/ martes 15 de octubre de 2019

Saldos del informe de Claudia Rivera

El primer informe de la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, fue como se esperaba: denunciar la existencia de fuerzas del pasado que buscan afectar su gobierno, sin reconocer abiertamente que es necesario reestructurar el plan de trabajo que arroje resultados, sin perder la esencia de la llamada Cuarta Transformación.

La curva de aprendizaje por allegarse de gran parte de titulares de secretarías o dependencias con poca o nula experiencia en el servicio público, se vio reflejado en su discurso.

Desde luego que todo cambio está sujeto a resistencias, como lo expresó Rivera Vivanco, pero la misión de la líder de un proyecto es encontrar la forma de sacudirse aquello que impide avanzar a lo largo de 12 meses.

La mayor parte del posicionamiento emitido en el salón de Cabildos y posteriormente el Teatro de la Ciudad, fue encaminado a denunciar el intento de “desequilibrar” su gobierno por grupos del pasado en lugar de emitir un mensaje que recobre la confianza del ciudadano común y desde luego, de los sectores productivos como los organismos empresariales, la mayor parte ausentes en el informe por su inconformidad a temas como el proyecto peatonal del Centro Histórico y la falta de control del comercio informal.

En ningún momento se hizo el reconocimiento de avanzar lentamente en responder a la expectativa ciudadana, aunque hubo quien sí se lo recordó como fue la priista Silvia Tanús, quien emitió un duro pero acertado posicionamiento al decir que la administración pública se ha caracterizado por su curva de aprendizaje muy lenta.

Claudia Rivera Vivanco dejó de lado directamente hablar de temas que son vitales para la ciudad como la seguridad pública y la presencia del comercio ambulante.

Del primero, omitió cifras o acciones que permitan conocer que se marcha por la ruta correcta encaminada a recuperar la tranquilidad en las calles.

Solamente se enfocó a hablar de inversiones y operativos en mercados municipales considerados focos rojos de la delincuencia.

Peor está el caso de los ambulantes.

Una mención valió 12 meses del primer año de mandato al referirse que mediante diálogo y operativos, se liberó de puestos -a medias- el corredor de la calle 5 de Mayo… ya veremos si dirá lo mismo previo y posterior a la celebración del evento comercial El Buen Fin y las temporadas de fin de año y del día de Reyes Magos.

Si existe una disminución del número de puestos en el Centro Histórico como lo ha dicho el secretario de Gobernación, René Sánchez Galindo, ¿por qué no se habló en el informe?

¿Acaso no era importante destacar este logro en un evento de tal magnitud?

¿Tampoco valía la pena la supuesta disminución de informales en puntos como afuera de hospitales y clínicas del sector público?

Si bien la presidenta municipal anunció ayer que este segundo año de gobierno será la consolidación de su plan de trabajo, no existe confianza porque sea así.

En primera porque no se observa la intención de cambiar lo que está sin funcionar, es decir, cambios o ajustes de sus funcionarios de primer nivel cuyo desempeño no se puede calificar de malo, pero sí de incumplir con las expectativas de la ciudad.

Anuncios como el bacheo máximo en 48 horas no garantiza trabajo eficiente, cuando existen vialidades primarias o de alto flujo como la 2 Sur y parte de Calzada Zavaleta, con dirección al Bulevar Forjadores, llevan más de seis meses sin tapar desperfectos de la cinta asfáltica que han cobrado vida a decenas de llantas y rines.

Sin embargo, por el bien de la ciudad, es necesario darle el beneficio de la duda.

Los ciudadanos debemos sumar nuestro esfuerzo a lo hecho por el ayuntamiento, pero es necesario que la alcaldesa cambie la percepción que se tiene y la mejor manera son los resultados.

Claudia Rivera Vivanco tiene la misión de callar bocas por el bien de su administración, pero sobre todo por la ciudad de Puebla.

Usted tiene la palabra.

Comentarios:

anaconda138@hotmail.com

marcomironc@gmail.com

@Marcomironc

El primer informe de la alcaldesa de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, fue como se esperaba: denunciar la existencia de fuerzas del pasado que buscan afectar su gobierno, sin reconocer abiertamente que es necesario reestructurar el plan de trabajo que arroje resultados, sin perder la esencia de la llamada Cuarta Transformación.

La curva de aprendizaje por allegarse de gran parte de titulares de secretarías o dependencias con poca o nula experiencia en el servicio público, se vio reflejado en su discurso.

Desde luego que todo cambio está sujeto a resistencias, como lo expresó Rivera Vivanco, pero la misión de la líder de un proyecto es encontrar la forma de sacudirse aquello que impide avanzar a lo largo de 12 meses.

La mayor parte del posicionamiento emitido en el salón de Cabildos y posteriormente el Teatro de la Ciudad, fue encaminado a denunciar el intento de “desequilibrar” su gobierno por grupos del pasado en lugar de emitir un mensaje que recobre la confianza del ciudadano común y desde luego, de los sectores productivos como los organismos empresariales, la mayor parte ausentes en el informe por su inconformidad a temas como el proyecto peatonal del Centro Histórico y la falta de control del comercio informal.

En ningún momento se hizo el reconocimiento de avanzar lentamente en responder a la expectativa ciudadana, aunque hubo quien sí se lo recordó como fue la priista Silvia Tanús, quien emitió un duro pero acertado posicionamiento al decir que la administración pública se ha caracterizado por su curva de aprendizaje muy lenta.

Claudia Rivera Vivanco dejó de lado directamente hablar de temas que son vitales para la ciudad como la seguridad pública y la presencia del comercio ambulante.

Del primero, omitió cifras o acciones que permitan conocer que se marcha por la ruta correcta encaminada a recuperar la tranquilidad en las calles.

Solamente se enfocó a hablar de inversiones y operativos en mercados municipales considerados focos rojos de la delincuencia.

Peor está el caso de los ambulantes.

Una mención valió 12 meses del primer año de mandato al referirse que mediante diálogo y operativos, se liberó de puestos -a medias- el corredor de la calle 5 de Mayo… ya veremos si dirá lo mismo previo y posterior a la celebración del evento comercial El Buen Fin y las temporadas de fin de año y del día de Reyes Magos.

Si existe una disminución del número de puestos en el Centro Histórico como lo ha dicho el secretario de Gobernación, René Sánchez Galindo, ¿por qué no se habló en el informe?

¿Acaso no era importante destacar este logro en un evento de tal magnitud?

¿Tampoco valía la pena la supuesta disminución de informales en puntos como afuera de hospitales y clínicas del sector público?

Si bien la presidenta municipal anunció ayer que este segundo año de gobierno será la consolidación de su plan de trabajo, no existe confianza porque sea así.

En primera porque no se observa la intención de cambiar lo que está sin funcionar, es decir, cambios o ajustes de sus funcionarios de primer nivel cuyo desempeño no se puede calificar de malo, pero sí de incumplir con las expectativas de la ciudad.

Anuncios como el bacheo máximo en 48 horas no garantiza trabajo eficiente, cuando existen vialidades primarias o de alto flujo como la 2 Sur y parte de Calzada Zavaleta, con dirección al Bulevar Forjadores, llevan más de seis meses sin tapar desperfectos de la cinta asfáltica que han cobrado vida a decenas de llantas y rines.

Sin embargo, por el bien de la ciudad, es necesario darle el beneficio de la duda.

Los ciudadanos debemos sumar nuestro esfuerzo a lo hecho por el ayuntamiento, pero es necesario que la alcaldesa cambie la percepción que se tiene y la mejor manera son los resultados.

Claudia Rivera Vivanco tiene la misión de callar bocas por el bien de su administración, pero sobre todo por la ciudad de Puebla.

Usted tiene la palabra.

Comentarios:

anaconda138@hotmail.com

marcomironc@gmail.com

@Marcomironc