/ martes 16 de marzo de 2021

¿Qué quieren esconder?

“¡Qué bueno que hasta se pueden saber los precios de las toallas en esta casa. Eso es nuestra promesa de transparencia”

Vicente Fox


El combate a la corrupción es una bandera muy popular y rentable electoralmente, sin embargo, si no se defiende con voluntad política, que se traduzca en leyes, políticas públicas y presupuesto no es más que un discurso vacío.

La corrupción es el lugar común de gobiernos populistas para explicar el origen de todos los males de un país, como una salida fácil y simplista. Ejemplos abundan en el continente Americano, como Hugo Chávez, Nicolás Maduro de Venezuela, Alberto Fernández de Argentina, Rafael Correa de Ecuador, Evo Morales de Bolivia y el mismo Donald Trump de EUA, por mencionar algunos.


El verdadero combate a la corrupción implica un gobierno abierto y transparente, como uno de los ejes rectores de democracias modernas que facilitan el acceso a la información como un derecho, con el objetivo de que las autoridades estén sometidas al escrutinio público.


Según Kristalina Georgieva, Directora del Fondo Monetario Internacional; la falta de transparencia u opacidad alimenta la corrupción y termina por afectar a los más pobres. La importancia de la transparencia y el acceso a la información está vinculada con la rendición de cuentas acerca del uso de los recursos públicos y sus resultados.


En el 2002, durante el sexenio de Vicente Fox se aprobó la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, que dio como resultado la creación del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI hoy INAI).


La Organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad propone algunos objetivos para conformar una Agenda Nacional Anticorrupción tales como: Fortalecer las instituciones para el combate a la corrupción, transparentar las compras del gobierno, reducir la discrecionalidad en el gasto público y reforzar los mecanismos de transparencia y gobierno abierto.


¿Qué medidas ha tomado el Gobierno en el discurso anticorrupción? Ninguna. Al contrario.


Durante el 2020, el 80% de los contratos públicos del Gobierno Federal fueron adjudicaciones directas. A inicios de este año se anunció la intención de desaparecer el INAI pese a que su objetivo principal es la transparencia y con ello, el combate a la corrupción.


Recientemente, los contratos para la compra de vacunas se reservaron 5 años, así que en medio de la peor crisis sanitaria en la historia moderna de México, los mexicanos no podremos saber cuántas vacunas, de qué marca y a qué precio se compraron con recursos públicos ni la estrategia a seguir en la vacunación. ¿Qué quieren esconder?


La lista de información clasificada versa sobre los principales proyectos del Gobierno Federal con mayor presupuesto, tales como el Tren Maya, el aeropuerto de Santa Lucía, el enfrentamiento entre militares y civiles en Tamaulipas, cifras de muertes sobre COVID, compra de heparina sódica contaminada en un hospital de Pemex en Tabasco, explosión en Tlahuelilpan, Hidalgo, el avión presidencial, el operativo contra Ovidio Guzmán y el Acuerdo bilateral con EU sobre armas, por mencionar los más importantes.


El actual Gobierno es el más opaco desde que se creó el INAI en 2002 y ha reservado más información que el sexenio anterior. Aunado a esto, el Foro Económico Mundial en su Índice Global de Competitividad, posiciona a México en el lugar 116 de 141 países en temas relacionados con la transparencia y la rendición de cuentas. Paradójicamente, el Presidente desde su Palacio, saca pañuelo blanco y dice que en México ya no hay corrupción… Si cómo no.



“¡Qué bueno que hasta se pueden saber los precios de las toallas en esta casa. Eso es nuestra promesa de transparencia”

Vicente Fox


El combate a la corrupción es una bandera muy popular y rentable electoralmente, sin embargo, si no se defiende con voluntad política, que se traduzca en leyes, políticas públicas y presupuesto no es más que un discurso vacío.

La corrupción es el lugar común de gobiernos populistas para explicar el origen de todos los males de un país, como una salida fácil y simplista. Ejemplos abundan en el continente Americano, como Hugo Chávez, Nicolás Maduro de Venezuela, Alberto Fernández de Argentina, Rafael Correa de Ecuador, Evo Morales de Bolivia y el mismo Donald Trump de EUA, por mencionar algunos.


El verdadero combate a la corrupción implica un gobierno abierto y transparente, como uno de los ejes rectores de democracias modernas que facilitan el acceso a la información como un derecho, con el objetivo de que las autoridades estén sometidas al escrutinio público.


Según Kristalina Georgieva, Directora del Fondo Monetario Internacional; la falta de transparencia u opacidad alimenta la corrupción y termina por afectar a los más pobres. La importancia de la transparencia y el acceso a la información está vinculada con la rendición de cuentas acerca del uso de los recursos públicos y sus resultados.


En el 2002, durante el sexenio de Vicente Fox se aprobó la Ley Federal de Transparencia y Acceso a la Información Pública Gubernamental, que dio como resultado la creación del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI hoy INAI).


La Organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad propone algunos objetivos para conformar una Agenda Nacional Anticorrupción tales como: Fortalecer las instituciones para el combate a la corrupción, transparentar las compras del gobierno, reducir la discrecionalidad en el gasto público y reforzar los mecanismos de transparencia y gobierno abierto.


¿Qué medidas ha tomado el Gobierno en el discurso anticorrupción? Ninguna. Al contrario.


Durante el 2020, el 80% de los contratos públicos del Gobierno Federal fueron adjudicaciones directas. A inicios de este año se anunció la intención de desaparecer el INAI pese a que su objetivo principal es la transparencia y con ello, el combate a la corrupción.


Recientemente, los contratos para la compra de vacunas se reservaron 5 años, así que en medio de la peor crisis sanitaria en la historia moderna de México, los mexicanos no podremos saber cuántas vacunas, de qué marca y a qué precio se compraron con recursos públicos ni la estrategia a seguir en la vacunación. ¿Qué quieren esconder?


La lista de información clasificada versa sobre los principales proyectos del Gobierno Federal con mayor presupuesto, tales como el Tren Maya, el aeropuerto de Santa Lucía, el enfrentamiento entre militares y civiles en Tamaulipas, cifras de muertes sobre COVID, compra de heparina sódica contaminada en un hospital de Pemex en Tabasco, explosión en Tlahuelilpan, Hidalgo, el avión presidencial, el operativo contra Ovidio Guzmán y el Acuerdo bilateral con EU sobre armas, por mencionar los más importantes.


El actual Gobierno es el más opaco desde que se creó el INAI en 2002 y ha reservado más información que el sexenio anterior. Aunado a esto, el Foro Económico Mundial en su Índice Global de Competitividad, posiciona a México en el lugar 116 de 141 países en temas relacionados con la transparencia y la rendición de cuentas. Paradójicamente, el Presidente desde su Palacio, saca pañuelo blanco y dice que en México ya no hay corrupción… Si cómo no.