Sin lugar a dudas la era digital ha producido una revoluciónsocial. No solo trajo consigo un acceso casi ilimitado a lainformación, también ha hecho que las relaciones interpersonaleshayan cambiado.
Y es verdad que la tecnología ha traído múltiples beneficiosa nuestras vidas pero ha impactado profundamente la manera en comolos seres humanos nos comunicamos y relacionamos.
El uso excesivo de internet y de cualquier dispositivointeligente (celular, tablets, etc.) ha llegado al punto de afectary destruir relaciones de pareja, amigos, matrimonios y defamilia.
EL PROBLEMA
“La comunicación frente a frente implica verte a los ojos,desnudar tu alma” dice la psicóloga Ana Isabel Quintana. Aseguraque antes la convivencia era más legítima, había un diálogo.Ahora es común estar en la misma habitación y conversar sinmirarnos a la cara. Hoy los padres hablan menos con los hijos y losmatrimonios siempre están acompañados de un tercero: elcelular.
“El problema es la formación”, asegura Quintana, tú comoadulto primero debes tomar consciencia de que el celular es solouna herramienta de comunicación (para saber dónde están losniños, para una emergencia) y hacérselo entender así a tushijos.
“Los niños aprenden lo que ven, son el reflejo de lospadres”, afirma la psicóloga; si tú como padre le hablas alniño en sus horas de colegio o todo el tiempo contestas mensajesde trabajo (en casa, al comer, en el cine, en el club) “fomentasel uso desmedido de la tecnología, tus hijos no comprenderán nirespetarán el límite”.
EL USO PEDAGÓGICO DE LAWEB
Por otra parte, dice la psicóloga, se debe enseñar a los hijoscómo utilizar la web como herramienta didáctica para consultasinformativas. No debemos creer en lo primero que leemos ya que estodeteriora y disminuye nuestra capacidad de discernimiento; “a lainformación no se le hace copy paste, sino se lee y se traducepara que haya un aprendizaje”.
El uso de internet se debe hacer con cautela y de preferenciabajo supervisión de los padres, al menos hasta que los hijosalcancen cierta madurez, “es peligroso que ellos se metan a redesy divulguen información de su vida personal y familiar” dice,“y no hay que satanizar, se deben conocer ventajas y desventajasy dárselas a conocer a nuestros hijos para llegar a acuerdos”. Yagregó: “hay que poner límites consensuados y evaluarconstantemente”.
LIMITA EL USO DE LAS TECNOLOGÍAS
También es cierto que el uso del celular es “inconsciente”,dice Quintana, no nos damos cuenta del tiempo que lo usamos(conectados a redes o al chat) ni cuál es su impacto en laspersonas que nos rodean, principalmente en la familia. “Ten encuenta que las horas que inviertes conectado es tiempo perdido deconvivencia con la(s) persona(s) que amas y no lo vas a poderrecuperar”, afirma.
LA SOLUCIÓN
Busca espacios para actividades de integración familiar en loscuales “se deba apagar el celular por norma” como pintar, leer,escribir, cocinar, caminar, practicar deportes, hacer juegos demesa, cenar, etc., de esta manera no solo mantendrás comunicacióncon tus hijos, además “conocerás su entorno y fomentarás sucreatividad”, asentó Quintana Camacho.
Dicen que los smartphones acercan a personas que están amillones de kilómetros de ti, pero también “alejan” a los queestán cerca. No dejes que su uso afecte tu vida, el celular es uninstrumento a tu servicio y no al revés.
Mira a tu alrededor, estás perdiendo momentos valiosos de tuvida. Toma la decisión, hazlo por ti y por los que amas.
CONTACTO:
Psic. Ana Isabel QuintanaCamacho
Especialista en formación humana y manejo deadolecentes
Móvil (222) 507-0748
