El inicio del año 2022 presenta oportunidades para evolucionar como seres humanos, plantearnos propósitos renovados y hacer acuerdos con nosotros mismos para alcanzar esas metas.
Uno de esos propósitos puede ser cuidar nuestro peso, no solamente como un tema relacionado con la estética, sino con procurar una vida más saludable.
Para ello, es necesario tener en cuenta que cada persona es diferente físicamente y que algunas dietas o regímenes alimenticios pueden funcionar bien o no, y ello no implica que sean buenos o malos. Lo ideal es contar con algún tipo de orientación profesional, previo a iniciar algún cambio drástico en la ingesta de alimentos, incremento en la actividad física o modificación sustantiva a nuestros hábitos.
Por lo tanto, como una primera aproximación, recupero lo que plantean los Centros para el Control de Enfermedades y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), en el sentido de que lograr y mantener un peso saludable incluye tener una alimentación saludable, actividad física, sueño óptimo y reducción del estrés. Existen otros factores que pueden afectar el aumento de peso.
Asimismo, sostienen que, una alimentación saludable incluye una variedad de alimentos de acuerdo con las características de cada persona. Las dietas de moda pueden prometer resultados rápidos, pero ellas limitan la cantidad de nutrientes que se ingieren, por lo que pueden ser poco saludables y tienden a fallar a largo plazo.
Como recomendación, los CDC hacen referencia a que las verduras de hoja verde oscura, las naranjas y los tomates, incluso las hierbas frescas, están llenos de vitaminas, fibra y minerales; y que agregarlos en el consumo diario, aumenta los nutrientes que se ingieren.
También hacen énfasis en que, para cuidar nuestro estado de salud, la cantidad de actividad física que se necesita depende en parte de si está tratando de mantener el peso o bajarlo y que caminar es una buena forma de agregar más actividad física al estilo de vida.
Controlar nuestro peso contribuye a la buena salud ahora y en el futuro. Por el contrario, quienes tienen obesidad, tienen un mayor riesgo de sufrir muchas enfermedades y afecciones graves.
Una buena noticia es que se puede prevenir el aumento de peso, si se lleva un estilo de vida que incluya buenos hábitos de alimentación y actividad física diaria. Al evitarlo, se reducen riesgos mayores de muchas enfermedades crónicas como problemas cardiacos, accidentes cerebrovasculares, diabetes, presión arterial elevada, osteoartritis y algunos tipos de cáncer.
Para poder cumplir el propósito de alcanzar ese peso idóneo tenemos que evitar despertarnos y pensar hoy voy a bajar de peso, ya que es una intención muy general que nos puede llevar a no lograr esa meta; al contrario, es necesario aterrizarlo en actividades concretas como: hoy voy a caminar 30 minutos, tomar dos litros de agua, comer más saludable, reducir el consumo de azúcares y grasas saturadas, por mencionar las más representativas.
Sin duda, tenemos que cuidarnos, ya que la pandemia sigue vigente, sus efectos a mediano plazo aún son inciertos y mantener un peso ideal nos permitirá conservar un mejor estado de salud, sentirnos mejor con nosotros mismos y cumplir nuestros objetivos de vida.
Y tú, ¿cómo cuidas tu alimentación y tu peso? Los invito a dejar su mensaje en mi página de Facebook David Villanueva Lomelí. Con los Hashtags #Puebla y #VívelaBien.
Como señala la Organización Mundial de la Salud: “La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no solamente la ausencia de afecciones o enfermedades.”
Facebook: David Villanueva Lomelí
www.davidvillanueva.mx
