Resolver el homicidio de Aarón Varela Martínez, aspirante del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) a la presidencia municipal de Santa Clara Ocoyucan, tiene que ser un objetivo de altísima importancia para las autoridades políticas y judiciales del estado.
Mientras no se esclarezcan los acontecimientos y se encuentre a los culpables, prevalecerá en el ambiente la existencia de un móvil político y el hecho servirá de argumento para desatar una guerra de señalamientos y acusaciones que tendrá como protagonistas a los principales contendientes de la elección.
No es difícil pensar lo que ocurrirá en Puebla si el asesinato queda impune.
Ayer fueron Luis Miguel Barbosa, Gabriel Biestro y un representante de la dirigencia nacional quienes condenaron el crimen y exigieron justicia, pero debe ser solo cuestión de horas para que Andrés Manuel López Obrador se agregue a los reclamos y los asuma como una nueva causa de lucha electoral.
¿Imagina al tabasqueño en una agenda política que lleve como centro de atención lo sucedido en Puebla?
Habilidoso como es, López Obrador no dudaría en pasar el tema al terreno nacional.
Con un discurso creíble para sus seguidores, que hoy por hoy son mayoría en el país, intentaría evidenciar la supuesta colusión de los grupos de poder para impedir el ascenso al gobierno de los candidatos de Morena, incluso, como pasó en la madrugada del jueves en Ocoyucan, a balazos.
Ese es el riesgo que Diódoro Carrasco y Víctor Carrancá deben desactivar.
El secretario general de gobierno y el titular de la Fiscalía General del Estado están obligados a quitar de la cancha política cualquier pretexto que pueda servirle al ‘Peje’ para hacer de Puebla su estrategia de campaña.
Por supuesto que es lamentable y condenable el homicidio de Aarón Varela, ocurrido en una zona que ha sido semillero de conflictos entre simpatizantes de Antorcha Campesina y el PRD.
Sin embargo, por el bien de la estabilidad política y social de los poblanos, no debería trasladarse a la arena electoral, y menos, rebasar las fronteras del estado.
Eso sin hablar del resto de las comunidades poblanas donde los ánimos están calientes e irán subiendo de tono una vez que los comicios se acerquen a la recta final.
Aquí entran también los responsables de la seguridad pública en el estado y los 217 ayuntamientos.
La tarea, como se ve, es muy compleja.
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Una de las conductoras de televisión y radio de Puebla Comunicaciones, Mariale Ayón, recibirá la presea Stilo Urbano por parte del Consejo de la Fundación Cultural Stilo Urbano A.C., una asociación sin fines de lucro que otorga reconocimientos a personalidades e instituciones sobresalientes en diferentes ámbitos del quehacer profesional.
La ceremonia que servirá para la entrega de las preseas se realizará el viernes 9 de marzo en el Salón de Plenos del Congreso del Estado, a las 17:00 horas.
Esta fundación eligió a Mariale Ayón, conductora de los programas “Vive mejor” y “Acompañados”, por su trabajo a través de los medios en favor de la comunidad.
Por cierto, esta comunicadora fue invitada a participar en el proceso electoral que se encuentra en marcha.
El partido Nueva Alianza le propuso contender como candidata a la presidencia municipal de San Pedro Cholula, a lo que dijo que no, que muchas gracias.
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