarpullido
- Cambios en el estado de ánimo
- Alteraciones del gusto o el olfato
- Cambios en el ciclo menstrual
Asimismo, los CDC hacen referencia a que las hospitalizaciones y enfermedades graves relacionadas con los pulmones, incluido el COVID-19, pueden causar efectos en la salud como debilidad grave y agotamiento durante el periodo de recuperación. Ello también puede incluir el síndrome post-cuidados intensivos, que hace referencia a los efectos sobre la salud, que aparecen cuando una persona se encuentra en una unidad de cuidados intensivos (UCI) y pueden prolongarse incluso después del alta.
Sin duda, es momento de seguir cuidándonos, en particular a los grupos más vulnerables, así como atender las indicaciones de las autoridades sanitarias y vacunarse si es posible.
Y tú, ¿qué más nos puedes compartir sobre los efectos generados por el COVID-19? Te invito a dejar tu mensaje en mi página de Facebook David Villanueva Lomelí. Con los Hashtags #Puebla y #VívelaBien.
Como señaló el emprendedor hindú Naval Ravikant: “Tres cosas en la vida: tu salud, tu misión y las personas que quieres. Eso es todo.”
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