/ jueves 10 de diciembre de 2020

¡¡¡Pragmatismo 2021!!!

Ya lo habíamos dicho… las alianzas, coaliciones o acuerdos entre el PAN, PRI y PRD tienen la simple lógica del pragmatismo político que consiste en sumar votos para ganar las elecciones en el 2021. Sus opositores y críticos ya etiquetan la unión de “ambiciosa, sin sentido y absurda”, pero siendo realistas es el único salvavidas que tiene este trío para convertirse en una alternativa política ya que en los nuevos tiempos, hoy todo puede pasar; hasta traicionar el pensamiento ideológico con tal de ganar elecciones.

Al PRIANRD ya le cayó el veinte de que no basta tener candidatos populares, conocidos y queridos. Ya entendieron que aventurarse solos y cada quien por su lado no les permitiría ser una opción real al grado de que solitos no llenarían ni la Arena Puebla; por lo tanto hoy no les queda más que tragarse sus revanchismos, sus odios y mentadas de antaño con tal de ponerle en su mother a Morena que obvio, no se quedará con los brazos cruzados.

El partido del presidente no está solo. Morena también trae sus alianzas y para ello ya se amarchantó con el PT y el PVEM, que poco pero suman y eso al momento del conteo voto por voto, casilla por casilla, sí tiene su valor y peso.

Por si fuera poco, Morena tiene en el mismísimo presidente su principal activo que aunque muchos no estén de acuerdo con su estilo de gobernar, al final los números del aplausómetro lo siguen poniendo con altos niveles de aceptación.

Quien iba a decir que los acérrimos enemigos de la política mexicana: PRI y PAN se iban a dar la mano para ir juntos en una elección. Si la escena la vieran los fundadores de ambos partidos, se volverían a morir. Tales acuerdo eran impensables hace 20 años, pero hoy a estas alianzas les llama “madurez política”, “proyecto de coincidencias”, unión por el bien de los demás y reciben otros nombres más, pero en el fondo lo que quieren es recuperar el poder.

Mientras se sigue debatiendo sobre esta unión, lo cierto es que el PAN, PRI y PRD ya están listos para la instalación de sus mesas de trabajo de la alianza electoral en Puebla a la que ya llegan con ciertos avances, con pláticas previas y acuerdos que tendrán que aterrizarse y firmarse para que formalmente haya compromisos y que el próximo año vean si realmente ésta es una fórmula ganadora o solo un intento desesperado por sobrevivir.

Ayer la dirigente estatal del PAN, Genoveva Huerta Villegas, el líder poblano de PRI, Néstor Camarillo Medina y el presidente del PRD local, Carlos Martínez Amador, oficialmente se presentaron ante medios informativos para instalar sus mesas de trabajo cuyo objetivo será “generar consensos, sumar esfuerzos y construir contrapeso político que detenga los excesos de Morena y sus gobernantes” –eso dice uno de los comunicados- además de “cambiar el rumbo de Puebla y México”.

Ya se verá en las próximas semanas si las intenciones que dicen tener realmente se cristalizan, ya veremos si logran acuerdos, también comprobaremos si hay madurez de los líderes y militantes para formalizar compromisos y sobre todo, si serán capaces de trabajar y operar por un proyecto y hacer ganar a un candidato que aunque no sea de su partido, se supone que tendrá la misma causa que es ganarle a Morena y recuperar el power.

En suma las alianzas en Puebla avanzan... pronto sabremos hasta dónde pueden llegar juntos partidos totalmente opuestos ideológicamente y si en verdad es real su intención de ser opción política en 2021 o solo es su interés por regresar por el poder.

Al final lo que sí es un hecho con base en los hemos visto hasta el momento es que en el escenario político solo hay de 2 sopas en las elecciones: Estás con el presidente AMLO y Morena o estás contra ellos y por eso escogerías al PRIANRD, es decir la polarización estará cañona y no solo en Puebla, sino en todo México.

Ya lo habíamos dicho… las alianzas, coaliciones o acuerdos entre el PAN, PRI y PRD tienen la simple lógica del pragmatismo político que consiste en sumar votos para ganar las elecciones en el 2021. Sus opositores y críticos ya etiquetan la unión de “ambiciosa, sin sentido y absurda”, pero siendo realistas es el único salvavidas que tiene este trío para convertirse en una alternativa política ya que en los nuevos tiempos, hoy todo puede pasar; hasta traicionar el pensamiento ideológico con tal de ganar elecciones.

Al PRIANRD ya le cayó el veinte de que no basta tener candidatos populares, conocidos y queridos. Ya entendieron que aventurarse solos y cada quien por su lado no les permitiría ser una opción real al grado de que solitos no llenarían ni la Arena Puebla; por lo tanto hoy no les queda más que tragarse sus revanchismos, sus odios y mentadas de antaño con tal de ponerle en su mother a Morena que obvio, no se quedará con los brazos cruzados.

El partido del presidente no está solo. Morena también trae sus alianzas y para ello ya se amarchantó con el PT y el PVEM, que poco pero suman y eso al momento del conteo voto por voto, casilla por casilla, sí tiene su valor y peso.

Por si fuera poco, Morena tiene en el mismísimo presidente su principal activo que aunque muchos no estén de acuerdo con su estilo de gobernar, al final los números del aplausómetro lo siguen poniendo con altos niveles de aceptación.

Quien iba a decir que los acérrimos enemigos de la política mexicana: PRI y PAN se iban a dar la mano para ir juntos en una elección. Si la escena la vieran los fundadores de ambos partidos, se volverían a morir. Tales acuerdo eran impensables hace 20 años, pero hoy a estas alianzas les llama “madurez política”, “proyecto de coincidencias”, unión por el bien de los demás y reciben otros nombres más, pero en el fondo lo que quieren es recuperar el poder.

Mientras se sigue debatiendo sobre esta unión, lo cierto es que el PAN, PRI y PRD ya están listos para la instalación de sus mesas de trabajo de la alianza electoral en Puebla a la que ya llegan con ciertos avances, con pláticas previas y acuerdos que tendrán que aterrizarse y firmarse para que formalmente haya compromisos y que el próximo año vean si realmente ésta es una fórmula ganadora o solo un intento desesperado por sobrevivir.

Ayer la dirigente estatal del PAN, Genoveva Huerta Villegas, el líder poblano de PRI, Néstor Camarillo Medina y el presidente del PRD local, Carlos Martínez Amador, oficialmente se presentaron ante medios informativos para instalar sus mesas de trabajo cuyo objetivo será “generar consensos, sumar esfuerzos y construir contrapeso político que detenga los excesos de Morena y sus gobernantes” –eso dice uno de los comunicados- además de “cambiar el rumbo de Puebla y México”.

Ya se verá en las próximas semanas si las intenciones que dicen tener realmente se cristalizan, ya veremos si logran acuerdos, también comprobaremos si hay madurez de los líderes y militantes para formalizar compromisos y sobre todo, si serán capaces de trabajar y operar por un proyecto y hacer ganar a un candidato que aunque no sea de su partido, se supone que tendrá la misma causa que es ganarle a Morena y recuperar el power.

En suma las alianzas en Puebla avanzan... pronto sabremos hasta dónde pueden llegar juntos partidos totalmente opuestos ideológicamente y si en verdad es real su intención de ser opción política en 2021 o solo es su interés por regresar por el poder.

Al final lo que sí es un hecho con base en los hemos visto hasta el momento es que en el escenario político solo hay de 2 sopas en las elecciones: Estás con el presidente AMLO y Morena o estás contra ellos y por eso escogerías al PRIANRD, es decir la polarización estará cañona y no solo en Puebla, sino en todo México.