/ lunes 27 de junio de 2022

PAN: unidad y candidato | A Puerta Cerrada

Primero unidad, después unidad y al último unidad.

Ese es el principal de los valores que antepuso un grupo de panistas entrevistados por El Sol de Puebla para que el Partido Acción Nacional (PAN) pueda encarar con probabilidades de éxito la contienda electoral de 2024 en Puebla, vaya o no en alianza con el PRI, el PRD y algunos otros institutos políticos.

Esos panistas son Oswaldo Jiménez López, Mónica Rodríguez DellaVecchia, Ana Teresa Aranda Orozco, Marcos Castro Martínez, Mario Riestra Piña, Jesús Zaldívar Benavides, Jorge Aguilar Chedraui, Francisco Fraile García y Luis Paredes Moctezuma.

No obstante, aun cuando todos hablan de la importancia de olvidar las diferencias del pasado, sanar heridas y ponerse a trabajar juntos para adelante, con Morena y sus candidatos en la mira, se refieren a ella con matices diferentes y comprensibles en un trabajo especial que se despliega este día en las páginas de este diario.

Marcos Castro, Jesús Zaldívar y Ana Teresa Aranda, miembros del grupo vencedor tras la extinción física y política del morenovallismo, afirman que esa unidad ha comenzado a trabajarse ya desde el renovado Comité Directivo Estatal y prometen que pronto será un hecho consumado.

Jorge Aguilar, Francisco Fraile y Luis Paredes opinan otra cosa.

Ellos tres, como parte un panismo que se asume excluido por parte de la nueva dirigencia, ponen en duda la capacidad de cohesión de sus líderes formales y hacen énfasis en la falta de confianza.

Otros como Mario Riestra, Mónica Rodríguez y Oswaldo Jiménez dibujan estrategias concretas para conseguir la unidad y trabajar en beneficio de una alianza opositora más fuerte.

El primero sugiere reformar los estatutos del partido para conseguir la suma de grupos desde los comités directivos municipales. Que los integrantes de las planillas perdedoras puedan formar parte de los órganos de dirigencia para conseguir la inclusión, afirma el diputado federal.

La diputada local llama sus dirigentes para que concreten la alianza opositora a Morena desde el Congreso del Estado, donde el PRI parece ir en un sentido completamente opuesto a los mensajes que se pregonan en lo electoral.

Jiménez, a su vez, pone sobre la mesa la posibilidad de replantear esa hipotética coalición de partidos ante la crisis en que se encuentra sumido el PRI.

Los que ganaron con la interna de noviembre se muestran optimistas.

Los que perdieron se encuentran a la espera de lograr acuerdos.

Y los que están en el olvido aguardan la mano redentora que los devuelva al juego.

Entre las expresiones de estos nueve panistas hay otro punto en común, que tiene que ver con el próximo y eventual candidato a gobernador.

La gran mayoría coincide en que la mejor carta del panismo para enfrentar la sucesión de Miguel Barbosa Huerta es el actual presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez.

Sin importar el bando o el grupo en el que hayan estado hasta antes de la renovación de dirigencia, ven al edil de la capital como el perfil que les puede garantizar el triunfo ante el candidato de Morena, quien quiera que sea, y devolverle al partido la posición que ya ocupó en el sexenio de Rafael Moreno Valle (y un pequeño extra con José Antonio Gali Fayad).

Unos son más prudentes que otros.

Hasta el secretario general del partido, Marcos Castro, recomienda tener más opciones y menciona nombres, pero ninguno de los liderazgos entrevistados se opuso a que sea Rivera Pérez el candidato a gobernador de la siguiente contienda.

El trabajo de la reportera Victoria Ventura es rico en la opinión de todos ellos, no solo en lo que se refiere a la unidad y la definición del candidato a gobernador.

Augusta Valentina Díaz de Rivera y Genoveva Huerta Villegas fueron invitadas a participar, pero ambas declinaron hacerlo, por cuestiones de agenda.

Twitter: @jorgerdzc

Primero unidad, después unidad y al último unidad.

Ese es el principal de los valores que antepuso un grupo de panistas entrevistados por El Sol de Puebla para que el Partido Acción Nacional (PAN) pueda encarar con probabilidades de éxito la contienda electoral de 2024 en Puebla, vaya o no en alianza con el PRI, el PRD y algunos otros institutos políticos.

Esos panistas son Oswaldo Jiménez López, Mónica Rodríguez DellaVecchia, Ana Teresa Aranda Orozco, Marcos Castro Martínez, Mario Riestra Piña, Jesús Zaldívar Benavides, Jorge Aguilar Chedraui, Francisco Fraile García y Luis Paredes Moctezuma.

No obstante, aun cuando todos hablan de la importancia de olvidar las diferencias del pasado, sanar heridas y ponerse a trabajar juntos para adelante, con Morena y sus candidatos en la mira, se refieren a ella con matices diferentes y comprensibles en un trabajo especial que se despliega este día en las páginas de este diario.

Marcos Castro, Jesús Zaldívar y Ana Teresa Aranda, miembros del grupo vencedor tras la extinción física y política del morenovallismo, afirman que esa unidad ha comenzado a trabajarse ya desde el renovado Comité Directivo Estatal y prometen que pronto será un hecho consumado.

Jorge Aguilar, Francisco Fraile y Luis Paredes opinan otra cosa.

Ellos tres, como parte un panismo que se asume excluido por parte de la nueva dirigencia, ponen en duda la capacidad de cohesión de sus líderes formales y hacen énfasis en la falta de confianza.

Otros como Mario Riestra, Mónica Rodríguez y Oswaldo Jiménez dibujan estrategias concretas para conseguir la unidad y trabajar en beneficio de una alianza opositora más fuerte.

El primero sugiere reformar los estatutos del partido para conseguir la suma de grupos desde los comités directivos municipales. Que los integrantes de las planillas perdedoras puedan formar parte de los órganos de dirigencia para conseguir la inclusión, afirma el diputado federal.

La diputada local llama sus dirigentes para que concreten la alianza opositora a Morena desde el Congreso del Estado, donde el PRI parece ir en un sentido completamente opuesto a los mensajes que se pregonan en lo electoral.

Jiménez, a su vez, pone sobre la mesa la posibilidad de replantear esa hipotética coalición de partidos ante la crisis en que se encuentra sumido el PRI.

Los que ganaron con la interna de noviembre se muestran optimistas.

Los que perdieron se encuentran a la espera de lograr acuerdos.

Y los que están en el olvido aguardan la mano redentora que los devuelva al juego.

Entre las expresiones de estos nueve panistas hay otro punto en común, que tiene que ver con el próximo y eventual candidato a gobernador.

La gran mayoría coincide en que la mejor carta del panismo para enfrentar la sucesión de Miguel Barbosa Huerta es el actual presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez.

Sin importar el bando o el grupo en el que hayan estado hasta antes de la renovación de dirigencia, ven al edil de la capital como el perfil que les puede garantizar el triunfo ante el candidato de Morena, quien quiera que sea, y devolverle al partido la posición que ya ocupó en el sexenio de Rafael Moreno Valle (y un pequeño extra con José Antonio Gali Fayad).

Unos son más prudentes que otros.

Hasta el secretario general del partido, Marcos Castro, recomienda tener más opciones y menciona nombres, pero ninguno de los liderazgos entrevistados se opuso a que sea Rivera Pérez el candidato a gobernador de la siguiente contienda.

El trabajo de la reportera Victoria Ventura es rico en la opinión de todos ellos, no solo en lo que se refiere a la unidad y la definición del candidato a gobernador.

Augusta Valentina Díaz de Rivera y Genoveva Huerta Villegas fueron invitadas a participar, pero ambas declinaron hacerlo, por cuestiones de agenda.

Twitter: @jorgerdzc