/ lunes 14 de mayo de 2018

Trump quiere que obreros automotrices ganen más

DONALD TRUMP QUIERE convertirse en héroe redentor de los trabajadores mexicanos de la industria automotriz al querer imponer, dentro de las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), una zona de alto salario de 16 dólares por hora, pero ha metido en aprietos a los únicos que se oponen terminantemente a que esto suceda en México: el presidente Enrique Peña Nieto, los directivos de las plantas automotrices mexicanas, los presidentes de cámaras empresariales y, lo más inaudito, los líderes charros del sindicalismo mexicano.

EL SECRETARIO DE Economía, Ildefonso Guajardo, dijo a mediados de abril que Estados Unidos está dispuesto a modificar su exigencia de elevar a 85 por ciento el contenido regional y a 50 por ciento el contenido estadunidense en la industria automotriz, uno de los principales capítulos que han atorado el proceso, a cambio de crear una zona de alto salario, de 15 dólares por hora.

EL DIA EN QUE las empresas trasnacionales automovilísticas le suban los salarios a los trabajadores mexicanos, ese mismo día podrían salir de territorio mexicano, al cual han venido precisamente porque pagan a los obreros automotrices los salarios más ínfimos, que les permiten obtener grandes ahorros y ganancias adicionales por miles de millones de dólares al año.

POR ESTA CAUSA, los bajísimos salarios, México estaba llamado a ser el quinto armador de automóviles del mundo para el 2024, con una producción de 5 millones de unidades al año, hasta que vino Donald Trump a tratar de cambiar todas las reglas del juego que había en América del Norte, con las que en México se arman los coches y el 80% se exportan a Estados Unidos, libres de impuestos, aprovechando el trato preferencial de ser socio del TLACAN.

LA ENORME VENTAJA de México dentro del TLCAN, la que lo convierte en un territorio estratégico, atractivo y altamente rentable para las empresas trasnacionales, son precisamente los bajos salarios y su posicionamiento de socio preferencial, que le permite ser sede de la producción automotriz a grande escala con el envío de sus automóviles libres de impuestos al mercado norteamericano.

A ESTO HABRÁ que añadirle, aparte de los bajísimos salarios, el trato preferencial que el gobierno mexicano y los gobiernos de los estados le dan al capital trasnacional, regalándole terrenos, construyéndole infraestructura y hasta naves industriales, carreteras y comunicaciones, así como la exención de impuestos, a cambio de que se instalen en su territorio. Las políticas de fomento y promoción industrial de los gobiernos les han dado desde hace décadas todo esto y más a las automotrices a cambio de la creación de algunos miles de empleos.

LAS GRANDES BENEFICIADAS con el TLCAN son: Audi, Ford, Chrysler, Mazda, Toyota, Honda, Volkswagen de México, General Motors, Nissan, Hyunday y Kia, las cuales se ahorran, según cifras de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), solo por pagar mano de obra barata, entre mil 600 y mil 800 millones de dólares al año por casi tres millones de autos que exportan al mercado estadunidense. Las automotrices pagan a 24 dólares la hora en Estados Unidos y, en México, 2.3 dólares la hora. En el sacrificio económico de la mano de obra fincan sus altos niveles de competitividad.

SI MÉXICO ACEPTARA crear una zona salarial de 15 dólares la hora, a una cotización actual de 18.70 pesos por dólar, dicho salario sería equivalente a 279.90 pesos por hora, y a 2 mil 240 pesos en una jornada de ocho horas, 10 veces más que lo que se gana actualmente en promedio, que son 200 o 220 pesos diarios el salario promedio del obrero. Y aun así quedaría abajo del nivel de los trabajadores norteamericanos del sector automotriz, que ganan 24 dólares por hora.

DONLD TRUMP ALEGA que el gobierno mexicano subsidia a las empresas automotrices con los bajos salarios, lo cual es cierto. Trump tiene agarrado a México por el cuello, si no es el incremento a los salarios será el aumento de las reglas de origen de 62.5 a 85, y el contenido estadunidense al 50% en la industria automotriz. El TLCAN está atorado, no saldrá en mayo como dicen sus voceros de Estados Unidos, Canadá y México. ESCÚCHANOS DIARIAMENTE de 13 a la 14 horas en 1280 de am, en ABC RADIO.

DONALD TRUMP QUIERE convertirse en héroe redentor de los trabajadores mexicanos de la industria automotriz al querer imponer, dentro de las renegociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), una zona de alto salario de 16 dólares por hora, pero ha metido en aprietos a los únicos que se oponen terminantemente a que esto suceda en México: el presidente Enrique Peña Nieto, los directivos de las plantas automotrices mexicanas, los presidentes de cámaras empresariales y, lo más inaudito, los líderes charros del sindicalismo mexicano.

EL SECRETARIO DE Economía, Ildefonso Guajardo, dijo a mediados de abril que Estados Unidos está dispuesto a modificar su exigencia de elevar a 85 por ciento el contenido regional y a 50 por ciento el contenido estadunidense en la industria automotriz, uno de los principales capítulos que han atorado el proceso, a cambio de crear una zona de alto salario, de 15 dólares por hora.

EL DIA EN QUE las empresas trasnacionales automovilísticas le suban los salarios a los trabajadores mexicanos, ese mismo día podrían salir de territorio mexicano, al cual han venido precisamente porque pagan a los obreros automotrices los salarios más ínfimos, que les permiten obtener grandes ahorros y ganancias adicionales por miles de millones de dólares al año.

POR ESTA CAUSA, los bajísimos salarios, México estaba llamado a ser el quinto armador de automóviles del mundo para el 2024, con una producción de 5 millones de unidades al año, hasta que vino Donald Trump a tratar de cambiar todas las reglas del juego que había en América del Norte, con las que en México se arman los coches y el 80% se exportan a Estados Unidos, libres de impuestos, aprovechando el trato preferencial de ser socio del TLACAN.

LA ENORME VENTAJA de México dentro del TLCAN, la que lo convierte en un territorio estratégico, atractivo y altamente rentable para las empresas trasnacionales, son precisamente los bajos salarios y su posicionamiento de socio preferencial, que le permite ser sede de la producción automotriz a grande escala con el envío de sus automóviles libres de impuestos al mercado norteamericano.

A ESTO HABRÁ que añadirle, aparte de los bajísimos salarios, el trato preferencial que el gobierno mexicano y los gobiernos de los estados le dan al capital trasnacional, regalándole terrenos, construyéndole infraestructura y hasta naves industriales, carreteras y comunicaciones, así como la exención de impuestos, a cambio de que se instalen en su territorio. Las políticas de fomento y promoción industrial de los gobiernos les han dado desde hace décadas todo esto y más a las automotrices a cambio de la creación de algunos miles de empleos.

LAS GRANDES BENEFICIADAS con el TLCAN son: Audi, Ford, Chrysler, Mazda, Toyota, Honda, Volkswagen de México, General Motors, Nissan, Hyunday y Kia, las cuales se ahorran, según cifras de la Comisión Económica para América Latina (CEPAL), solo por pagar mano de obra barata, entre mil 600 y mil 800 millones de dólares al año por casi tres millones de autos que exportan al mercado estadunidense. Las automotrices pagan a 24 dólares la hora en Estados Unidos y, en México, 2.3 dólares la hora. En el sacrificio económico de la mano de obra fincan sus altos niveles de competitividad.

SI MÉXICO ACEPTARA crear una zona salarial de 15 dólares la hora, a una cotización actual de 18.70 pesos por dólar, dicho salario sería equivalente a 279.90 pesos por hora, y a 2 mil 240 pesos en una jornada de ocho horas, 10 veces más que lo que se gana actualmente en promedio, que son 200 o 220 pesos diarios el salario promedio del obrero. Y aun así quedaría abajo del nivel de los trabajadores norteamericanos del sector automotriz, que ganan 24 dólares por hora.

DONLD TRUMP ALEGA que el gobierno mexicano subsidia a las empresas automotrices con los bajos salarios, lo cual es cierto. Trump tiene agarrado a México por el cuello, si no es el incremento a los salarios será el aumento de las reglas de origen de 62.5 a 85, y el contenido estadunidense al 50% en la industria automotriz. El TLCAN está atorado, no saldrá en mayo como dicen sus voceros de Estados Unidos, Canadá y México. ESCÚCHANOS DIARIAMENTE de 13 a la 14 horas en 1280 de am, en ABC RADIO.