Si eres pintor, nadas o practicas tenis, seguramente alguna vez has sentido dolor en el hombro, que es bastante común, pero ¿sabes si es solo inflamación o tienes algún problema mayor?
“El manguito rotador es un grupo de músculos y tendones que rodean la articulación del hombro para proporcionarle estabilidad, mantiene la cabeza de húmero dentro de la cavidad glenoidea, lo que facilita su movilidad”, expone Eduardo López Villalobos, especialista en urgencias médico quirúrgicas y coordinador del servicio de urgencias de la UPAEP.
Este grupo de músculos y sus tendones que conforman el manguito rotador son: el músculo subescapular, que rota internamente el húmero; el supraespinoso, que realza los primero 15 o 20 grados de movimiento de abducción del brazo; el infraespinoso, permite rotar externamente el brazo; y el redondo menor, que también participa en la rotación externa del brazo.
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Explica que la lesión de manguito rotador, se refiere a una inflamación, dolor o hinchazón, o daño en uno o más de los músculos y tendones que los constituyen.
“Este es un problema de tipo frecuente, pero puede provocar un dolor intenso a nivel del hombro que a menudo empeora con el uso de la extremidad, porque mientras más se aleje el brazo del hombro, más dolor provocará”, detalla.
“Hay movimientos que no debe realizar el hombro (aunque sí puede), porque no está capacitado al 100% para ello, una de esos es la extensión del brazo, forzarlos muchos y separarlos del cuerpo para impulsarlos por arriba del hombro, provocar dolor a nivel de esa zona”, añade.
LESIONES MÁS COMUNES
Refiere que las lesiones más comunes del manguito rotador son: tendinitis, cuando se inflaman de los tendones de esa zona porque quedan pellizcados contra otra estructura del hombro; y desgarramientos, total o parcial, de los músculos o tendones, como resultado de una caída, pequeños desgarros causados por el uso y desgaste del tiempo. Esto también se conoce como esguince de hombro.
¿QUÉ LO CAUSA?
Las lesiones del manguito rotador pueden ocurrir por levantar o arrastrar objetos pesados, levantarlos de manera inadecuada, así como ciertas actividades o deportes, pueden aumentar la posibilidad de tenerlo.
“El manguito rotador se produce por la acción de movimientos repetitivos para levantar los brazos por encima de la cabeza. Como ejemplo están la práctica de deportes como el tenis, voleibol, futbol americano, nadar o levantar pesas; y realizar trabajos de albañilería o del hogar”, señala.
Asegura que las personas de más de 60 años que están realizando este tipo de mecanismos, corren mayor riesgo porque por la edad los tendones empiezan a desgastarse.
¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS?
Dolor profundo en el hombro o sensibilidad, en especial cuando se levanta el brazo en forma lateral o hacia atrás, o arrastra peso. Con dificultad para realizar acciones tan sencillas como peinarse o rascarse la espalda.
Dolor por la noche, sobre todo si la persona se recuesta sobre el hombro lastimado inmediatamente despierta porque siente el dolor intenso y tiene que cambiar de posición
Debilidad a nivel del brazo, tiene sensación de falta de fuerza y en realidad no es porque le falte fuerza sino porque el mismo dolor al momento de hacer un esfuerzo con su brazo le va a impedir hacerlo.
El dolor puede aparecer de forma gradual, en el caso de la tendinitis, o sentir punzadas dolorosas cuando es desgarramiento. En caso de presentar síntomas lo mejor es visitar de inmediato al médico o al fisioterapeuta.
“En caso de tener presentar alguno de estos síntomas debes visitar a tu médico o a un fisioterapeuta para que ellos determinen el grado de la lesión y hagan un diagnóstico”, concluye.
FISIOTERAPIA PARA SANAR
Las lesiones del manguito rotador más comunes son las que no requieren cirugías, más bien requieren reposo, desinflamatorios y rehabilitación. Pero si es una lesión grave, como ruptura del tendón o desgarro total de los músculos, la inmovilización no servirá de nada y tendría que realizarse un tratamiento quirúrgico.
Eso lo determinará el médico, lo que sí es un hecho es que, operen o no al paciente, tendrá que acudir a rehabilitación con un fisioterapeuta. El reposo ayuda a cicatrizar el tejido que está desgarrado, pero la fisioterapia ayuda a fortalecer esos músculos del hombro para que no se vuelva a repetir ese tipo de lesión y será el especialista el que determinará qué hacer para no volverse a lastimar.
Fernanda Lizaola*, quirofísico-quiropráctico de la clínica Praxisquiro, asegura que las lesiones tipo esguince generalmente se alivian con inmovilización a través de un cabestrillo, que es lo que terminará de quitar el problema, por otro lado, hay lesiones más fuertes a las que se les necesita hacer una resonancia para determinar la gravedad, pero en ambos casos se tiene que realizar fisioterapia para rehabilitar el hombro. Algunas de las que ella recomienda son las siguientes:
Terapia Manual. Su objetivo es recuperar el movimiento cuando las articulaciones presentan una restricción, aliviar el dolor muscular, articular y mejorar la funcionalidad del paciente.
Neurotape. Activa la circulación sanguínea y linfática, disminuye la inflamación y hematomas, acelera el proceso de reparación de la lesión.
Hidroterapia. Aplicación interna o externa del agua para el tratamiento de disfunción física o psicológica. Sirve para ayudar dolencias, desde reumatismo y neuralgias, hasta padecimientos neurológicos.
Electroterapia. A través de aparatos de métodos físicos tales como ultrasonido y radiofrecuencia.
Ventosas. Se pegan al cuerpo vasos de succión de diferentes tamaños, lo que trae la sangre estancada a la superficie de la piel y mejora la circulación a través de los tejidos, lo que aumenta la velocidad de la sanación.
* Tel. 222-310-6962
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