/ miércoles 24 de junio de 2020

Nubarrones ante ola de mil muertos

Por desgracia, Puebla ha cruzado el umbral de los mil fallecimientos atribuidos al Covid-19 y a juzgar por los números que diariamente vemos (aún con sus discrepancias entre autoridades federales y estatales), esta funesta realidad no mira una pronta contención sino todo lo contrario.

La forma tan acelerada en la que los contagios y fallecimientos se han presentado en el mes de junio, puede derivar, en el corto plazo, en que los sistemas de salud se colapsen y no exista forma de atender a quienes requieran de hospitalización o cuidados intensivos.

Tuvieron que pasar 68 días, del 29 de marzo al 4 de junio, para que la entidad alcanzara la cantidad de 525 fallecidos, pero para completar las mil 024 pérdidas de vidas humanas producto de esta pandemia, es decir las otras 499 víctimas, solo transcurrieron 20 días.

A nivel nacional, Puebla se ubica en un tercer lugar con mayor número de casos activos, es decir con personas que en los últimos 14 días atraviesan por el cuadro infeccioso del coronavirus SARS-CoV-2 y difícilmente escalará a las posiciones uno o dos porque estamos hablando del Edomex y de la Ciudad de México como las que ocupan las primeras posiciones.

Y la forma en la que las autoridades de la Cuarta Transformación están sorteando esta crisis genera más preocupaciones que certezas. Hoy es el día en el que no podemos tener una explicación técnica del porqué los números que presenta la federación y los que aporta la Secretaría de Salud no coinciden en tiempo.

Tan solo en el comparativo de los números que ofrecieron la noche del 23 y la mañana de este 24 de junio, resulta que el gobierno federal tenía 78 más fallecidos que el gobierno del estado mientras que en contagiados la diferencia fue de 322.

La Secretaría de Salud reportó la noche de este miércoles que se han alcanzado mil 024 decesos en la entidad, pero difícilmente los reportes que presente este jueves el Gobierno estatal hablarán de 110 fallecidos en un día para igualar los indicadores.

El gobernador Miguel Barbosa, en su conferencia mañanera, habló sobre un retraso en las cifras y especificó que sería el Instituto Mexicano del Seguro Social el que entregaría con posterioridad reportes de contagios y fallecidos lo que haría que las cifras se disparen; no obstante, bajo este supuesto, entonces el IMSS estaría compartiendo antes a la federación sus datos porque allá van más adelantados.

Y si con los números no hay certeza, que podemos pensar si no hay voluntad para hacer pactos políticos que permitan una pausa, al menos temporal, en los evidentes enconos que existen entre los gobiernos estatal y municipal, de Miguel Barbosa y de Claudia Rivera Vivanco, respectivamente.

Se trata, nada más, de la ciudad que concentra más de 5 mil de los 8 mil casos confirmados y donde, coincido con el gobernador, no deben existir componentes grillos, sino acuerdos políticos para que, mediante liderazgos, se llegue a un mejor destino. Lastimosamente, hoy solo vemos nubarrones.

Hasta la próxima.

salvador_rios@elsoldepuebla.com.mx

Por desgracia, Puebla ha cruzado el umbral de los mil fallecimientos atribuidos al Covid-19 y a juzgar por los números que diariamente vemos (aún con sus discrepancias entre autoridades federales y estatales), esta funesta realidad no mira una pronta contención sino todo lo contrario.

La forma tan acelerada en la que los contagios y fallecimientos se han presentado en el mes de junio, puede derivar, en el corto plazo, en que los sistemas de salud se colapsen y no exista forma de atender a quienes requieran de hospitalización o cuidados intensivos.

Tuvieron que pasar 68 días, del 29 de marzo al 4 de junio, para que la entidad alcanzara la cantidad de 525 fallecidos, pero para completar las mil 024 pérdidas de vidas humanas producto de esta pandemia, es decir las otras 499 víctimas, solo transcurrieron 20 días.

A nivel nacional, Puebla se ubica en un tercer lugar con mayor número de casos activos, es decir con personas que en los últimos 14 días atraviesan por el cuadro infeccioso del coronavirus SARS-CoV-2 y difícilmente escalará a las posiciones uno o dos porque estamos hablando del Edomex y de la Ciudad de México como las que ocupan las primeras posiciones.

Y la forma en la que las autoridades de la Cuarta Transformación están sorteando esta crisis genera más preocupaciones que certezas. Hoy es el día en el que no podemos tener una explicación técnica del porqué los números que presenta la federación y los que aporta la Secretaría de Salud no coinciden en tiempo.

Tan solo en el comparativo de los números que ofrecieron la noche del 23 y la mañana de este 24 de junio, resulta que el gobierno federal tenía 78 más fallecidos que el gobierno del estado mientras que en contagiados la diferencia fue de 322.

La Secretaría de Salud reportó la noche de este miércoles que se han alcanzado mil 024 decesos en la entidad, pero difícilmente los reportes que presente este jueves el Gobierno estatal hablarán de 110 fallecidos en un día para igualar los indicadores.

El gobernador Miguel Barbosa, en su conferencia mañanera, habló sobre un retraso en las cifras y especificó que sería el Instituto Mexicano del Seguro Social el que entregaría con posterioridad reportes de contagios y fallecidos lo que haría que las cifras se disparen; no obstante, bajo este supuesto, entonces el IMSS estaría compartiendo antes a la federación sus datos porque allá van más adelantados.

Y si con los números no hay certeza, que podemos pensar si no hay voluntad para hacer pactos políticos que permitan una pausa, al menos temporal, en los evidentes enconos que existen entre los gobiernos estatal y municipal, de Miguel Barbosa y de Claudia Rivera Vivanco, respectivamente.

Se trata, nada más, de la ciudad que concentra más de 5 mil de los 8 mil casos confirmados y donde, coincido con el gobernador, no deben existir componentes grillos, sino acuerdos políticos para que, mediante liderazgos, se llegue a un mejor destino. Lastimosamente, hoy solo vemos nubarrones.

Hasta la próxima.

salvador_rios@elsoldepuebla.com.mx