/ miércoles 28 de noviembre de 2018

Se perfila una mujer gobernadora se concrete o no la anulación

A unas horas o días de que se conozca el veredicto del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, la mayoría morenista en el Congreso del Estado ya tiene armado su escenario en caso de la anulación.

Si las autoridades electorales optan por echar abajo el triunfo de la panista Martha Erika Alonso Hidalgo, en el partido de Andrés Manuel López Obrador ya se frotan las manos para colocar en la hipotética gubernatura interina a una de sus piezas, ¿con la bendición de quién creen? Pues del excandidato gubernamental, Luis Miguel Barbosa Huerta.

La mayoría de diputados emanados de la coalición integrada por Morena, Partido del Trabajo y Partido Encuentro Social ha determinado que una mujer sea su carta para ocupar de manera interina la gubernatura poblana.

Se trata de María Rosa Márquez Cabrera, quien es regidora del Ayuntamiento de Puebla, es morenista y ocupa la presidencia de la Comisión de Desarrollo Rural y Asuntos Indígenas.

Tiene estudios en Medicina por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), fue diputada federal por el PRD entre 1994 y 1997, ocupó la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las comunidades en el Gobierno del Distrito Federal encabezado por Marcelo Ebrard Casaubón, pero su mayor mérito es que es incondicional de Luis Miguel Barbosa.

Como quien dice, el exsenador perredista, convertido al morenismo, busca tener mano en caso de una eventual repetición de los comicios y de que en su partido le vuelvan a dar la candidatura al gobierno del Estado de Puebla.

Un cargo de tres o cinco meses que no interesa a quienes aspiran a esa posición por un sexenio, como los diputados José Juan Espinosa o Gabriel Biestro.

***

Ahora bien, para que se concrete el nombramiento del interino, la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Puebla establece que deberá “nombrar(se), por consenso o por mayoría calificada” al gobernador interino, es decir que la lógica haría suponer que los 22 diputados morenistas e incluso los cuatro del PRI y el del Verde serían insuficientes para llegar a los 28 votos necesarios, esto es, para lograr dos terceras partes en un escenario de 41 diputados presentes en la sesión del Pleno.

Aquí le va la estrategia para romper el candado con el que pretenden dejar fuera a los morenovallistas de la definición de la hasta ahora hipotética gubernatura interina.

Por supuesto que tiene que ver con una negociación con la bancada priista y con el diputado Juan Pablo Kuri Carballo, del Partido Verde, pero no solo para obtener sus votos sino para que uno o dos de ellos se ausente de la sesión en la que se vote el perfil de gobernador interino.

Con ello, las dos terceras partes de votos pasarían a 26 o 27, suficientes para que los diputados encabezados por el panista Marcelo García Almaguer y el panalista Gerardo Islas Maldonados no sean determinantes para la decisión.

La apuesta en Morena es que con el Partido Verde, cercano al lopezobradorismo a nivel nacional, se pueda negociar la ausencia o voto a favor de su diputado local y con los priistas llegue una indicación del aún presidente, Enrique Peña Nieto, para dar sus votos en el entendido de que López Obrador le aplique la amnistía política.

Si la máxima autoridad decide ratificar el triunfo de la panista Martha Erika Alonso Hidalgo, el escenario de los morenistas obviamente se anula y entrará la estrategia de convertirse en la extraña figura de mayoría parlamentaria de oposición con los dolores de cabeza que ello implique al nuevo gobierno.

***

En la Secretaría de Finanzas y Administración predominan las caras largas y la frustración puesto que por una razón que desconocen los trabajadores fueron informados de que las vacaciones decembrinas quedaban suspendidas para todos.

Fue el pasado viernes cuando los empleados fueron notificados de que para este fin de año no habrá espacio para hacer efectivo el calendario acordado para quienes toman sus días entre el 20 y 31 de diciembre.

Hasta ahora no existe una justificación de la determinación de sus superiores, cuando en teoría ya no estarán bajo sus órdenes dado que entrará un nuevo gobierno.

Y hasta la próxima.

salvador_rios@elsoldepuebla.com.mx

Twitter: @elsalvadorrios

A unas horas o días de que se conozca el veredicto del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, la mayoría morenista en el Congreso del Estado ya tiene armado su escenario en caso de la anulación.

Si las autoridades electorales optan por echar abajo el triunfo de la panista Martha Erika Alonso Hidalgo, en el partido de Andrés Manuel López Obrador ya se frotan las manos para colocar en la hipotética gubernatura interina a una de sus piezas, ¿con la bendición de quién creen? Pues del excandidato gubernamental, Luis Miguel Barbosa Huerta.

La mayoría de diputados emanados de la coalición integrada por Morena, Partido del Trabajo y Partido Encuentro Social ha determinado que una mujer sea su carta para ocupar de manera interina la gubernatura poblana.

Se trata de María Rosa Márquez Cabrera, quien es regidora del Ayuntamiento de Puebla, es morenista y ocupa la presidencia de la Comisión de Desarrollo Rural y Asuntos Indígenas.

Tiene estudios en Medicina por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), fue diputada federal por el PRD entre 1994 y 1997, ocupó la Secretaría de Desarrollo Rural y Equidad para las comunidades en el Gobierno del Distrito Federal encabezado por Marcelo Ebrard Casaubón, pero su mayor mérito es que es incondicional de Luis Miguel Barbosa.

Como quien dice, el exsenador perredista, convertido al morenismo, busca tener mano en caso de una eventual repetición de los comicios y de que en su partido le vuelvan a dar la candidatura al gobierno del Estado de Puebla.

Un cargo de tres o cinco meses que no interesa a quienes aspiran a esa posición por un sexenio, como los diputados José Juan Espinosa o Gabriel Biestro.

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Ahora bien, para que se concrete el nombramiento del interino, la Constitución Política del Estado Libre y Soberano de Puebla establece que deberá “nombrar(se), por consenso o por mayoría calificada” al gobernador interino, es decir que la lógica haría suponer que los 22 diputados morenistas e incluso los cuatro del PRI y el del Verde serían insuficientes para llegar a los 28 votos necesarios, esto es, para lograr dos terceras partes en un escenario de 41 diputados presentes en la sesión del Pleno.

Aquí le va la estrategia para romper el candado con el que pretenden dejar fuera a los morenovallistas de la definición de la hasta ahora hipotética gubernatura interina.

Por supuesto que tiene que ver con una negociación con la bancada priista y con el diputado Juan Pablo Kuri Carballo, del Partido Verde, pero no solo para obtener sus votos sino para que uno o dos de ellos se ausente de la sesión en la que se vote el perfil de gobernador interino.

Con ello, las dos terceras partes de votos pasarían a 26 o 27, suficientes para que los diputados encabezados por el panista Marcelo García Almaguer y el panalista Gerardo Islas Maldonados no sean determinantes para la decisión.

La apuesta en Morena es que con el Partido Verde, cercano al lopezobradorismo a nivel nacional, se pueda negociar la ausencia o voto a favor de su diputado local y con los priistas llegue una indicación del aún presidente, Enrique Peña Nieto, para dar sus votos en el entendido de que López Obrador le aplique la amnistía política.

Si la máxima autoridad decide ratificar el triunfo de la panista Martha Erika Alonso Hidalgo, el escenario de los morenistas obviamente se anula y entrará la estrategia de convertirse en la extraña figura de mayoría parlamentaria de oposición con los dolores de cabeza que ello implique al nuevo gobierno.

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En la Secretaría de Finanzas y Administración predominan las caras largas y la frustración puesto que por una razón que desconocen los trabajadores fueron informados de que las vacaciones decembrinas quedaban suspendidas para todos.

Fue el pasado viernes cuando los empleados fueron notificados de que para este fin de año no habrá espacio para hacer efectivo el calendario acordado para quienes toman sus días entre el 20 y 31 de diciembre.

Hasta ahora no existe una justificación de la determinación de sus superiores, cuando en teoría ya no estarán bajo sus órdenes dado que entrará un nuevo gobierno.

Y hasta la próxima.

salvador_rios@elsoldepuebla.com.mx

Twitter: @elsalvadorrios